Así es David Serrato, el hombre que ha devuelto la ilusión a Irene Villa tras el inesperado divorcio del padre de sus hijos

El amor sí llama dos veces, y basta con revisar infinitos casos que demuestran que romper una relación no es el fin del mundo. Para muestra, el caso de Irene Villa. En cuestión de unos pocos años, la periodista ha experimentado un giro de 180 grados en su vida, afrontando ahora una realidad personal bien distinta a la anterior. En ningún caso peor, cabe decir. Nunca sería peor estar a punto de vivir un momento tan emocionante como lo es el día de tu propia boda, aunque no será esta su primera vez pasando por el altar.

La crónica rosa lo viene recuperando en la previa al gran evento y en realidad hace ya más de un año que los enamorados anunciaron su compromiso. Porque sí, Villa vuelve a estar enamorada. De un hombre con el que lleva casi tres años saliendo, y después de haber hecho frente al proceso de adaptación que supone separarse de alguien con el que habías tomado la decisión de formar una familia. Tras siete años de matrimonio y con tres hijos en común, en diciembre de 2018 anunció su separación del empresario Juan Pablo Lauro, actual pareja de Nuria Fergó. No fue hasta el 2022 cuando se hizo público su noviazgo con David Serrato, con el que se dará el 'sí, quiero' este 21 de septiembre de 2024.

Será en el Monasterio de Santa María de la Vid, en Burgos, donde la también escritora y su actual prometido pondrán la guinda del pastel a esta relación madura. A sus 45 años, Irene degusta de nuevo las mieles del romanticismo y advierte una boda "muy familiar y también lacrimógena". Así lo hizo saber recientemente a la revista '¡Hola!', donde adelantó algunos detalles sobre la ceremonia, los invitados -con caras VIP como Paz Padilla entre ellos- o su vestido, que correrá a cargo de la diseñadora Silvia Fernández. Asimismo, son muchos los que todavía no conocen mucho sobre el hombre que le ha devuelto la ilusión a la comunicadora. ¿Quién es David Serrato y cómo se forjó esta segunda oportunidad al amor?

David Serrato, el 'coach' con el que derrocha complicidad

En la línea del relato de otras tantas parejas, lo de Irene y David comenzó como una simple amistad. Una relación que fue a más y entre ellos acabó por encenderse la llamada el amor, con la autora de 'Saber que se puede' abierta a volver a comenzar una relación. Fue a principios del año 2022 cuando la prensa comenzó a hacerse eco de este vínculo tan estrecho entre ambos, después de sorprenderlos en una cita romántica en el que derrochaban complicidad.

Gestos de cariño y afecto en público que inmediatamente despertaron el interés de los más curiosos acerca de la nueva ilusión de Villa casi cuatro años después de su repentina separación. Así comenzaron las indagaciones que apuntaron en primera instancia al trabajo de él como 'coach'. Serrato se dedica profesionalmente al asesoramiento de negocios y personas para el desarrollo personal, a través de sus empresas y su particular 'escuela de emociones'. Una labor que combina con otra de sus grandes pasiones, que además comparte con su prometida: los deportes.

Mientras que Irene forma parte del equipo de esquí alpino adaptado de la Fundación También -y fue campeona de España en el año 2021-, a su futuro marido la cosa le viene de familia. Es hijo de José Miguel Serrato, leyenda del voleibol en España. No es de extrañar que antes de meterse de lleno en el mundo del 'coaching' optase por licenciarse en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte por la Universidad de León, ser profesor de secundaria y universidades e incluso ejercer como subdirector del Centro de Alto Rendimiento Deportivo de Soria.

Más allá de la boda, de la despedida de solteros a la luna miel

A fin de cuentas, parece que lo de combinar disciplinas va en el ADN de ambos, pues a su futura esposa también le encanta tocar tantos palos como le sea posible en el terreno laboral. Quizás es porque encajan tanto que prefirieron pasar juntos su despedida de solteros, en una divertida fiesta en la que disfrutaron de la linda junto a sus allegados. Disfrazados de Ladybug y Cat Noir, dos superhéroes de dibujos animados, los prometidos se mostraron de lo más acaramelados disfrutando de un concierto.

Una velada desenfadada con música que será antesala del gran día, pero también de la ansiada luna de miel. Y es que la felicidad no termina tras ponerse las alianzas, porque después vendrá el esperado viaje de novios a México. Travesía que, en realidad, tiene una explicación, puesto que Irene tiene trabajo allí, y su recién estrenado marido la acompañará al otro lado del charco en sus primeros días de casados. Enclave idílico para relajarse, tomar distancia de lo cotidiano y celebrar el inicio de una vida en común.