Si haces tus bizcochos o magdalenas con azúcar, harina y aceite de girasol serán muy caseros, pero no son más saludables que los que venden en el supermercado.
La razón es que los ingredientes que se utilizan son ultraprocesados, igual que los de la repostería industrial. Ese azúcar o harina que utiliza una empresa alimentaria son prácticamente los mismos que utilizas tú en casa.
¿Y si la repostería es real food?
La repostería casera puede ser un buen procesado si lleva buenos ingredientes, como harina integral, avena, frutos secos, aceite de oliva virgen extra, huevos y si prescindimos del azúcar (tampoco vale el integral o la panela).
Un consumo ocasional
Aunque sea un procesado bueno, hay que comerlo de vez en cuando, no de manera diaria. Y lo más importante, no puede desplazar a alimentos reales que podrías tomar en un desayuno o merienda, como la fruta, los frutos secos, una rebanada de pan integral con una onza de chocolate de más del 75% de cacao... Además, por muy casera que sea, también es muy calórica.