Mar Flores rompe su regla de oro y sentencia a su propio hijo, Carlo Costanzia, por su inminente paternidad

Prometía guardar silencio y no ha sido así. Era ella, Mar Flores, la única piedra angular que faltaba por contar su versión de los hechos acerca de la noticia del momento. Una de esas bombas que difícilmente iban a pasar inadvertidas para la crónica rosa, pues si un embarazo gusta, una guerra entre dos clanes que se fusionan gusta todavía más. El caso es que nadie vio venir el embarazo de Alejandra Rubio. Mucho menos que el padre de la criatura sería Carlo Costanzia, con el que solamente lleva cinco meses saliendo. Y menos, si cabe, que lo contarían a golpe de exclusiva. Juego de secretos y revelaciones del que la madre del futuro papá parecía negarse a participar. 

De hecho, las pocas actitudes que había tenido al respecto de este tema daban a entender que no decir nada sería su determinación definitiva. Con el reseñable contraste en lo que a su consuegra se refiere, pues Terelu Campos no dudó en sentarse en un plató. Con el objetivo de aclarar dudas y despejar incógnitas, pero solamente dos días después de que la información hubiera visto la luz. Mientras, Mar, con la que nunca ha tenido especial buena sintonía, se jactaba de no haber dado su brazo a torcer ante las insistencias de la prensa. Así lo había mantenido hasta ahora, porque la revista '¡Hola!' también ha sido su soporte para sincerarse.

Mar Flores se pronuncia sobre la paternidad de Carlo

Con la percha de un reportaje para hacer balance de su vida al cumplir 55 años, el rostro de Mar Flores ha ocupado este 3 de julio la primera página de la publicación antes citada. Esa misma que el pasado 19 de junio removió el universo del corazón con la noticia que la convierte en abuela. Forma de proceder sorprende, pues conocer de primera mano su percepción del asunto se leía imposible. Más después de rehuir constantemente las preguntas de los periodistas y tras publicar un dardo envenenado hacia la madre de su nuera. ¿El motivo para hacerlo? Podría sobreentenderse que el desacuerdo con airear las intimidades en la televisión a cambio de dinero.

Con una instantánea de un helicóptero y el texto "experiencias DE VIERNES", enfatizando el nombre del programa que acogió la entrevista de Terelu, la presentadora dictó sentencia en los 'stories' de su Instagram. ¿Significaba esto que nunca la veríamos contar cómo lo ha vivido cuando el interés es tal? Justo cuando también han quedado en entredicho detalles confesados por su hijo, que en la exclusiva aseguraba habérselo contado a su madre dos semanas antes de hacerlo público, mientras luego se expuso que lo hizo solamente un día antes. Nadie tenía las verdaderas respuestas. Nadie menos ella, y ahora ha roto su regla de oro para descubrir. Lo que ha creído conveniente, claro está. El caso es que ha roto su silencio y por fin se ha referido, sin titubeos, a la situación de Carlo. 

"Yo soy feliz si mis hijos son felices. Carlo es un hombre adulto y, por tanto, no soy quién para cuestionar su vida y, por supuesto, le apoyaré siempre como madre", responde cuando le preguntan sobre la inminente paternidad de su único hijo con el aristócrata italiano Carlo Costanzia di Costigliole. Palabras cargadas de significado, aunque también ambiguas. Sin profundizar en demasía y que dejan el mismo sabor de boca que el inconfundible 'haz lo que quieras' de una madre. Es esa su sentencia, que tampoco pasa por alta a Alejandra. Sobre la nieta de la difunta María Teresa Campos, admite que es cierto que "nos conocimos casualmente en un sitio". De nuevo, sin sacar excesiva punta, y recogiendo de nuevo que "si mis hijos están bien, yo estoy bien, lo único importante es eso", con independencia de "que se casen o no se casen, o con quién estén".

Toda La verdad sobre la relación con su hijo 

"Cuando me preguntan también por mi hijo Carlo, prefiero no contestar, es adulto y prefiero que él lo haga por sí mismo. Yo intento proteger, desde mi lugar de madre, a mis hijos, a todos por igual", cuenta con relación a su decisión de no implicarse cuando expresar su parecer pueda ser perjudicial para sus vástagos. La cuestión es que no es algo que haya sido recíproco, puesto que hace algunos meses, y a pesar de que no había aparente intención de provocar un conflicto, Costanzia pasó por '¡De viernes!' -por primera vez, que no última- para abrirse en canal. Declaraciones sobre una dura infancia y sus problemas legales que daban a entender que su relación con mamá no era tan idílica como se había contado. Algo que, en su entrevista más reciente, Mar ha querido desmentir.

Lo hace poniendo el ejemplo de su último cumpleaños, que describe como uno de los "más felices y más tranquilos de mi vida, feliz con mis cinco hijos". "Hicimos una comida, mis cinco hombretones y yo. Y todos estuvieron muy cariñosos", narra. ¿Por qué sirve esto de ejemplo de las contradicciones de la prensa para ella? "Al día siguiente, veo publicado en dos medios 'el cumpleaños más triste de Mar Flores'". Eso y que "Carlo no fue", cuando ella destaca que "los periodistas estaban en la puerta de mi casa y vieron que mi hijo mayor llegó el primero". Ella dice que entiende "vende más contar lo contrario". Lo comprende, pero no lo comparte, porque su realidad parece ser bien distinta.