"Siempre he estado como a la sombra de muchas cosas, lo que me ha ayudado a ser una buena espectadora del resto de la gente". Son declaraciones de Idoia Montero en una conversación con 'Vanity Fair' en el 2009. Un nombre desconocido para muchos a bote pronto, pero cuyo apellido remite a una de las artistas más consolidadas de la industria de la canción española. Esa mujer que hizo carrera junto a La Oreja de Van Gogh y cuyos temas, con tan reconocible hilo de voz, siguen siendo banda sonora para muchas personas. Idoia es hermana de Amaia. Amaia Montero, indiscutible figura pop del panorama nacional que parece haber vuelto a escena con más presencia que nunca.
Por aquello de que un artista que sigue sonando aunque haya frenado su carrera está igual de presente, aunque el caso de la de Irún sea verdaderamente particular. Tan sencillo como que, después de una dilatada trayectoria en la que no han faltado los éxitos, se vio obligada a hacer una pausa. Un 'stop' a marchas forzadas que puso el grito en el cielo de sus admiradores y los medios de comunicación. Un alto en el camino en el apoyo de su entorno se ha convertido en algo fundamental para poder seguir adelante y reaparecer como lo hizo recientemente. Esa esperada vuelta a los escenarios, por sorpresa y durante el segundo concierto de Karol G en la capital.
Idoia Montero, un hombro donde llorar para Amaia
El pasado 21 de julio, el madrileño estadio Santiago Bernabéu asistía perplejo a un momento que ha quedado para la historia. Un encuentro entre artistas totalmente diferentes, justo cuando la colombiana artífice de la 'Tusa' anunciaba que una cantante que llevaba un tiempo retirada de la música estaba a punto de subir a cantar al escenario con ella. Al son de un himno intergeneracional como 'Rosas', con todos los presentes entonando aquello de "por eso esperaba, con la carita empapada", una temblorosa Amaia Montero se presentaba nerviosa como la primera vez. Los últimos tiempos no han sido fáciles, pero por fin, todo parece haberse puesto en su sitio.
En ningún caso ha sido fácil llegar hasta aquí. Mas todavía cuando su carrera iba como un tiro, incluso después de partir peras con la agrupación que aún hoy día lidera Leire Martínez. Amaia siguió triunfando en solitario, con 'hit' tras 'hit' hasta el lanzamiento de 'Nacidos para creer'. Fue ese el último álbum de estudio de la guipuzcoana que vio la luz, ya que después vendría el silencio. Una parada por motivada por sus problemas de salud mental y que había despertado todo tipo de rumores y especulaciones. Fueron unas imágenes que ella misma publicó en su perfil de Instagram en el 2022 las que hicieron saltar todas las alarmas. Instantáneas en las que aparecía visiblemente desmejorada, acompañadas de un comentario muy desalentador que decía "si la esperanza es lo último que muere y todavía no la he perdido, ¿de qué me sirve la vida?".
La prueba definitiva de que Amaia se encontraba en una situación límite, que posteriormente se definió como un severo cuadro de estrés y ansiedad. El motivo principal para parar todas las rotativas y dejar de componer y cantar. Lo anterior, además de otro bache de salud, cuando en julio de 2023 tuvo que pasar diez días ingresada en la UCI tras sufrir complicaciones en el postoperatorio de una intervención en la mano. Esa mano la que, de forma simbólica, siempre ha sostenido su hermana Idoia. La mujer que no ha tenido reparo en estar 'a su sombra', en los momentos buenos y en los menos buenos. A su lado cuando más le ha hecho falta.
Idoia que, aunque no se ha ocultado de forma expresa, tampoco ha hecho nunca un alarde desmesurado de la popularidad de su hermana para encontrar su lugar. Es por eso que su figura sigue resultando desconocida para muchos, desde un segundo plano que le ha valido para probar tantas disciplinas como ha gustado. Sin ir más lejos, su conversación con la publicación antes citada remitía a la publicación de 'En pleno baile', su primer libro. De letras más que de números, habiendo participado en la composición de dos de los álbumes de su hermana, pero también de artes. Diseñadora, pintora, poeta, empresaria... E incluso participante de un programa de televisión. Ecléctica como pocas.
Probó suerte en un concurso de televisión
"Idoia, eres una artista", contaba también en 2019 sobre la frase más repetida por su hermana hacia ella. Eso y que siempre la ha animado a embarcarse en nuevos proyectos, además de ayudarla de forma expresa. Prueba de ello quedó cuando, allá por el 2011, se adentró en el mundo de la moda con el lanzamiento de la firma 'La vie de Rosita'. Firma que, por supuesto, Amaia vistió. Incluso la involucró en su proyecto musical en el rol de estilista. Apoyo mutuo que también le brindó en una de sus últimas ocurrencias: probar suerte como aspirante de 'MasterChef'. Porque sí, Idoia Montero trató de convertirse en una de las concursantes del formato de La 1.
Y no dudó en llevar a su hermana por bandera. Para absoluta sorpresa de los jueces, que se quedaron totalmente perplejos al conocer su relación familiar. Lamentablemente, Idoia se quedó a las puertas de ser una de las elegidas, tras recibir la negativa de Pepe Rodríguez y Jordi Cruz, que le expresó que "no he visto que quieras ser cocinera". Ella, feliz de todos modos por haber vivido la experiencia, expresó que "el fracaso es no hacer nada, por eso estoy contenta". Una declaración de intenciones a la que se sumó Amaia, que se mostró orgullosa y contundente: "No creo en los buenos profesionales si no son buenas personas y tú eres una excepcional".