No hay deporte minoritario. Lo demuestra la celebración de los Juegos Olímpicos, cada cuatro años, con la exaltación de todo tipo de disciplinas que pasan desapercibidas en otras grandes competiciones internacionales. Porque por sorprendente que parezca a los forofos del futbol, el baloncesto y el tenis, hay mucho más horizonte. Y es que no nos faltan atletas preparados en España, sea cual sea el cometido. Las Olimpiadas son el momento ideal para recordarlo en el imaginario colectivo, con jugadas maestras como las que protagoniza partido tras partido la onubense Carolina Marín. La indiscutible estrella española del bádminton, tres veces campeona mundial y oro olímpico en Río de Janeiro 2016.

Ese oro que la de Huelva procurará revalidar este año en París, haciendo gala de una maestría impresionante en el terreno de juego a sus 31 años. Una exquisita forma de dominar el manejo de la raqueta y el volante para la que, día sí y día también, entrena muy duro. Largas jornadas para ejercitarse y seguir progresando en su carrera como jugadora, pero también encontrando los huecos necesarios para el descanso. Relajarse, que también es imprescindible para el cuerpo y la mente cuando uno se somete a la presión que implican este tipo de competiciones. Tener un lugar al que volver para poder estar tranquila. Un espacio al que llamar hogar, que en el caso de Marín nos remite a una casa en la que el minimalismo consigue combinar la frescura con la paz de lo acogedor. ¡Entramos en ella! 

Minimalismo y modernidad acogedora en el interior

Conocer cómo es el interior del lugar donde vive una persona nos da muchas pistas sobre su carácter y su personalidad. Dónde coloca los elementos, con qué decide ornamentar las estancias y cuáles son esas zonas con un toque extra de personalidad. En el caso de Carolina, es la propia jugadora de bádminton la que no tiene reparo en compartir con sus fans todos los detalles de la vivienda en la que reside. Alejada de su Andalucía natal y en la capital, hasta donde se trasladó en el momento en el que comenzó su carrera como deportista de élite, enseña los rincones más especiales de su domicilio.

Sin ir más lejos, y para deleite de sus más de 470.000 seguidores en la red social, la olímpica publicó el pasado enero un vídeo corto en formato 'reel' en el que se aprecia todo con claridad. En el marco de un día de relax, con la calma suficiente para cumplir con sus rutinas de desconexión, comenzando por el baño.

Carolina Marín baño
@carolinamarin

Desde el primer momento, y partiendo de la decoración elegida para el excusado, se puede sacar en claro que el blanco es el color predominante en la residencia de la deportista. La base del minimalismo, con una pared en tono crudo con relieves geométricos y una pica moderna que sobresale del mármol, también en una tonalidad muy clara.

Después viene su cocina, que es sin duda uno de los espacios más completos. Equipada hasta los topes, con isla central para la encimera en la que prepara sus platos favoritos -y unos contundentes desayunos en los que la fruta es la gran protagonista-, aunque en este caso opte por un mobiliario negro que contrasta con la claridad del resto de las paredes.

Carolina Marín cocina
@carolinamarin

Es también en esta grabación de su faceta más personal donde lo acogedor gana relevancia. Sobre todo en el salón, donde tapada con una manta durante los meses de invierno, disfruta de tumbarse en su sofá de ante oscuro mientras observa su enorme televisión de pantalla plana. Sin mueble para la tele propiamente dicho, con una mesa baja cubierta con un hule floral en el centro de la habitación, y decoraciones en madera, así como plantas, que dan un toque extra de variedad cromática.

Salón Carolina Marín
@carolinamarin

Ella fue la que, semanas antes, permitió conocer como es ese salón desde el otro lado. Con una instantánea donde se la ve en ese mismo sofá, con su pijama de y tomando una bebida caliente en una taza, y aportando una nota extra. ¿Dónde? ¡En la pared! Nada más y nada menos que una enorme pintura de un atardecer en la playa preside esta estancia. 

Salón Carolina Marín
@carolinamarin

Al lado, una estantería, también en madera, en la que coloca artículos de los más variados que añaden la nota necesaria de eclecticismo. De todo un poco para que no falte de nada, que se dice.

Una zona exterior bohemia (y refrescante)

Está claro que no todo iba a quedarse de puertas para afuera. Durante el verano pasado, Carolina Marín también aprovechó su presencia en la red para mostrar cómo es su 'pequeño jardín'. Una zona exterior en la que sigue reinando la calma en la disposición, con toques muy bohemios, como una hamaca de tela oscura que cuelga desde una barra de madera. Es ahí donde puede pasar largos ratos leyendo, a la sombra, y en un entorno tan natural como permita la metrópolis.

Terraza Carolina Marín
@carolinamarin

El verde de las plantas que rodean la parcela, así como del césped artificial -donde ha colocado una fina jardinera de madera-, son lo primero que se observa a simple vista. También un espacio en el que regresa tímidamente al blanco de los espacios interiores, con piedras que cubren una pequeña parte del suelo en la que ha colocado algunas macetas. Todo lo anterior, además de otro espacio verdaderamente refrescante. ¿Alguien ha dicho piscina?

 

Carolina Marín piscina
@carolinamarin

Nada mejor que darse un chapuzón y evitar el sofocante calor de la temporada estival. Carolina lo hace en una de esas piscinas prefabricadas que, aunque no es excesivamente grande, encaja a la perfección con esta terraza. Una terraza en la que le basta con dar unos pasos para tomar el sol bajo el agua tras cerrar su libro favorito.