El 'Tooping the Colour' nos dejó momentos memorables que ya forman parte de la historia reciente de la monarquía británica. Volver a ver a Kate Middleton junto a su marido, el príncipe Guillermo, y sus tres hijos, George, Louis, Charlotte, mostrando esa unidad y fortaleza, pese a estar viviendo la época más difícil de todas, fue algo que la sociedad inglesa no podrá olvidar fácilmente. Y es que, aunque se trataba del día grande para el rey Carlos III, ya que este desfile es en honor a su aniversario, lo cierto es que la vuelta de Kate acaparó todo el protagonismo.
Sin embargo, entre tocados, pamelas y carísimos estilismos, había otra mujer que también hacía su reaparición a la esfera pública tras haber vivido uno de los episodios más complicados de su vida en los últimos meses. Estamos hablando de Lady Gabriella, quien recientemente tuvo que afrontar el suicidio de su marido, Thomas Kingston, a la edad de 45 años. "Tom era un hombre excepcional que iluminó las vidas de todo aquel que le conoció. Su muerte ha producido un enorme impacto en toda la familia", rezó el comunicado emitido por la familia el pasado mes de febrero. Desde ese momento, Lady Gabriella estuvo totalmente desaparecida de la vida pública hasta el pasado sábado, cuando volvimos a verla.
La sutil reaparición de Lady Gabriella en el 'Trooping the Colour'
Lady Gabriella Windsor es la prima segunda de Carlos III, por lo que no podía faltar a una cita tan especial y señalada como esta. Su vínculo con la Familia Real británica es muy estrecha, especialmente con el príncipe Guillermo. Pero su presencia en el desfile no estaba tan clara, ya que tras la abrupta muerte de su marido, ella se retiró de la vida pública. Aunque no llegaron a esclarecer del todo las circunstancias de su muerte, se conoce que el cuerpo de Thomas Kingston fue encontrado sin vida en la casa de sus padres, en Costwolds, al oeste de Inglaterra.
Tal y como se reveló después, encontraron una pistola al lado del cuerpo; por lo que la principal hipótesis es que se trataba de un suicidio. Este duro varapalo sumió a Lady Gabriella en la más profunda de las depresiones y tristezas, de ahí que su vuelta a la esfera pública del pasado sábado haya sido con tanta sutileza, manteniéndose en un segundo plano.
La hija del príncipe Michael de Kent hizo su gran aparición con un vestido rosa empolvado que iba a juego con su tocado. Muy significativa fue la actitud que mantuvo durante todo el evento desde el balcón. Lady Gabriella permaneció detrás de la princesa Ana y de su segundo marido, Sr Timothy Laurence. Aunque este último sí salió a hacer el tradicional saludo a la ciudadanía, la aristócrata optó por no hacerlo. No podemos pasar por alto lo destacable que es que el rey Carlos III la invitará a estar en archiconocido balcón de Buckingham. En cierto modo, su presencia ha sido también una manera de mostrar su gratitud a la Corona británica por pensar en ella. A su vez, debido a la estrecha relación que Lady Gabriella mantiene con el príncipe Guillermo, y sabiendo lo mal que lo están pasando ahora mismo con el estado de Kate, su asistencia también podría verse como una manera de expresar su apoyo y respaldo a la familia.
LADY GABRIELLA RECUPERA LA NORMALIDAD EN SU VIDA
Una prueba de que poco a poco está recuperando la normalidad de su vida fue su asistencia del pasado martes en las célebres carreras de caballos del Royal Ascot. De nuevo, la escritora estuvo muy bien arropada por la familia británica y recibió el cariño y calor de los asistentes a la procesión de carruajes en el condado de Berkshire, donde no pasó por alto la posición que ocupó en dicho desfile. Y es que la aristócrata apareció en el segundo vehículo tan solo por detrás de los reyes Carlos Camilla; una posición de honor y que también se traduce como una manera de apoyo en estos momentos.
Lady Gabriella mostró la mejor de sus actitudes durante toda la jornada y ,además, se entregó de lleno al color para la ocasión con un vestido camisero floral y sus ya características pamelas. Uno de los grandes momentos del día fue cuando se encontró con Zara Tindall. Ambas se fundieron en un fuerte abrazo, donde quedaba reflejada la emoción y, sobre todos, los sentimientos en sus rostros. Pese a la dura época que ahora mismo atraviesa Ella, que es como la llaman desde su círculo más íntimo, no cabe duda de que el apoyo que está recibiendo está siendo de lo más reconfortante.