No es por el apellido Preysler que Tamara Falcó es marquesa. Es evidente que ser hija de la 'reina de corazones' le ha valido convertirse en uno de los personajes más aclamados del panorama mediático. Tal es su notoriedad y presencia pública que ya es mucho más que una 'socialité'. También 'influencer', chef, jurado de programas de televisión como 'Got Talent' e incluso tertuliana de actualidad en 'El Hormiguero'. Roles nada desdeñables, al igual que nada relacionados con la aristocracia. Porque lo de ser marquesa -de Griñón- es cosa de apellidarse Falcó.
Esa otra familia de Tamara, tantas veces obviada desde la crónica rosa por cuan llamativo resulta el clan formado por Isabel, pero que ella siempre tiene presente. Desde sus hermanos Manuel, Xandra, Duarte y Aldara, nacidos de otros matrimonios de Carlos Falcó, así como sus primos. Llamativo es el caso de Álvaro Falcó, marqués de Cubas e hijo de Fernando Falcó y Marta Chávarri, al que considera como un hermano. Para muestra, su buena sintonía siempre que se dejan ver juntos. Una estampa en la que también suele aparecer en escena Isabelle Junot.
En este cruce de familias de la alta sociedad, la hija de Phillipe Junot ha tomado un papel de lo más relevante en los últimos tiempos por su matrimonio con Álvaro. Una irrupción en la estirpe desde que pasaron por el altar en Plasencia el 2 de abril de 2021 que se ha terminado por asentar del todo ahora que son padres de Phillippa, su primera hija en común. También, un escenario de lo más afable para Tamara, pues a la estupenda relación con su primo se ha sumado de una época a esta parte Isabelle, con la que tiene mucho en común y cuyo vínculo es cada vez más y más estrecho.
La estrecha relación de Tamara e Isabelle y su cariñoso apodo
Y es que más allá de lo que se refiere a los títulos nobiliarios, pues Junot es ahora también marquesa consorte de Cubas, cabe decir que los puntos de unión entre Tamara y la mujer de su primo van un paso más lejos. Son cuestiones como su interés por el mundo de la moda, la estética o su dedicación a la creación de contenido en las redes sociales -Isabelle tiene 150.000 seguidores en Instagram- los que más las han unido. Las mismas redes en las que en más de una ocasión se han referido a sí mismas como "primis". Un llamativo apodo que demuestra que son íntimas y el afecto que se profesan traspasa aquello que se ve en público.
Para más inri, ambas han pasado por las cocinas de 'MasterChef Celebrity'. Y no les fue nada mal, ya que Tamara ganó su edición e Isabelle casi se cuela en la final de la temporada de 2022. Porque aunque haya el matiz de que la mujer de Álvaro dedica casi todas sus publicaciones al terreno de la nutrición y la dietética, ambas son unas amantes declaradas de la gastronomía. Siempre con ese toque sibarita propio de su lujoso estilo de vida, y sin perder oportunidad de degustar los platos más exquisitos en restaurantes de renombre.
Restaurantes de todo el mundo, además. Si bien es sabido que Tamara e Íñigo Onieva, su marido, son unos trotamundos empedernidos, parece que Álvaro e Isabelle están dispuestos a seguir el ritmo de sus "primos" si las agendas se lo permiten. Viajes en pareja(s), como el último del que han hecho partícipes a los internautas, en el que, una vez más, se constata cuan afianzada está la relación entre las dos parejas en la actualidad.
Su última escapada a París, junto a sus maridos
Ha sido este mes de octubre de 2024 cuando ha tenido lugar la tan comentada escapada de marqueses. Los de Griñón, los de Cubas e incluso los de Castel-Moncayo. Porque sí, en este viaje a París del que han dejado constancia en sus respectivos perfiles, también han estado Manuel Falcó y Amparo Corsini, acompañados de sus hijas Manuela y Marina. Unos días en la capital francesa para poder visitar el cementerio de Montmartre y ver las tumbas de Luis Maríategui y su hija, María de la Luz, abuela materna de Carlos Falcó. También, claro está, con el debido tiempo para disfrutar de la ciudad. Y de su arte. Y de sus manjares.
Véase su paso por el restaurante del prestigioso Hotel Costes, cuya oferta culinaria cautiva temporada tras temporada a estrellas de todo el mundo. Un enclave imperdible para los amantes del buen comer en el que, gracias a una instantánea en la que todos aparecen con una sonrisa de oreja a oreja, tanto Íñigo y Álvaro como Tamara e Isabelle sabemos que lo pasaron en grande. Gozando de la compañía de los unos y los otros a pesar de estar lejos de casa. No importa el lugar cuando están en familia.