Tener una casa con plantas es una de las mejores maneras de apostar por tu bienestar. Además de quedar muy bonitas, muchas son estupendas purificadoras del aire y eliminan de él sustancias tóxicas como el formaldehído, el tricloroetileno y el benceno, según el estudio publicado por la NASA en 1989. También te hace sentir bien cuidarlas y ver cómo van creciendo y, por supuesto, decorar con ellas y llenar tu casa de color y vida. ¿Pero qué plantas elegir?
Pues lo primero, aquellas cuyo cuidado se adapte a las condiciones de tu casa y el grado de compromiso que puedas adquirir. Si es una planta muy delicada y te despistas con frecuencia, mejor escoge otra variedad. A mí me gusta pasarme por Lidl porque cada semana tienen ofertas muy buenas de plantas de temporada, con lo que ya te da una orientación sobre las más adecuadas para esta época y clima.
Por menos de lo que piensas puedes darle un toque verde a tu casa llevándote plantas de lo más variadas. Esta semana la estrella es el crisantemo, muy relacionado con el próximo Día de los Difuntos. Si te gusta, estás de suerte porque encontrarás dos variedades para elegir la que más te encaje, o incluso las dos porque salen fenomenal de precio.
Así se cuida el crisantemo
- Luz. Le gustan las zonas luminosas, pero no en exceso para evitar el sol directo.
- Temperatura. No le sienta bien el calor, de hecho es una de las causas por las que pierde sus flores.
- Maceta. Plántala en una con al menos 20 centímetros de profundidad. Asegúrate que tiene buen drenaje para evitar el encharcamiento y los problemas derivados de él, como los hongos.
- Sustrato. Necesita uno de calidad que facilite la salida del agua y no la retenga.
- Riego. Tu planta agradecerá que riegues solo cuando la tierra esté seca. Evita mojar las hojas y, sobre todo, las flores. No te olvides de quitarlas cuando estén marchitas.