Nervios descontrolados, horarios desordenados, cambios hormonales o no descansar las horas necesarias son algunos de los motivos que nos llevan a picar descontroladamente. Si quieres evitarlo, porque estás a dieta y no quieres engordar, o simplemente porque te gusta cuidarte sin renunciar al picoteo, toma nota de estos alimentos saciantes. Te ayudarán a mantenerte en tu peso o ¡incluso adelgazar!
Alimentos que llenan y quitan el hambre
- Patatas cocidas, las más saciantes. La científica australiana Susanne Holt ha probado que las patatas son las más saciantes. Los voluntarios comieron alimentos que aportaban 240 calorías y valoraron su sensación de hambre cada 15 minutos. Las patatas resultaron ser siete veces más saciantes que los cruasanes. Tómalas siempre acompañadas de verduras y te llenarán aún más.
- Copos de avena para desayunar. Son el desayuno ideal para llegar al mediodía sin picotear, ya que la avena tiene mucha fibra, lo que te ayuda a sentirte llena, y es mucho más rica en proteínas que el resto de cereales, lo que también ayuda a la saciedad. Puedes combinarla con frutas y yogur o hasta en hamburguesas, como en una de las recetas que convertirán la avena en tu nueva mejor amiga.
- Pan integral, siempre. Uno de los mitos sobre los alimentos que impiden adelgazar es que el pan engorda. Pero no tiene por qué ser así. Si se consume en la cantidad adecuada (100-150 g al día) y dependiendo del conjunto de la dieta, no tiene por qué engordar. Pero, eso sí, siempre integral ya que sacia más y es mucho más nutritivo que el empobrecido pan blanco. Si evitas la mantequilla y alimentos azucarados como cremas de cacao o mermeladas, y optas por ingredientes como jamón cocido o queso bajo en grasa, añadirás una porción extra de proteínas, que también son saciantes.
- Legumbres, sanas y variadas. Garbanzos, alubias y lentejas son equilibrados nutricionalmente y quitan el hambre. Su gracia está en la mezcla de fibra, hidratos de carbono lentos y proteínas. Si las germinas (humedécelas y espera a que broten), obtienes un alimento aún más saciante. Y si no quieres calentarte mucho la cabeza, puedes prepararlas con un poco de carne magra, o con alguna de las ideas que te proponemos en las recetas fáciles que puedes hacer con un bote de garbanzos.
- El quark
es tu aliado. Puedes encontrar queso fresco tipo quark con un 0% de grasas. Constituye una opción más saciante y proteica que el yogur. Lo puedes tomar en cualquier momento y está muy rico combinado con trozos de frutas frescas, que además tienen muchas vitaminas. Y si te decantas por otro tipo de queso, ten en cuenta cuántas calorías tiene tu queso favorito.
- Verdura fresca y tentadora. Los palitos de verdura –zanahoria, pimiento, apio– son apetecibles y saciantes gracias a su contenido en agua y fibra, que llena el estómago. Los puedes acompañar de una salsa ligera baja en grasa: prepárala con un yogur desnatado, eneldo y cebollino. O también probar nuestro hummus de garbanzos súper ligero, que aparte de ser bajo en calorías es muy saciante al estar hecho con legumbres.
- No te olvides de una buena sopa. Las sopas, tanto frías en verano como calientes en los meses más fríos, son una opción inteligente para alejar el hambre. Prepáralas con una buena cantidad de verduras y algo de legumbre o patata; así potenciarás su efecto. Son un primer plato equilibrado desde el punto de vista nutritivo y te ayudan a obtener la dosis diaria de líquidos que necesitas.
- Masticar frutos secos. Toma frutos secos como si fueran un suplemento nutritivo por su riqueza en proteínas, minerales y ácidos grasos sanos. El hecho de que se tengan que masticar bien ayuda a que resulten saciantes. Por su perfil graso, son buenas elecciones las nueces, las almendras y las avellanas. Mejor cómpralas sin salar y sin tostar. Y si tienes dudas sobre la cantidad, aquí te contamos cuántos frutos secos tomar para que te beneficies de sus múltiples propiedades sin echar a perder tu figura.
- Arándanos para picar. Se diría que los pequeños y adictivos arándanos no son capaces de saciar a nadie, pero entre todas las frutas son las que aportan una proporción mayor de fibra (5% del peso). Por tanto, ayudan eficazmente a controlar el apetito, con la ventaja de que contienen además sustancias antioxidantes muy sanas, las antocianinas, que dan color a la piel y a la pulpa.
- El abadejo, lleno de virtudes. En general, el pescado es sano, rico en proteínas y saciante. Pero el abadejo, una especie similar al bacalao que procede del Golfo de Vizcaya o el Atlántico Norte, es el menos calórico (70 kcal en 100 g) y a la vez el más saciante. Prepáralo al vapor y con salsa tártara de yogur (con pepino, huevo duro, alcaparras y perejil picado muy fino).
- Primero uvas, luego manzanas. Otro descubrimiento del estudio de la australiana Susanne Holt es que las uvas, tan dulces, tan apetitosas, se encuentran entre las frutas más saciantes. En otoño y en invierno, puedes tomar manzanas y naranjas, que son aún más saciantes.
- Fruta desecada para llevar. Aunque aporte bastantes calorías en relación al peso, su energía es duradera y reduce las cantidades en las siguientes ingestas. Come solo un puñado, pero mastica muy bien cada bocado, hasta convertirlo en una papilla. Quedarás más satisfecha.
- Arroz integral. Tiene un importante efecto saciante: 200 g te dejarán muy llena y sumarán solo 350 calorías. ¿Sabías que consumir arroz integral dos veces por semana disminuye un 11% la posibilidad de enfermar de diabetes? Si además comes pan y pasta integrales, el riesgo se reduce un 36%, según un estudio de la Universidad de Harvard.
- El truco del aguacate. Basta añadir unas láminas de aguacate –una fruta atípica, rica en grasas sanas– a bocadillos, ensaladas o batidos para multiplicar su capacidad de dejarte saciada. Además de ácidos grasos monoinsaturados, beneficiosos para el sistema cardiovascular, proporciona vitaminas del grupo B y E.
- La sana col fermentada. El chucrut es una verdura y un probiótico –un alimento con bacterias que se integran en la beneficiosa microbiota intestinal– gracias a la fermentación que llevan a cabo las bacterias. Además tiene gran poder saciante y evita la hinchazón. Para distinguirla, fíjate en que los ingredientes sean col, agua, sal, y nada más. No puede contener vinagre o vino. ¡Ah! y se come cruda.
Y si quieres saber qué tipo de régimen te conviene más, puedes hacer el súper test para saber cuál es la mejor dieta para adelgazar para ti que ha diseñado la Dra. Beltrán para cada caso concreto.