El calor abrasador y las ganas de vacaciones han llegado de la mano del verano. También para las 'celebrities', que llevan semanas preparándose para disfrutar de la temporada estival. Pasada la noche de San Juan y con el inicio de julio a la vuelta de la esquina, las caras VIP han comenzado a compartir con sus seguidores los planes que tienen para los próximos meses. Desde los destinos que han elegido para desconectar de la vorágine, a algunas particularidades que podrían sonar a chino a las personas de a pie. O a japonés, más bien. Véase el caso de Tamara Falcó.
Fue en la noche del pasado jueves 27 de junio, cuando la 'socialité' se confesó sobre una de las decisiones que ha tomado en esta ocasión. Un detalle que salió a relucir durante su participación en la tertulia de actualidad de 'El Hormiguero', donde la hija de Isabel Preysler lleva años colaborando junto a Cristina Pardo, Nuria Roca y Juan del Val. Después de admitir que le daba "mucha penita" y "morriña" terminar la temporada, Pablo Motos adelantaba esa nueva determinación de la marquesa de Griñón en relación con su hogar: "Creo que has contratado a una organizadora de armarios". Y así es, con el propósito de "dejarlo todo perfecto".
La organizadora de armarios, una vía a la felicidad
Una de las cuestiones que Tamara destacó al explicar el porqué de contratar a esta especialista en orden es porque ver las cosas en su sitio le da "paz mental". En realidad, una forma de proceder que está muy de moda desde que el nombre de Marie Kondo irrumpió en escena para cambiar las vidas de tantos desordenados. Ahora, Falcó se suma a la tendencia del método KonMari. Por ende, también a la felicidad que aporta optimizar los espacios y crear sistemas de organización que los expertos han señalado en más de una ocasión. Expertos como Txell Huguet, redactora especializada en orden de la revista 'El Mueble', que nos ha descubierto en qué consiste el trabajo de la persona que ha contratado la televisiva.
"Lo que hace una organizadora es ver todo lo que tienes y ver de lo que puedes prescindir. Una vez que has prescindido de todo lo que no necesitas, te lo organiza de una manera para aprovechar mejor el espacio, para que tú veas mejor el espacio y la ropa y demás", nos cuenta la periodista. Al fin y al cabo, se trata de una necesidad que nade del cálculo que apunta "a que la gente se pone un 20% de la ropa que tiene. O sea, que el 80% no te lo pones". Algo más flagrante en un caso como el de Tamara, que por su trabajo y posición "debe tener más ropa que la humanidad en general" y es probable que el estrés se haya apoderado de ella. "Ha llegado el verano y debe estar como mucha gente, que aún no has hecho bien el cambio de armario (...), y no se ve con fuerzas para hacerlo porque necesitas muchas horas".
Más ella, que como es sabido "tiene un vestidor grande". No obstante, contar con la figura de una organizadora profesional te ayuda a cambiar de perspectiva y de hábitos. Tan sencillo como que te aporta "una serie de pautas para que luego no se te desorganice". "Es decir, no es solo ordenarte el armario, sino que te enseña a mantenerlo ordenado en tu día a día, que a veces es complicado", recalca Huguet en declaraciones para CLARA. Lo anterior, que en realidad "es la diferencia con una persona que tienes en casa que te ayuda y te puede lavar y planchar la ropa y volverla a colocar", porque esa persona "no lo hace con este criterio". De este modo, y aunque lo más probable es que "el aprendizaje no lo hará Tamara, sino la persona que hace este trabajo, pero sí le servirá para tenerlo todo más ordenado". Tener las prendas presentes, que también es indispensable. Saber lo que tiene y lo que no porque estará a la vista y será accesible.
Consejos de orden que Tamara Falcó podrá aplicar
Además de ahondar en el rol de la organizadora, Txell nos acerca a los métodos más loados para que el orden se apodere del armario. Sin olvidar, claro está, las particularidades de un caso como el que aquí nos ocupa. Partiendo también de una consigna como que "muchas veces decimos que necesitamos más armario, y lo que necesitamos es menos ropa", y que ella -atendiendo a sus apariciones en eventos, su trabajo en la televisión o su propia firma- "tiene mucha ropa, además de que ella a veces fluctúa entre tallas". "Si te deshaces de la ropa que ahora te va pequeña y ahora te va grande, te deshaces de cosas que son tesoros. Con lo cual, si ella no siempre tiene la misma talla, tiene que tener más ropa", añade nuestra experta.
Ropa y más ropa que nos lleva a intentar descifrar los mejores mecanismos para tenerla siempre punto. "Separar por tipo siempre te ayuda un montón" y acaba siendo más práctico que hacerlo por color, que "queda más estético, y quizás cuando lo ordenas lo haces así, pero en el día a día es más complicado mantenerlo". "Al final, lo que tienes que saber es lo que tienes. Hay gente que tiene aplicaciones, pero eso también es un trabajo, de hacer fotos, de apuntar… Se llegan a hacer los looks para no tener que pensar, porque con la ropa que tiene esta mujer, se debe parar cada día delante del armario y debe pensar: ‘¿De mis 250 vaqueros, cuáles escojo?’. Si sabes lo que tienes, tampoco te compras cosas repetidas", como premisa general.
Y en lo concreto, "en los cajones, el doblado vertical va muy bien porque las camisetas o la ropa interior es más fácil de devolver a su sitio. También usar accesorios cuando son necesarios. Para ropa de otra temporada, utilizar cajas de tela. O en el altillo, o en la cama con canapé, que no creo que tenga. Es importante gestionar bien la ropa de otra temporada, para seguir acumulando". Siempre sin obviar que Falcó, dado su estilo de vida, "es una persona que renueva mucho el vestuario".
Es probable que surja la duda sobre dónde ha podido conocer Tamara a una persona que se dedique a esto, es probable que sea a raíz de alguien conocido. "Existe la Asociación de Organizadores Profesionales y ahí puede buscar, pero yo creo que ella le preguntará a sus amigas VIPS con quién se lo han hecho. En esto tiene que ser boca oreja, porque hay varios niveles de organizadores", expone la periodista. Y no porque no le sirva un organizador de a pie, sino por algo tan evidente como que "las necesidades de una familia media no son las mismas que las de Tamara".