La conocemos popularmente como leche de coco, pero en realidad se trata de una bebida vegetal de textura espesa y cremosa, muy asociada a las recetas saludables, y especialmente valorada por ser una alternativa en caso de intolerancia a la lactosa. Esta bebida, que no debe confundirse con el agua de coco, se elabora con la pulpa del coco maduro. También puedes encontrar la crema de coco, una versión más concentrada y espesa que contiene más grasas que la llamada leche de coco.

Si hay un plato que inmediatamente asociamos a la leche de coco ese es el pollo al curry, ya que se utiliza como base para el mismo, además de en otras salsas y estofados. Pero da mucho más de sí y es fácil encontrarla como ingrediente de postres cremosos, flanes y tartas. De hecho, al final del artículo encontrarás tres de ellos muy ricos y fáciles de hacer.

Cómo consumir la leche de coco

Si te pica el gusanillo y te apetece probar nuevas recetas con leche de coco, lo tienes muy fácil porque puedes encontrarla en distintos formatos y grados de concentración en los supermercados. Al igual que sucede con otros productos como la nata, todo depende del uso que le vayas a dar.

Su presentación en lata es la más extendida y fácil de adquirir. Cuando la abras deberás moverla bien ya que lo normal es que se separe en dos estratos, uno más líquido al fondo y otro más sólido. También puedes encontrarla en envase de cartón que, al ser más diluida, se utiliza como complemento de café o cereales.

Si no es un producto que vayas a utilizar con demasiada frecuencia, quizá te interese más la leche en polvo, muy utilizada en repostería y que tendrás que reconstituir con agua. ¿Estás preparando recetas con sabor a coco pero para las que no necesitas tanta cremosidad? Escoge entonces la versión más ligera con menos grasa y calorías.

¿Puedo hacer leche de coco casera?

Si te gusta consumir los alimentos de la forma más natural posible, estás de suerte porque puedes tener leche de coco fresca extrayéndola directamente de la pulpa del coco. Tan solo necesitas rallar la pulpa y exprimirla con agua. Por otro lado, hay quienes la preparan también con cocos desecados y agua, de tal manera que pueden controlar la concentración y la textura de la leche.

A continuación encontrarás varias recetas con leche de coco para todos los gustos: tanto primeros de cuchara, como segundos repletos de proteínas y varios postres riquísimos en formato individual.