Nos colamos en la habitación de la infancia de Cristina Pedroche en Vallecas, donde se ha instalado tras dejar la casa que comparte con David Muñoz

El nombre de Cristina Pedroche vuelve a estar en boca de todos, pero esta vez por algo casi inédito. No copan los titulares sus originales vestidos para presentar las Campanadas de fin de año ni otras tantas polémicas que se le han asociado en el pasado. Para sorpresa de muchos, lo que viene ocupando a la crónica rosa en las últimas jornadas es la posibilidad de que se haya dado una crisis entre ella y su marido, David Muñoz, con el que siempre ha formado uno de los matrimonios más sólidos del panorama público.

El motivo por el que han saltado todas las alarmas entre los seguidores de tan mediática pareja es porque la colaboradora de 'Zapeando' ha tomado la decisión de irse de la casa que comparten y mudarse de vuelta a Vallecas. A su barrio de siempre, donde creció y se ha instalado otra vez, justo coincidiendo con el inicio del segundo trimestre de su segundo embarazo. Lo ha hecho junto a su hija Laia, pero sin su marido. ¿El motivo? Según publicó la revista '¡Hola!', el cambio de residencia por "una temporada" remite a "la transición entre su antigua y su nueva casa". ¡Pero ninguna tan antigua como la que ahora vuelve a ocupar!

Cristina ha vuelto a la habitación donde se crio

Y no es una cuestión de antigüedad en lo material a lo que nos referimos, sino a la cantidad de recuerdos de otros tiempos que a Cristina se le han removido al volver a este lugar tan especial. El cuarto donde se crio y durmió durante muchos años, cuando solamente era una niña como ahora lo es la que será la mayor de sus hijos. Es inevitable que regresar a un espacio como este la transporte al pasado, y precisamente por eso no ha dudado en compartir con los usuarios de Instagram algo tan significativo.

En su perfil, donde acumula tres millones de seguidores, Pedroche ha publicado una fotografía desde en la que se aprecian algunos detalles de esta habitación tan particular. Una instantánea en formato 'selfie' acompañada del texto "no me acordaba de la luz tan chula que entra por la ventana de mi habitación de siempre". Y así, iluminada por esa luz que se cuela por el cristal, posa sonriente la televisiva, mientras detrás se atisba a ver una estantería de madera repleta de peluches de colores.

Porque si de algo no queda ninguna duda es de que a la Cristina más joven le encantaban los muñecos de felpa. Y no solo al ver este último 'post' enmarcado en su retorno temporal al hogar familiar en el que creció. Ya en el pasado, y de forma mucho más extensa, la que fuera presentadora de 'Password' ya se animó a mostrar con todo lujo de detalles las curiosidades que alberga esta estancia.

Entre mil y un peluches y fotografías románticas

Fue en febrero de 2024 cuando la mujer de Muñoz publicó, también en Instagram, un vídeo al estilo 'room tour', enseñando de cerca prácticamente todos los elementos de la habitación. Habitación llena hasta los topes, que ella misma reconocía que estaba "tal y como la dejé". Con todo lo que eso implica, invitándola incluso a preguntarse de forma retórica: "¿Puede dar más agobio?".

Eso sí, nada de agobio al acercarse al gran espejo que tenía colocado en su pared pintada en este color rosa palo. ¿Por qué? Porque todo él está rodeado con fotografías de lo más románticas donde se la ve a ella con David, el que ahora es su marido, en las que no faltan ni los besos ni las sonrisas.

Ahora bien, más abrumador puede resultar caminar un poco más allá, porque por lo menos en el momento de la grabación no había posibilidad alguna de sentarse o tumbarse en la cama. Estaba tan sumamente llena de peluches que no había hueco. Y no peluches pequeños. Entre los visibles, un Winnie de Pooh en tamaño XXL, pero también uno más pequeño. Incluso un unicornio. Por no hablar de que en la estantería también hay cabida para una muñeca con alas de mariposa o una réplica de Mudito, uno de los enanitos de 'Blancanieves'. La nostalgia está asegurada.