Contrariamente a lo que mucha gente piensa, con estas recetas con alcachofa ha quedado claro que esta hortaliza da mucho juego. Y si continúas bloqueada porque no sabes cómo limpiarlas o prepararlas, con las siguientes indicaciones ya no tendrás ninguna excusa.
Cómo limpiar las alcachofas según la receta
- Si vas a freírlas, corta las puntas y las hojas exteriores. Pero no retires el tallo, solo pélalo. Y córtalas en láminas.
- Si vas a utilizarlas en un guiso, quita las hojas exteriores, corta las puntas, quita el tallo, y corta en en mitades o en gajos.
- Si las cueces, reserva el caldo para hacer sopas o purés.
- Si las vas a hacer a la plancha o al horno, no les cortes las puntas para que guarden la humedad interior.
- Si solo quieres el corazón, sigue el paso a paso que tienes a continuación.
Paso a paso para preparar los corazones de alcachofa
- Retira las hojas exteriores más duras con las manos o con la ayuda de un cuchillo.
- Pon la alcachofa de lado sobre una tabla y corta las puntas de las hojas y el tallo.
- Repasa la base quitando las zonas duras que han quedado entre el tallo y las hojas.
- Con un cuchillo o una cucharilla pequeña, retira la pelusilla que hay en el interior.
- Sumerge rápidamente el corazón en un cuenco con agua y zumo de limón o perejil para que no se oxide.
Qué tener en cuenta a la hora de comprarlas y conservarlas
- Época. Las alcachofas son propias de los meses más fríos. Se recolectan desde mediados de octubre hasta casi mediados de primavera. Pero su momento óptimo según el calendario de las verduras de temporada, es el invierno.
- Características. Al comprarlas, selecciona las más grandes y que pesen en proporción a su tamaño, que tengan las hojas bien compactas y que sean de color verde claro. Ten en cuenta que la alcachofa es el capullo de una flor. Si pesa poco, está muy abierta y oscura es que ya se está abriendo.
- Conservación. Para aguanten en buen estado, se recomienda no cortar el tallo y conservarlas dentro de una bolsa de plástico en la nevera. Así puede aguantar hasta una semana.
Propiedades de la alcachofa
Además de aportar mucha fibra, las alcachofas son diuréticas (contribuyen a la eliminación de líquidos), favorecen la desintoxicación hepática, y rebajan los niveles de colesterol y azúcar en sangre, entre otros múltiples beneficios. Sin embargo, las mujeres lactantes deben moderar su consumo porque altera el sabor de la leche.