Las disputas familiares nunca son plato de buen gusto. Lo que sucede en una estirpe de puertas para adentro, por secreto que sea, siempre acaba haciendo mella. Un supuesto que alcanza una dimensión absolutamente distinta cuando el conflicto es público. Y publicado. Difícilmente iba a conseguir una Casa Real tan destacada como la británica ocultar la serie de catastróficas desdichas sucedidas en relación con dos de sus miembros más importantes. Son ya años los que han pasado desde que el príncipe Harry se desvinculó de la institución y se desentendió de su rol de 'working royal'. Por ende, también Meghan Markle, su esposa.

No es un caso baladí el de Meghan. La exactriz y ahora duquesa de Sussex nunca ha pasado desapercibida y, de hecho, aún hoy día son muchos los que le achacan la ruptura entre el hijo menor de Carlos III con todo lo que formar parte de la Corona implica. De ahí nacería el odio popular, los reproches y el archicomentado 'Megxit'. Esa salida del país que los llevaría al otro lado del charco, donde fijaron su residencia para permanecer tan ajenos como fuera posible a las polémicas. Para intentar disipar las críticas y poder criar a sus hijos en paz, en California y lejos de la tierra que los rechazó. También, para poder celebrar cuando sea preciso. Véase el reciente 43 cumpleaños de la nuera del soberano inglés.

Meghan Markle se vuelve a desahogar en la televisión

Una fecha que, sin duda, vuelve a marcar el inicio de una nueva etapa para la estadounidense. No solamente por algo tan simplista como que comienza un nuevo año de su vida, sino porque el día coincidió con una reaparición televisiva de ella y su marido que no ha pasado inadvertida. Con el prefijo 're-', porque ni de lejos es la primera vez que se dejan ver en la pequeña pantalla. Cualquiera que haya seguido de cerca la trayectoria de tan controvertido matrimonio recuerda a la perfección su explosiva entrevista con Oprah Winfrey, en la que su tormentosa vinculación con 'La Firma' fue el eje central.

El pasado domingo 4 de agosto, y en el día del aniversario de Meghan, la historia pareciera repetirse. Tres años después, y con un alcance mucho menor por la diferencia en las pretensiones, ya que, con más o menos virtud, la duquesa prefiere ahora mantener un perfil bajo en lo que a abrir polémicas se refiere. El caso es que, con la excusa de una nueva acción solidaria de la Fundación Archewell con la organización The Parents Network, la mujer de Harry ha hablado para 'Sunday Morning' de la CBS, donde ha vuelto a incidir en los malos momentos que vivió en su paso por Buckingham Palace.

De forma indirecta, pero con confesiones durísimas acerca de sus "pensamientos suicidas", sin necesidad de maquillar cuan compleja fue para ella esa situación. Una forma de proceder, la de "ser realmente abierto al respecto" del tiempo en el que se planteó seriamente quitarse la vida, que ahora reconoce como "parte de nuestro proceso de sanación, y ciertamente parte del mío". Todo a raíz de este ejercicio de concienciación sobre "el acoso y el abuso que estaba experimentando en las redes sociales", que la llevó a un punto personal muy complicado. "Nunca querría que alguien más hiciera ese tipo de planes", narra, añadiendo que "si expresar lo que he superado salvase o animase a alguien en su vida a controlarlo y no asumir que si la apariencia es buena, todo está bien, entonces vale la pena".

La firme determinación de Kate Middleton y Guillermo

Porque aunque Meghan admite hoy día que sincerarse sobre un episodio tan oscuro de su vida en primera instancia "me avergonzó mucho", fue hacerlo lo que tiene claro que la salvó. "Sabía que si no lo decía, lo haría, y simplemente ya no quería estar viva". Declaraciones sobrecogedoras que nos llevan de vuelta a aquel pasado en el que todo era más complicado si cabe. Tres años han pasado y las cosas son bien distintas. Basta con revisar la determinación que han tomado sus cuñados, el príncipe Guillermo y Kate Middleton, con relación con la celebración de su cumpleaños. Nada de felicitarla, ni siquiera a través de esas redes sociales que la protagonista de 'Suits' tanto refiere. La última vez que lo hicieron fue en el 2022, en las historias temporales del perfil oficial de Instagram de los Príncipes de Gales. Desde entonces, la nada.

Kate Middleton y el príncipe Guillermo
GTRES

En ningún caso resulta sorprendente ver que los futuros Reyes han tomado la decisión de no enviar sus buenos deseos a Markle esta vez como ya lo hicieron el año pasado. La pareja atraviesa una situación muy delicada por el cáncer que mantiene a Kate alejada de la vida pública. Una dolencia que ella misma hizo pública el pasado 22 de marzo y por la que se ha retirado de la gran mayoría de actos institucionales. También, un escenario que ha vuelto ha dejar constancia de la distancia que existe con su cuñado, pues mientras Harry sí ha visitado a su padre en sus contadas -y breves- visitas al Reino Unido, no ha habido encuentro con la esposa de su hermano. Distancia que se extrapola a Meghan, que no pisa la tierra natal de su marido desde el funeral de Isabel II.