Como cada 26 de febrero, Carmen Martínez-Bordiú está de celebración. Es su cumpleaños, y en este 2025 cumple 74, que se dice pronto. Sea como fuere, y manteniendo esa línea de permanecer en un segundo plano a la que desde hace tiempo tiene acostumbrada a la crónica social, no parece que vaya a haber grandes festejos. No quiere visibilidad, sin importar la relevancia de la fecha, y es por eso que también desde hace tiempo ni siquiera reside en España. En 2018 se compró una casa en Portugal, y ahora el país vecino es su refugio.
Concretamente, es la exclusiva villa de Sintra donde la nieta de Francisco Franco adquirió esta lujosa vivienda hace ya siete años. Un paraíso a orillas del Atlántico en el que ha compartido vecindario con otras figuras tan conocidas como la cantante Madonna. Ahí es nada. Pero es que también parece ser este el mejor lugar para celebrar su aniversario.
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Y es que sí, Carmen estrenará los 74 lejos de su hijo Luis Alfonso y su nuera Margarita Vargas, así como de sus nietos, pues todos ellos viven en Madrid. ¿El motivo? "Padece un constipado importante y el consejo médico fue que se quedase en reposo", ha revelado Paloma Barrientos en el digital 'Vanitatis'. Afortunadamente, cabe destacar que tampoco es un mal enclave para tan señalado día. Porque la suya es una de esas casas que muchos querrían para ellos. ¡La descubrimos!
Mucha luz y toques 'vintage' en las estancias interiores
A pesar de que no existen imágenes de la casa de la exduquesa consorte de Cádiz como tal dada su distancia de la esfera pública, el programa 'Lazos de sangre' de La 1 mostró en el verano de 2024 un inmueble muy similar al suyo. De la mano de Odalys Hernández, agente inmobiliaria, los espectadores del espacio eran invitados a recorrer los espacios de tan señorial vivienda.
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Un paseo que comienza, como es obvio, por la fachada, donde se aprecia que esta es una casa de dos plantas, pintada en color crudo y con un pequeño porche sostenido por columnas para preceder a la puerta principal. Alrededor se atisba la vegetación de un jardín que, ya se anticipa, no será poca cosa.
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Al igual que tampoco son poca cosa las estancias del interior. "La casa de Carmen tiene doble sala", señalaba Hernández, mientras en pantalla aparecían grabaciones de recurso del amplio pasillo que conduce a estas. Una zona de tránsito, con paredes vestidas con cuadros y acceso al resto de habitaciones.
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Pero es que seguir el camino conduce precisamente a la sala, donde la luminosidad es la gran protagonista gracias a las enormes cristaleras por las que se cuela la luz natural del exterior. En este caso, y siempre con la duda de si la exmujer de Jean-Marie Rossi ha mantenido esta decoración, se aprecia una mesa circular bajo una lámpara de techo rodeada por cuatro sillas, otra mesa larga al fondo y muchos elementos decorativos al más puro estilo 'vintage'.
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En la otra sala, las mismas lámparas, pero en este caso una mesa baja frente al sofá, así como en sus extremos hay colocados dos grandes sillones tapizados con una llamativa combinación de colores: azul cielo, azul oscuro y magenta. La siempre necesaria nota de color.
Una piscina que da al atlántico, la guinda del pastel
"El terreno está compuesto de 2200 metros cuadrados, y la casa tiene 800 metros cuadrados, más o menos como la de Carmen", proseguía Odalys en su explicación. Y si bien no hay duda de que el interior es grandioso al revisar las imágenes anteriores, la realidad es que las zonas exteriores tampoco se quedan cortas.
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Porque la maravilla trasciende a las vistas, que ya es decir. A fin de cuentas, no cualquiera puede presumir de despertarse cada día pudiendo ver en primer plano el océano Atlántico desde los ventanales de su hogar. Un paisaje de ensueño con el que, además, también puede deleitarse si opta por darse un chapuzón.
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Esta piscina, en un precioso color turquesa, es la guinda del pastel. Nada mejor para refrescarse cuando el asfixiante calor del verano acecha. Todo un lujo que se explica al conocer el precio de la parcela, claro está. "Carmen compró esta casa en el 2018, en aquel tiempo las casas costarían más o menos dos millones de euros. Si ella quisiera vender esta casa en este momento serían unos cuatro millones de euros". Una opción, la de vender, que en ningún caso parece estar entre los planes de la aristócrata.