Lamine Yamal ha batido todos los récords. Con tan solo 17 años, que acaba de cumplirlos, se ha llevado el Premio al Más Joven, y su gol a Francia en la semifinal supuso el pase de oro hacia la ansiada final de ayer, en la que España se hizo con la victoria frente a Inglaterra. Su nombre no ha dejado de escucharse a lo largo de estos meses, y el interés que despierta a los medios de comunicación es innegable, ya que lo que ha conseguido el joven a su corta edad es casi de historia de película.
Con solo 7 años, Lamine entró en la Masía del F.C. Barcelona, donde se formó con los mejores para sentar las bases de su actual meteórica carrera. Pero, más allá de su formación deportiva, el joven ha continuado también con su formación académica. Actualmente, se encuentra terminando 4º de la ESO, que lo hace de manera online. Tras esto, como todo chico de su edad, deberá tomar una importante decisión con respecto a su futuro: el tipo de Bachillerato que piensa elegir. ¡Lo desvelamos!
La hoja de ruta estudiantil de Lamine Yamal
Enfrentarse a una Eurocopa con tan solo 17 años recién cumplidos puede resultar abrumador, de eso no hay duda. No obstante, Lamine Yamal tiene muy claro que debe seguir con sus estudios. "Voy a clase y cada día me ponen unos deberes diferentes. A veces me ponen más para hacer en casa, pero voy haciendo cada día. Si ven que estamos en cuartos de final o en octavos no me meten mucha caña, pero los días de descanso, que él sabe que no estoy haciendo nada, pues sí me dice que haga esto o lo otro", comentó el atacante del Barcelona sobre cómo compagina sus estudios con los entrenamientos.
El joven desvelaba a los medios de comunicación cuál es el Bachillerato que piensa estudiar durante los próximos dos años. Por norma general existen 4 ramas: Ciencias, Letras, Sociales y Artes. Pues bien, Lamine piensa seguir formándose por el derrotero de las Letras, donde el Latín y el Griego son los grandes protagonistas. Él mismo lo confirmaba en una rueda de prensa, en la que también comentaba sus gustos por la música de Morad, lo mucho que liga ahora con la proyección que le está dando el fútbol, o que tras hacerse con la victoria en la Eurocopa pasará sus vacaciones en Grecia o Marbella.
Lamine Yamal tiene por delante una brillante carrera deportiva, y ya cuenta con todas las papeletas para ser una de las grandes figuras del fútbol en los próximos años. Aun así, el joven es un chico muy centrado en su formación, y no duda en compaginar ambas carreras. Aunque, eso sí, como a todo joven, también le gusta encontrar su tiempo de descanso y desconexión, sobre todo junto al resto de compañeros. "Intento estar siempre con los jóvenes jugando a la play, al ping-pong… Si no me veo una serie en la habitación ...", confesó Yamal sobre lo que le gusta hacer cuando encuentra un rato de tiempo libre.
Sus orígenes humildes
Lamine Yamal siempre ha manifestado que está muy orgulloso de sus orígenes y, sobre todo, de donde viene. El joven se crio Mataró, en el barrio obrero de Rocafonda. Como dato curioso, los últimos dígitos del código postal de dicho barrio son el 304; un número que recrea mediante gestos con sus manos cada vez que marca un gol. "Llevo mi barrio dentro. Es un honor para mí poder enseñar al mundo entero de donde soy", confesó el joven.
A pesar de lo mucho que ha cambiado su vida en los últimos años, y pese a que sus padres están divorciados, Lamine Yamel mantiene una relación muy fuerte con los suyos. Sus padres, su hermano pequeño y su abuela se trasladaban este fin de semana hasta el Estadio Olímpico de Berlín para ver la gran final y apoyar a Lamine desde el palco.
Su padre, Mounir, ha hablado con los medios durante estas semanas, donde ha dejado constancia del gran orgullo que siente ante todo lo que está consiguiendo su pequeño. "Cuando él nació, yo ya sabía que iba a ser una estrella", confesó de lo más emocionado. "Para mí es el mejor en todo, no solo en fútbol, en amor, en persona y en todo. Es un niño y tiene una bendición de Dios, que es muy importante y hay que valorarla".
Además, también aprovechó para resaltar los valores del barrio que vio a Lamine dar sus primeras patadas al balón: "Este barrio es el mejor del mundo y de España, porque todos somos iguales y nos queremos lo mismo para todos. Ole Rocafonda 304, una referencia para todos", comentó. No hay ninguna duda de que el nombre de Lamine Yamal seguirá dando mucho de qué hablar en los próximos años, y que la lista de sus logros deportivos continuará creciendo hasta convertirse en toda una leyenda del fútbol.