Llega una de las temporadas más esperadas y ansiadas: el verano. Ese momento del año donde todos intentamos en la medida de la posible hacer un break en nuestras obligaciones y rutinas para poder desconectar y cargar las pilas. Por supuesto, verano y vacaciones son dos palabras que van de la mano. Es la fecha indicada para organizar algún plan, viaje, o simplemente descansar.
En el caso de nuestros royals no iba a ser menos. Si ponemos el foco en la Corona británica, que lleva en bajo la atenta mirada el ojo público por todos los complicados acontecimientos que han sacudido a algunos miembros más queridos de la familia, no podemos evitar pensar que necesitan, y mucho, ese parón en sus obligaciones y quehaceres reales, concretamente los príncipes de Gales, que se han enfrentado a unos meses de lo más complicados y duros. Pero ¿qué tienen pensando los duques de Cambridge para la temporada estival? ¿Cuáles serán sus planes? ¡Los desvelamos!
Así será el verano de Kate Middleton con sus hijos
El pasado 22 de marzo, Kate Middelton daba un valiente paso al frente al desvelar, finalmente, qué era lo que estaba ocurriéndole a su vida. A través de un video grabado Windsor por la BBC, la princesa de Gales desvelaba al mundo su enfermedad. En sus palabras, Kate dejaba claro cuáles eran sus dos grandes prioridades en estos momentos. Primero de todo: su tratamiento. Y segundo: el bienestar de sus tres hijos, el príncipe Jorge, la princesa Carlota y el príncipe Luis. De esta manera, ponía de manifiesto que iba a hacer todo lo posible por mantener esto, y que la situación les afectara lo menos posible. De ahí que este amargo verano que está viviendo toda la familia vaya a estar planeado en torno a ellos, y, sobre todo, a que pasen unas vacaciones inolvidables. Los príncipes de Gales tendrían pensado un verano donde sus hijos sean los grandes protagonistas y, en definitiva, puedan también olvidarse de este duro momento que están viviendo.
Según algunos expertos de la Casa Real británica, la finca Anmer Hall, en Norfolk, jugará un papel importante durante el verano. Durante el resto del año, la familia vive en Adelaide Cottage, en Windsor, principalmente por lo cerca que se encuentra esta casa del colegio de sus vástagos, y que además ha sido el gran refugio de la Princesa tras el anuncio de su retirada. Ahora, las intenciones de los duques de Cambridge es que sus hijos puedan tener cierta libertad tras acabar el año académico y, sobre todo, que puedan vivir estos meses de verano como otros niños. Una persona muy cercana a Kate y Guillermo lo aseguraba así a la revista 'Closer Weekly': "El verano es cuando Kate quiere de verdad que sus hijos disfruten y puedan ser un poco más libres. Y este verano, más que nunca, todo va a girar en torno a los niños", confesaba.
Los príncipes de Gales siempre hacen por organizar las vacaciones para aprovechar el máximo tiempo posible con sus hijos; no obstante, ahora esto ha tomado más importancia que nunca. "Cada verano Kate intenta asegurarse de que los niños estén fuera tanto como sea posible", asegura la fuente al medio anteriormente citado. Entre algunos de los planes favoritos de Kate con sus hijos durante las vacaciones encontramos los deportes al aire libre, la repostería o la hípica. "Hay directrices, por supuesto, pero Kate cree que dejarles elegir a ellos hará que las vacaciones sean más memorables", aseguran.
Su último gran plan familiar
En este último año, la vida de la familia ha cambiado radicalmente, de ahí que ahora le den más importancia a pasar tiempo de calidad con sus hijos que a hacer grandes planes. Con respecto al año pasado, los Príncipes se decantaron por pasar unos días sin sus hijos en Gales, concretamente en una exclusiva finca situada en el Parque Nacional Brecon Beacons, llamada Duffryn Mawr Country Housese, cuyo precio por noche supera los 1.000 euros.
Se trata de una casa de 7 habitaciones en suite donde se puede estar en contacto con la naturaleza y pasar unos días de desconexión. La finca, con capacidad para alojar hasta a 16 personas, cuenta con 6 hectáreas con catering privado, espacios al aire libre -donde se puede jugar al críquet-, zona de terraza y también varias conexiones para hacer senderismo. La experiencia de Kate y Guilermo fue de lo más positiva, tal y como han adelantado los dueños de la finca en un reciente comunicado. "Les encantó la simplicidad y la privacidad y dijeron que les gustaría regresar con sus hijos. Fue maravillosa desde el momento en que entraron en la casa hasta el momento en que se fueron", aseguraban. Este fue el último gran plan que hizo el matrimonio antes de que sus vidas se viesen duramente sacudidas.