Con garbo y aplomo, es innegable que los miembros de la familia real han afrontado en este 2024 todo tipo de retos. Han sido meses en los que ha vuelto a quedar constancia de que nada volverá a ser como antes. Y no en un sentido negativo, ya que todo remite a la irrupción en escena de las nuevas generaciones de Borbones. Concretamente, y en lo que al núcleo duro de la Corona respecta, la princesa Leonor se ha convertido en protagonista indiscutible de los últimos tiempos en la institución. La heredera ya ha comenzado a prepararse a conciencia para su futuro como Reina de la nación. Pasos agigantados en lo oficial y en lo personal que han despertado todo tipo de opiniones

Y es que poco parece quedar en la actualidad de la joven que, nerviosa, ingresó en la Academia General Militar de Zaragoza el pasado agosto de 2023. Fue ese el pistoletazo de salida de una nueva etapa para la Princesa de Asturias, que recién graduada del Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales, se aventuraba a comenzar a cumplir con sus deberes reales. Entre ellos, ese primer curso de formación castrense que el pasado 3 de julio concluyó, ante la emocionada mirada de su padre, en una entrega de despachos de alférez en la capital aragonesa que queda para el recuerdo. El caso es que esto no ha hecho más que empezar, y entre los mil y un dictámenes populares que exaltan la 'Leonormanía', un familiar se ha pronunciado por primera vez acerca de su papel dentro de la Casa Real.

El primo del Rey que dedica unos elogios a la princesa Leonor

Por sorprendente que parezca, no es lo más común que los miembros de la dinastía de los Borbones hagan declaraciones públicas acerca del rol de los demás. Al menos, así lleva siendo desde que Felipe VI ascendió al trono en el año 2014, después de la abrupta abdicación de Juan Carlos I y tras hacer efectivo su propósito de blindar al máximo a los integrantes de la familia real. Familia real, que no familia del Rey. Dos conceptos distintos que marcan la diferencia entre el monarca, su esposa y sus dos hijas, que son los únicos que desde hace una década sirven como representantes de la nación y mantienen la distancia con el resto del clan.

Quizás es por eso mismo que sea tan poco habitual apreciar muestras de cariño hacia la princesa Leonor, incluso en momentos clave de su trayectoria vital como la jura de la Constitución por su 18 cumpleaños o su reciente acto de clausura del curso en el Ejército de Tierra. Tanto como para que cualquier gesto por parte de sus allegados, por mínimo que sea, se convierta en noticia. Sucedió cuando su prima Victoria Federica, hija de la infanta Elena, le dedicó un afectuoso 'stories' en Instagram por su primer desfile como cadete en el Día de la Hispanidad. Y ahora ha vuelto a suceder. Con una sentencia en palabras, además. Por surrealista que parezca, esta intervención tuvo lugar durante el multitudinario concierto de la colombiana Karol G en el estadio Santiago Bernabéu. El responsable: Bruno Gómez-Acebo.

Bruno Gómez-Acebo
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Un nombre que quizás suene menos que su apellido, pues se trata del tercero de los cinco hijos nacidos del matrimonio entre la infanta Pilar, hermana del emérito, y el aristócrata Luis Gómez-Acebo. Por ende, el hombre que el pasado sábado se mezcló entre las masas -junto a su familia- con motivo del primer 'show' de la intérprete de 'Tusa' en la capital, es primo hermano de don Felipe. Con la particularidad de que, antes de entrar al espacio donde se celebró el espectáculo, no dudó en responder a las preguntas de los medios de comunicación. Incluso sobre aquellas que aludían directamente a la primogénita del Rey, a la que no tenía reparo en definir como "una muchacha muy bien preparada". Lo anterior, además de que desde su prisma "lo está haciendo maravillosamente bien". 

Bruno Gómez-Acebo también se pronuncia sobre Juan Carlos I

Sin duda, no deja de ser reseñable que los familiares de Felipe no titubeen al deshacerse en halagos al hablar de la futura Reina. Más todavía cuando se trata de una parte de la familia tan cercana al soberano, pues en los últimos meses también ha quedado claro que el Rey tiene muy presentes a sus primos en los buenos y en los malos momentos. Sin ir más lejos, el pasado marzo no dudó en asistir al funeral de Fernando Gómez-Acebo, el pequeño de los hijos de su tía Pilar, que falleció a los 49 años por una insuficiencia respiratoria crónica.

Un duro golpe por el que Bruno admite que todavía están "lamiéndonos las heridas y asumiendo las ausencias" que se formalizó con una misa homenaje el pasado 8 de abril en la Catedral de las Fuerzas Armadas. Misa a la que, de nuevo, asistió el monarca, acompañado de doña Letizia. Ellos, además de otros familiares como la infanta Cristina, doña Sofía... Y Juan Carlos I.

Juan Carlos I
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Gesto que no pasó desapercibido para los presentes y los medios de comunicación, puesto que hace ya cuatro años que el emérito ya no reside en España. Fue en el 2020 cuando, tras incontables polémicas y bajo la alargada sombra de una crisis de reputación, el emérito se trasladó hasta el golfo Pérsico. Desde entonces vive en Abu Dabi, lejos del país al que sirvió como jefe de Estado y de su familia más directa. Algo que el hijo de su hermana mayor tampoco pasó por alto a las puertas del Bernabéu, asegurando ante los reporteros que espera su regreso definitivo con ansia: "Aquí es donde tiene que estar. Es su hogar".