"Las amistades buenas y sanas son para siempre, ¡da igual que llueve, truene o nieve!". Una consigna que apunta a la importancia de esa familia elegida que conforman los amigos y que está firmada por María Zurita. Sí, la segunda hija de la infanta Margarita de Borbón y Carlos Zurita, y por ende sobrina del emérito rey Juan Carlos. Rostro conocido por todos que de un tiempo a esta parte ha ganado -aún más si cabe- peso en el universo mediático.

Y no solo porque no falla en la lista de invitados a los eventos más destacados de la alta sociedad o por su participación en formatos televisivos como 'MasterChef Celebrity' o 'Mask singer: Adivina quién canta'. La aristócrata, distinguida como grande de España, se maneja a la perfección en la primera línea del foco porque bien la conoce. Tanto ella como su círculo de amigos, entre el que figura Susanna Griso.

El de la prima de Felipe VI y la presentadora de 'Espejo público' en Antena 3, un vínculo que puede resultar sorprendente a bote pronto si no se conoce la faceta más privada de ambas. El caso es que no es que sean conocidas, es que María y Susanna son íntimas. Pocos planes de ocio hay en su agenda que no hagan juntas, pero es que además de acompañarse en los momentos más dulces, también es el suyo uno de esos vínculos al que pueden recurrir en las situaciones más delicadas.

Una amistad fuerte, en las buenas y en las malas

No hay que esmerarse en la investigación para dar con alguna instantánea de las dos juntas. Desde la estampa conjunta en algún 'photocall' o en eventos como la última Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid, aunque también desprendidas de todo artificio en sus perfiles de las redes sociales. Ni la periodista ni María tienen reparo en ocultar lo mucho que se adoran. Que se tienen ahí para lo que haga falta, sea para tomar un café, felicitarse los cumpleaños, pasar el fin de semana fuera, o para ser ese hombro donde llorar que a veces tanta falta hace.

Basta con remitir a algunos eventos duros de su relato de vida. Tanto de Griso como de Zurita, pues tal y como señaló el digital 'Vanitatis' en el 2021, la "estrecha y conocida amistad" entre ellas va más allá de "realizar numerosas actividades, viajes y planes de ocio juntas", pues también ha entendido de "apoyarse en algunos de los momentos clave de la vida de cada una".

"María fue un pilar fundamental para Susanna durante su divorcio", expone el citado medio, refiriendo al año 2020 cuando la televisiva rompió su matrimonio con Carles Torras tras más de veinte años juntos. Una implicación emocional recíproca, pues Susanna "hizo lo propio en el nacimiento del hijo de Zurita".

La sobrina del emérito, a la que no se le conoce una pareja oficial, fue madre por inseminación artificial el pasado 2018. Un hito vital agridulce, pues a pesar de la dicha por la llegada del niño al mundo, el parto fue muy complicado, ya que se le tuvo que provocar una cesárea de urgencia tras sufrir un desprendimiento de placenta.

Su última escapada rural, junto a su círculo de íntimos

Afortunadamente, y aunque el pequeño Carlitos sufrió una parada cardiorrespiratoria tan solo cuatro días después de nacer, el niño está sano y ya tiene seis años. Un proceso de crecimiento en el que Susanna la ha acompañado en todo momento. Prueba de ello queda en esas escapadas de amigas que siguen haciendo, como pasó este pasado puente de la Constitución. Susanna y María han disfrutado de unos días de relajo en el norte.

Concretamente, han sido Asturias y Cantabria sus destinos elegidos, en una ruta que ha comprendido desde la Basílica de Covadonga hasta la Santa Cueva y la pequeña localidad de Mogroviejo, pasando por los mejores restaurantes de la zona. Tiempo para desconectar antes de las fiestas y conectar con su círculo de íntimos, con algunas caras anónimas en las imágenes que han compartido en la red, pero que en otras tantas ocasiones comprende a otros rostros conocidos de su selecto grupo de amigos, como la diseñadora Paloma Cuevas.