El dormitorio elegante y atemporal que Raquel Bollo ha decorado con el cabecero de moda que ya tenían nuestras abuelas

La vida da muchas vueltas y a veces se emprenden caminos que al final resultan ser muy exitosos. Si no, que se lo digan a Raquel Bollo, que desde que abandonó la televisión y el mundo del corazón hace años, ha emprendido una meteórica carrera en las redes sociales. Ha sabido cómo captar la atención de sus seguidores no solo por su talento y cercanía, sino también por su estilo de vida.

En estos últimos años se ha convertido en una gran prescriptora que inspira a lo largo de su día a día, donde la siguen miles de personas. Gracias a ello hemos podido descubrir uno de sus espacios más íntimos, su dormitorio, que nos ha encantado y aportado muchas ideas que podemos copiar en nuestra casa para replicar este espacio con tanta personalidad de la sevillana. 

Decorado con una mezcla de elementos clásicos y toques modernos, este espacio es un ejemplo perfecto de cómo Raquel combina lo sofisticado con lo acogedor y de cómo con pocos elementos podemos conseguir un espacio con mucha personalidad donde sentirnos cómodos a lo lago del tiempo. 

Decoración sencilla pero con carácter

Su habitación destaca por el uso de tonos neutros como el blanco y el beige, con algunos tonos tierras, que consiguen aportar sensación de calma perfecta para un espacio para el descanso como es el dormitorio y, además, se consigue con ello maximizar el espacio.

Con el techo blanco, y con el suelo de madera, la sevillana ha escogido muebles con un toque rústico y natural para decorarlo, como podemos ver en las dos mesillas que hay junto a la cama. Incluyen una cama de gran tamaño vestida completamente de blanco, con la presencia de cojines en tonos marrones o grises, y con un cabecero acolchado, que es uno de los elementos más llamativos del lugar y que después analizaremos mejor. Los detalles como cojines y mantas añaden un toque cálido y acogedor al conjunto. 

Un estampado relajante y natural 

Otra cosa que destaca sobremanera en este espacio tan personal de Raquel Bollo es el relajante y natural diseño de papel pintado que ha escogido para hacer un punto focal de atención en su pared frontal del dormitorio. Vemos que sobre el fondo beige se salpican una serie de elementos naturales, como hojas de palma, en un tono un poquito más oscuro, pero que sigue manteniendo la calma. 

Encontramos así una trama visual que da volumen y aporta textura, pero que sigue transmitiendo calma y relajación, consiguiendo decorar el gran espacio de forma directa e inmediata, sin necesidad de cuadros o más elementos. Este truco es perfecto para conseguir decorar los espacios pero de una forma mucho más elegante.

Inspiración de nuestras “abuelas” 

Una de la claves de Raquel Bollo que más encaja con su público es la capacidad de mezclar ideas clásicas y tradicionales, con conceptos mucho más contemporáneos y actuales. Y eso ocurre también en su dormitorio, como vemos con su especial cabecero.

Se trata de un cabecero beige, con capitoné - que es como se denomina el tejido de cuero con tachuelas o “botones” que se reparten a lo largo de la tela para realizar figuras geométricas. Esta técnica de decoración ha sido una de las más repetidas durante décadas en las casas más elegantes, estando presente en sofás, butacas o como hemos visto este cabecero. 

Un diseño atemporal

Gracias a estas claves de diseño y de decoración, encontramos un espacio no solamente relajante, sino también tremendamente atemporal, puesto que, al no contar con una tendencia muy radical y destacada, que podría pasar de moda muy rápido y hacer que la estancia pareciera desactualizada, conseguimos armonizar este espacio durante mucho más tiempo con estos recursos que nunca caducan. 

Improvisado escenario gracias a su naturalidad.

Lo cierto es que hemos podido conocer mucho mejor el dormitorio de Raquel Bollo, ya que la sevillana ha decidido convertir este espacio tan personal en su escenario perfecto para compartir sus compras, novedades y looks en los vídeos que publica en sus redes sociales. Aprovechando la calidez y autenticidad de este entorno, Raquel ha conseguido que su dormitorio se convierta en un lugar para compartir con todos sus seguidores.

Al utilizarlo como telón de fondo, logra conectar con su audiencia de una forma mucho más especial, resaltando esa autenticidad y cercanía que son, sin duda, las claves del éxito de la empresaria en Instagram.

Gracias a su enorme naturalidad, ha optado por evitar un escenario frío, superficial o cargado de postureo, y en su lugar ha escogido un ángulo perfecto de su dormitorio, su espacio más peculiar. Esta elección no solo permite acercar aún más a sus seguidores a su vida privada, sino que también le brinda la oportunidad de mostrarse de una forma mucho más íntima y personal.