Así como la ruptura pocos la vieron venir, sí habían venido habiendo pistas en el aire sobre la aparente reconciliación de Álvaro Morata y Alice Campello. Y así ha sido. Cuando solo se cumplen unos meses desde que el pasado 12 agosto viera la luz la noticia de su inesperada separación, parece que en ningún caso se trató de un punto y final. Más bien un punto y aparte, cuya vuelta al ruedo han 'oficializado' con una fotografía en las redes sociales, a la par que han confirmado a algunos medios de comunicación.

Quién lo hubiera dicho en el pasado verano, en el momento en el que después de casi ocho años de matrimonio y cuatro hijos en común, el futbolista y la 'influencer' hacían saber al mundo que "tras un tiempo de reflexión" consideraban lo mejor "separar nuestros caminos". Un durísimo golpe para todos los seguidores de la que, hasta entonces, pareciera una de esas relaciones idílicas. Más todavía con la resaca del gran logro de Morata como capitán de la Selección Española de Futbol Masculino en la Eurocopa. Afortunadamente, las cosas han vuelto a su lugar de origen.

Un regreso al amor que no ha sido cosa de un día, pero que sí se habría ido cociendo a fuego lento con gestos como el que la propia Alice hizo a ojos del mundo el pasado octubre. Abogando por la cordialidad y demostrando que el cariño entre ellos seguía casi intacto, aprovechaba el día del 32 cumpleaños del deportista para felicitarlo vía 'stories' con una emotiva imagen suya junto a uno de sus vástagos. Después vendrían las imágenes de su plan por las calles de Milán con sus hijos en noviembre. Por último, la confirmación por parte del programa 'Ni que fuéramos Shhh' de la nueva situación de la pareja.

Situación que, de nuevo, plantea algunas incógnitas. Entre ellas, si en esta segunda oportunidad lograrán recomponer el imperio construido en términos de imagen conjunta que durante tanto tiempo los acompañó. Sea cual sea la respuesta, la parte buena es que su otro imperio ha permanecido intacto durante este tiempo. Ese que atañe a sus imponentes fortunas, y que en el caso de Alice, también venía de atrás.

Sus propios Negocios y una imponente herencia familiar

Cualquiera que viva en el mundo sabe de buena tinta que un futbolista gana mucho dinero. Contratos millonarios y todo tipo de colaboraciones con anunciantes acaban siempre por sustentar un estilo de vida del más alto nivel. Las mejores casas, las mejores vacaciones y las mejores prendas. ¿Significa esto que Alice Campello ha podido gozar de todos estos lujos gracias a su matrimonio con Morata? Es evidente que sí, por una mera cuestión de compartir día a día. Sea como fuere, es importante destacar que ella también ha sabido amasar su propia fortuna. 

Para empezar, y como tantas otras famosas de hoy en día, el poder de la italiana trasciende los tres millones de seguidores que acumula en su perfil de Instagram. Lo ingresado ha quedado reconvertido en generador de más riqueza, con la creación de negocios como MASQMAI, su marca de belleza que en el cierre del pasado 2024 facturó 8,8 millones de euros según 'Forbes'. Ahí es nada.

La firma con la que Campello ha conseguido hacerse un hueco en el negocio de la cosmética -más allá de servir como imagen para marcas- está dedicada a comercializar productos de maquillaje, así como de cuidado de la piel y del cabello. Por si lo anterior fuese poco, en el pasado su fuente de ingresos no se quedaba entre cremas, lociones y coloretes, pues también fue impulsora de AKALA Studio. La mayoría de la empresa tras esta marca de ropa y bolsos con modelos para mujeres, hombres y niños fue vendida el pasado 5 de junio de 2024 a NSPIRE Advertising Agency, SL, liderado por Giancarlo Milone. 

El caso es que todo eso son cuestiones fácilmente revisables, pues es ella misma quien las promociona o ha promocionado a través de sus redes sociales para difundirlas entre su multitudinaria legión de seguidores. Dirige, gestiona, promociona y modela. La empresaria 360, que podría acuñarse, y con unas habilidades que le vienen directamente de familia. Porque sí, todo lo construido viene con el precedente de otra gran fortuna, inexorablemente previa a Álvaro y con un origen relativamente más desconocido.

Alice Campello y Andrea Campello
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¿Por qué? Porque se trata de la que amasó Andrea Campello, su padre. Reconocido como uno de los hombres de negocios con más poder en Italia y a escala internacional en el universo de los concesionarios. De acuerdo con la información publicada, sus empresas, con la originaria Campello Motors como fuente principal, la facturación anual de las compañías que regenta su progenitor alcanza los700 millones de euros. Un instinto bárbaro para el manejo del capital que, sin duda, ha heredado su famosa hija.

Por qué se separó temporalmente de Álvaro Morata tras 8 años

Se advertía en el momento de saberse la ruptura que el trabajo sería un buen refugio para la italiana dado que los vientos del desamor soplaban con fuerza. Quién se lo hubiera dicho semanas antes del anuncio. Y es que aunque los rumores de crisis entre Álvaro Morata y Alice Campello existieron desde que Morata se presentó como nuevo jugador del Milán sin su compañía, ese movimiento en solitario no fue suficiente para predecir el desastre.

Sería después, cuando se dio el revelador gesto de eliminar todas las instantáneas juntos de sus perfiles en la red, cuando saltaron todas las alarmas. Un giro de guion absolutamente incomprensible después haber pasado semanas exponiendo su amor por aquí y por allá. Desde la celebración por la victoria del español en la Eurocopa hasta unas vacaciones juntos. De película... Y de las tristes. Ellos mismos sentenciaron el fin de su romance a través de Instagram.

Álvaro Morata y Alice Campello
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Lo hicieron el fin de acallar especulaciones y cortar cualquier rumorología de raíz, siendo Álvaro quien compartió el comunicado que revolvería a la crónica social. En él aludía a "la decisión más difícil de nuestras vidas", mientras que la propia Alice optaba por no permanecer en silencio. También a través de la plataforma de Internet, la italiana se pronunciaba y aclaraba que no había habido terceras personas.

"Álvaro es la mejor persona que existe y en la vida me ha faltado el respeto y yo a él tampoco. Si hay una certeza que tengo en la vida es el respeto recíproco que nos hemos tenido y nos tenemos", escribió, para después concretar que la ruptura se debe a "incomprensiones mal gestionadas". Esas que ahora parecen haber logrado reconducir tras el necesario 'break'.