Corría el año 2011. El lugar: Sevilla. El evento: la multitudinaria Feria de Abril. Allí, hace ya más de una década, entre casetas, rebujitos y mucha alegría primaveral, el extorero Fran Rivera quedó prendado de ella. Era Lourdes Montes, nieta del cantante José Manuel Soto a la que tan pronto como la vio asegura haber reconocido como "la mujer con la que me voy a casar". Así se lo hizo saber al amigo con el que se encontraba cuando cruzaron miradas por primera vez. Y no se equivocaba.
Basta con revisar todo lo que ha sucedido en estos últimos trece años, comenzando por su boda el 14 de septiembre de 2013. Tras dos años de relación y un divorcio a sus espaldas del que ya habían pasado otros doce, el diestro pasaba por el altar de nuevo. La finca El recreo de San Cayetano de Ronda acogió el enlace, aunque para la ceremonia religiosa hubo que esperar hasta el 12 de julio de 2014, en la Capilla de los Marineros de Sevilla.
De aquel 'sí, quiero' ha pasado ya un tiempo. El suficiente para que, más allá de afianzar su relación y convertirse en una de las parejas mejor miradas de la crónica social, hayan tenido dos hijos. Fran ya había sido padre de Cayetana, su primogénita nacida de su matrimonio con Eugenia Martínez de Irujo, en 1999. Dieciséis años después, en 2015, nacería Carmen, su primera hija en común con Lourdes. En 2019, el pequeño Curro. Y el tercero está en camino. ¿Cuál es el secreto de un amor tan idílico?
El 'secreto' de su relación con Fran Rivera
No es fácil. Nunca lo es cuando la atenta mirada pública persigue hasta los topes. Algo con lo que Fran Rivera lleva lidiando desde que era muy joven por herencia familiar. Hijo de torero y 'socialité', su vida interesa tanto que en ocasiones puede ser inmensa la presión mediática. Lo anterior, añadido al grandísimo reto que implica la crianza y que ahora va un paso más allá, pues están a punto de convertirse en familia numerosa.
"Me llama llorando y me enseña el predictor. Digo, no me lo puedo creer", revela la previa a su entrevista en '¡De viernes!' de este 8 de noviembre. Sin duda, una alegría añadida a su relación, pero con la idea siempre presente de que el amor va mucho más allá de ejercer de padres. Algo a lo que la propia Lourdes aludió recientemente en una entrevista en el pódcast de psicología de Sibi Montes. Porque el amor hay que cuidarlo, y ellos tienen sus claves particulares, incluso cuando hay discusiones de por medio.
Según la diseñadora narraba en esta charla con su hermana, la clave de su felicidad como pareja tras todos estos años caminando de la mano es ser diferentes, pero a la vez tener muchos puntos en común. "Ese es el secreto para que una pareja funcione", sentencia la sevillana, refiriendo que "nos compensamos bastante bien". A que son "generosos a la hora de repartir el tiempo" y a que "los enfados nos duran muy poco". ¿Su solución infalible? "No somos rencorosos ninguno de los dos".
Así está viviendo Lourdes su tercer embarazo
Fue precisamente en esa misma entrevista donde Lourdes, sin necesidad de ocultar la realidad, también quiso sincerarse sobre cómo está viviendo la maternidad por tercera vez. Con lo bueno, pero también con todos los obstáculos que supone el proceso de gestación en un embarazo que comienza a pesarle. "Digan lo que digan, la energía y salud de los treinta no es la misma", comenzó a explicar a Sibi durante esta conversación distendida sobre el momento que vive actualmente.
"Estoy infinitamente más cansada", añadía, para después exponer que "tengo ya dos hijos y no es lo mismo, lo estoy notando mucho". Para ella, lo mejor sería ahorrarse el trámite del embarazo propiamente dicho. "Quiero que pasen los nueve meses y tener al bebé (...). Me lo saltaría porque quiero estar al 100% con mis hijos, seguir mi ritmo y no puedo", matizaba. La prueba de que sus deseos de ampliar la familia, que se verán cumplidos en los próximos meses, siguen intactos. Eso sí, siendo honesta sobre los puntos menos buenos de su situación.