No importa que ya haya pasado más de un año desde que Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin firmaron su divorcio sobre el papel. La tensión entre ellos sigue. Y sigue de actualidad, puesto que la simbólica batalla entre la infanta y el deportista parece lejos de terminar. Basta con echar un ojo a las informaciones que en las últimas semanas remitían a que el que fue su marido le pide a la hermana de Felipe más dinero de pensión. Algo a lo que la mediana de los Borbón y Grecia no estaría dispuesta, y que no ha sido más que el caldo de cultivo para una serie de -inesperadas- apariciones.

De forma más o menos premeditada, no deja de resultar sorprendente que después de mucho tiempo en un segundo plano optase Iñaki por volver a la primera línea. Primero antes de las fiestas, al acudir junto a Ainhoa Armentia, la abogada que es su pareja, a ver un partido de su hijo Pablo en el Palacio de los Deportes de León. Después en las vacaciones de Navidad propiamente dichas, copando las portadas del papel 'couché' la ansiada primera imagen del vasco y su nueva novia pasando un día 'en familia' en Vitoria. Pero es que la cosa no se queda ahí, y tras tanto trasiego, parece que Urdangarin planea ir todavía más allá en esta ristra de contundentes pasos al frente.

Iñaki Urdangarin
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Un paso más en su relación que Iñaki ya ha contado a sus hijos

De ninguna forma podía pasar inadvertida la estampa de Juan, Pablo, Miguel e Irene, los cuatro hijos nacidos de su matrimonio con la que fuera duquesa de Palma, junto a Armentia. La abogada con la que comparte su vida de un tiempo a esta parte todavía no se había dejado ver con ellos en ningún momento. De hecho, se advertía desde algunos medios en el pasado que ni siquiera conocía a los jóvenes. Algo que queda desmentido con esta reunión en el País Vasco en la que, a pesar de que no había excesiva complicidad ni conexión entre Ainhoa y los nietos del emérito, no habría sido arbitraria.

Así lo hacía saber Marisa Martín Blázquez en el programa 'Fiesta' el pasado sábado 18 de enero. Declaraciones donde la periodista apuntaba a algunos detalles sobre el comentado encuentro, que "ha formado parte de una mediación que le había pedido Iñaki a su hijo Pablo, que es el único que conocía a la pareja de su padre". De ahí que durante estas Navidades se hayan quedado en casa de Claire Liebaert, su abuela, y pudieran hacer esa "excursión por el monte" de la que ha quedado constancia. Pero es que al parecer, en el medio de este reencuentro también ha aprovechado Iñaki para transmitir a sus hijos que él y Ainhoa "están planeando boda".

Ainhoa Armentia
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"Ya lleva un año divorciado de su madre, han pasado tres de la separación", señalaba la colaboradora del espacio presentado por Emma García. Una noticia que, de acuerdo con la información expuesta por Marisa, todos los sobrinos del Rey "no lo han recibido de la misma manera". "Algunos de los hijos no están del todo de acuerdo", exponía, para después incidir en el hecho de que, de entre todos, "el hijo que menos quería conocer a Ainhoa y que estaba totalmente en contra, además del mayor, fue Miguel".

Todo lo que se sabe sobre la boda con Ainhoa Armentia

Por ahora no se conocen demasiados detalles sobre ese enlace con el que Iñaki y Ainhoa querrían formalizar su relación de una vez por todas. Ni el lugar, ni la fecha. Todo es un misterio, a excepción de que pretenden que sea "una ceremonia muy discreta (...) y con poca gente". Una premisa de sencillez y austeridad que, sin lugar a dudas, se desmarca completamente de su boda con Cristina en 1997.

"Necesitarán tiempo para asimilar", rezaba la cronista madrileña acerca de cómo van a digerir este nuevo 'giro de guion' en su entorno familiar sus vástagos. Un proceso de digestión que ya no solo aplica a "esta nueva relación", sino que ahora pasa también por ver que su padre está decidido a seguir adelante en su noviazgo con Armentia. Ese noviazgo que ahora busca ser matrimonio y que, aún más si cabe, rompe toda conexión con Cristina, la mujer con la que compartía su vida hasta hace tan solo unos años.