Cuando el objetivo es acabar con la barriga y presumir de un vientre plano, no basta con adelgazar. También hay que deshincharse y eso implica combatir los gases, la retención de líquidos, el estreñimiento... Estas cenas te ayudarán a atacar el problema desde todos esos frentes.
¿Qué debo cenar para adelgazar la barriga?
- Alimentos ligeros y digestivos. Para que las cenas te resulten más fáciles de digerir, evita los carbohidratos, los lácteos, las verduras crudas, las ensaladas y el picante.
- Mejor pescado que carne. Evita las carnes rojas y decántate por las blancas y más magras (como el pavo, el pollo o el conejo), y mejor incluso si te decides por algún tipo de pescado, que resulta menos pesado.
- Controla la grasa. Para añadir el mínimo de grasa pinta el mismo alimento con aceite en lugar de ponerlo en la sartén o la plancha. En cuanto a los alimentos que vayas a hacer al horno, mejor quítales la piel y la grasa visible al principio porque si no la carne la irá absorbiendo durante la cocción.
- Reduce la cantidad de sal. La sal favorece la retención de líquidos, así que cuanto menos uses, mejor. Sala al final porque consigues más sabor salado añadiendo menos sal. Y sustitúyela siempre que puedas por especias.
- Cuidado con las coles. La coliflor, el repollo y las crucíferas en general favorecen los gases. Consúmelas con moderación, pero no las elimines de la dieta. En cambio, añádeles condimentos como el anís, hinojo, tomillo... que favorecen su digestión y reducen los gases.
- Toma una infusión. Remata la cena con una tisana de anís, hinojo, manzanilla, hierba luisa o tila, para evitar la pesadez.
- Bebe más agua durante el día. Así combates la retención de líquidos. Toma también alimentos diuréticos como el apio, la calabaza o el chucrut. Y evita las bebidas con gas.