El calzado cómodo es el mejor complemento de la invitada de boda. Y es que no hay nada más práctico para disfrutar de una celebración de este tipo que lucir un calzado que nos permita bailar y disfrutar hasta el final sin dolor de pies. Por eso muchas invitadas de boda siempre tienen un plan B para los pies en forma de alpargatas, un calzado tradicional que resulta cómodo y se considera apropiado para disfrutar del baile y la barra libre.
¿Por qué no calzarse las alpargatas desde el principio de la celebración? Solo tenemos que saber cómo llevarlas para que resulten elegantes y apropiadas para una boda.
Cómo vestir con alpargatas en una boda de noche
Las alpargatas son una excelente opción para dar altura pero con la máxima comodidad. Especialmente si vamos a tener que caminar por terrenos complicados, piedras, césped, etc. Aunque mucho cuidado, porque no todo vale, ya que es, sin duda, un calzado informal.
- Como segundo calzado: la mejor opción es siempre asistir a las bodas con un cambio de calzado. Eso permite que el pie se relaje y, por tanto, que aguantemos más y mejor toda la fiesta. Así podemos llegar fantásticas y con un calzado muy fashion a la boda y, en el momento del baile, cambiarnos a nuestras fantásticas alpargatas. Y es que no hay que olvidar que el primer impacto es el que cuenta.
- Vestidos largos: otra clave para que la alpargata luzca bien en la invitada es optar por vestidos que cubran el calzado, de forma que no esté tan expuesto y no sea tan evidente.
- A juego con el vestido: también es preferible que sean del mismo color del vestido, ya que eso dará uniformidad y hará que sean menos visibles y generen mayor armonía.
- Los materiales: hay muchos tipos de alpargatas y no todas resultan igual de elegantes. Por ejemplo, si la suela es del color de la alpargata, le dará mayor elegancia. Si hablamos de materiales como el raso, también resultarán más finas. O, por supuesto, si son doradas o plateadas, aún más todavía.
10 looks con alpargatas para invitada de boda de noche
Etoqieta relajada
Las alpargatas son ideales para las bodas que se celebran al aire libre, en medio del campo o en la playa. No solo porque son cómodas, sino porque se adaptan mejor al terreno irregular propio de estos contextos. Como muestra, este diseño en tono amarillo mostaza con tejido brillante y detalles cut out con cordones decorativos, ideal para una celebración con una etiqueta más relajada y casual.
En tonos neutros
Este look ecléctico en tonos neutros de Claudia Osborne está protagonizado por dos elementos tradicionales, como son las alpargatas de esparto y el mantón de manila, que se combinan con un sencillo vestido lencero en color ocre y un adorno joya que le da un toque años 20 al conjunto.
Un vestido asimétrico
Este vestido de flores asimétrico incorpora un toque campestre gracias a las alpargatas de esparto con tejido de ganchillo en tono hueso. Una combinación ideal para una boda de noche que se celebre en medio de la naturaleza, como es el caso.
Un vestido de flores
Los vestidos estampados de flores son especialmente idóneos para lucir alpargatas en una boda de tarde. Tienen un aire entre romántico y campestre perfecto para llevar este tipo de calzado tradicional con un toque muy artesanal. En estos casos, las clásicas alpargatas en tono neutro son las más adecuadas, para no competir en protagonismo con el estampado.
Con volantes
Este look de invitada de Tamara Falcó causó sensación por la original combinación del vestido, entre romántico y bohemio, y las alpargatas con cuña. La socialité consiguió elevar el nivel de este tipo de calzado y demostró que encaja a la perfección con la invitada de noche más elegante.
Estilo boho
Los looks de estilo bohemio con alpargatas siempre son un acierto, a no ser que la etiqueta indique lo contrario. En concreto, los vestidos de estilo boho combinan a la perfección con este tipo de calzado de esparto, sobre todo si se elige un diseño liso, como el de estas alpargatas que luce Isabelle Junot. Son perfectas para combinar sin estridencias con un vestido de estampado bohemio como el que eligió para esta ocasión.
Clásico
Los vestidos y conjuntos clásicos también pueden combinar bien con alpargatas. La clave está en ceder todo el protagonismo al vestido –o conjunto de top y falda o pantalón– y elegir un modelo de alpargata discreto, liso y en un color que combine sin estridencias. Kate Middleton elige unas en tono camel para complementar un vestido de flores en tonos negro, gris, azul y amarillo.
Complementos a juego
También podemos jugar con la combinación de alpargatas y otros complementos del look como el bolso, el chal o la joyería. En este caso, Sophie de Wessex conjunta sus alpargatas blancas con cierre al tobillo con un chal con flecos y realza así el tono blanco del estampado del vestido.
Contraste
También podemos buscar el contraste con las alpargatas para conseguir una combinación armoniosa. Eso sí, siempre con un diseño liso cuando se trate de un vestido estampado como el que luce Sassa de Osma, que lo combina con alpargatas negras con cintas a juego.
Con un mono
Como alternativa al clásico vestido de invitada de tarde, el mono siempre es una opción acertada que podemos combinar con unas alpargatas. Lo mejor será elegir un modelo con cuña alta para estilizar la figura y ganar centímetros de pierna. En este caso, Letizia combina un mono azul marino estampado con flores multicolores con unas elegantes alpargatas lisas en el mismo tono.