Cuando pensamos en la limpieza de la casa y en darle una buena desinfección, el primer producto que nos viene a la mente es la lejía. Si bien se trata de un limpiador con un gran poder desinfectante, la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios), dice que no conviene que abusemos de ella, la lejía es corrosiva y su cloro reacciona con la materia orgánica formando compuestos organoclorados que no son buenos ni para nuestra salud ni para el medio ambiente. Por eso, la OCU recomienda que, a la hora de limpiar la casa, no la usemos o que lo hagamos con moderación.

Es más, la recomendación de la OCU va un pasito más allá y tampoco ve conveniente el uso de productos de limpieza que entre sus componentes contengan ingredientes como biocidas o antibacterianos. Para animarnos a ir dejando la lejía a un lado poco a poco, la OCU ha publicado este artículo donde desvela 5 alternativas para limpiar la casa más seguras e igual de efectivas que la lejía. Sigue leyendo y toma nota, esto te interesa.

5 alternativas más seguras que la lejía para limpiar según la OCU

La limpieza y desinfección de la casa es fundamental, pero no hay que llegar al punto de obsesionarse y de estar todo el día limpiando. De hecho, la desinfección es momentánea, un tiempo después de desinfectar, todo vuelve a llenarse de bacterias y hongos. Por eso, por mucho que limpies con lejía, tampoco conseguirás mucho más. Además, la lejía tiene una serie de consejos de uso y, si no sabes usarla bien, podría ser perjudicial para tu salud.

Además, en su artículo la OCU también afirma que no siempre es necesario desinfectar la casa, que lo mejor es hacerlo si hay sospechas de contaminación, así que otro motivo más para no abusar de la lejía. Por eso, la Organización recomienda el uso de otros productos que, siendo igual de efectivos que la lejía, son mucho más seguros.

La OCU recomienda no usar lejía para limpiar
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La OCU recomienda no usar lejía para limpiar

1. Productos con biocidas

Estos productos contienen sustancias químicas o microorganismos destinados a eliminar, neutralizar o controlar organismos nocivos. Pero, aunque son efectivos y más seguros que la lejía, la OCU tampoco recomienda abusar de ellos y dice que es mejor usarlos con cabeza. Además, a la larga también podrían generar la aparición de bacterias resistentes.

2. Productos con oxígeno activo

Los productos con oxígeno activo son una alternativa al cloro de la lejía y contienen compuestos que liberan oxígeno reactivo al disolverse en agua, proporcionando un efecto limpiador y desinfectante. Es muy bueno eliminando manchas, malos olores y microorganismos patógenos y son considerados una alternativa más ecológica ya que se descomponen en agua y oxígeno, minimizando el impacto ambiental. Aunque, de nuevo, la OCU recomienda usarlos con cuidado.

3. Vinagre blanco de limpieza

También hay alternativas naturales a la lejía, siendo la más respetuosa con el medio ambiente y más efectiva el vinagre blanco de limpieza. El ácido acético que contiene este producto es muy eficaz matando bacterias y es perfecto para limpiar los azulejos de la pared del cuarto de baño. Para un buen uso del vinagre blanco de limpieza, lo ideal es usarlo diluido mezclando 4 partes de agua y una de vinagre. Y ojo, no lo confundas con el vinagre de vino blanco que se usa para cocinar, tiene que ser vinagre blanco de limpieza.

4. Bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es un polvo blanco cristalino con propiedades alcalinas y una leve acción abrasiva. Se utiliza comúnmente en la cocina, pero también es un potente agente limpiador y una excelente alternativa a la lejía para limpiar la casa ya que es menos tóxico. Además, no emite vapores peligrosos, es biodegradable y no daña el medio ambiente. Es eficaz para desodorizar, eliminar manchas, limpiar superficies y destapar desagües.

5. Limón

El ácido cítrico del limón es una alternativa natural y efectiva a la lejía para la limpieza del hogar gracias a sus propiedades desinfectantes, desengrasantes y desodorizantes. Puede eliminar manchas de agua dura, residuos de jabón, moho y bacterias en superficies como encimeras, azulejos y baños. Además, es biodegradable.

Otros consejos de la OCU sobre el uso de la lejía en la limpieza

Como te comentamos antes, la OCU recomienda que no usemos lejía y que optemos mejor por alguna de las 5 alternativas anteriores porque son más seguras, aunque sí que dice que se puede usar para limpiar y desinfectar cuando haya sospechas de contaminación, por ejemplo, si en casa hay una persona con una enfermedad contagiosa o para limpiar las bayetas con las que limpiamos el fregadero o el inodoro. Eso sí, hay que saber usarla bien:

  • Antes de usar la lejía, elimina bien la suciedad que haya en la superficie que vayas a desinfectar con agua y jabón.
  • Usa mejor una lejía que no lleve perfumes, como la de uso alimentario.
  • Respeta las dosis recomendadas, como mucho, medio vaso por cada 2 litros de agua.
  • Dilúyela en agua fría, nunca en agua caliente porque se evapora su cloro y deja de desinfectar.
  • En la solución que prepares con agua fría y lejía, sumerge la bayeta durante 2 o 3 horas.
  • Usa siempre guantes y y gafas de plástico protectoras.
  • Abre las ventanas mientras la usas para que se vayan los vapores que emite.