Hay días que, aunque tenemos que atender a compromisos obligados en nuestra agenda, estos nos hacen pasar un buen rato y estar entre los nuestros. Si no, que se lo digan a la reina Letizia, que hoy estaba completamente en su salsa, en los Premios de Periodismo “Francisco Cerecedo”, uno de los galardones más prestigiosos de su gremio y un día clave para la profesión que tan feliz la hizo.
No cabe duda de que Letizia antes que reina fue periodista, y eso, aunque ella ha intentado disimularlo durante toda la vida, es imposible de sacar de su sangre. Vemos lo bien que se desenvuelve en los discursos, así como lo interesada que suele estar haciendo preguntas cuando acude a diversos eventos o cómo saluda con cariño a los compañeros de la prensa siempre que es posible.
Rodeada de grandes nombres del periodismo, tanto premiados, como que forman parte del propio jurado de los galardones, la reina se ha mostrado muy cercana y natural, pero sin olvidar su rango, y mucho menos su elegancia y saber estar, en esta ocasión, apostando por la sencillez. Aun así, no ha dejado pasar la oportunidad de mostrar su admiración ante el galardonado, uno de los periodistas más relevantes actualmente en los medios de comunicación.
Un esmoquin sencillo y cargado de simbolismo
Esta tarde se celebraba en el Hotel Ritz de Madrid un momento grande para el mundo del periodismo. Sus majestades, Felipe VI y Doña Letizia, presidían el acto de entrega de la XLI edición del Premio de Periodismo “Francisco Cerecedo” que, organizado por la Asociación de Periodistas Europeos, ha premiado al periodista Carlos Franganillo.
Para acudir a presidir este evento, en esta ocasión Letizia ha decidido apostar por un look sencillo y tremendamente elegante, que refleja por completo su personalidad, pero también el momento por el que pasamos en el país. Por eso, ha escogido un esmoquin negro sencillo, no muy entallado, de corte recto, tela fluida y con las solapas de cuello y bolsillos en raso como único detalle. Sigue así los pasos de su hija Leonor, que sorprendió a todos con un esmoquin, en su caso más ajustado y con un aire más sofisticado en los pasados Premios Princesa de Asturias celebrado hace unas semanas en Oviedo.
Debajo, un sencillo top lencero y de complemento un bolso de mano también negro. Para los zapatos, sus cómodos salones negros de punta con slingback. Un look elegante, sobrio y atemporal que la reina Letizia ha accesorizado en cuanto joyas únicamente con unos aretes dorados y su imprescindible anillo Coreterno. Esto consigue relajar aún más el look, convirtiéndose casi en un “uniforme” de gala para la asturiana, que adora los trajes, y con este ha encontrado la forma perfecta de integrarlo en un acto nocturno.
La sencillez elegante de Letizia y el mensaje que esconde
Sabemos que era un día algo complicado para Letizia, por una parte, seguramente estaba tremendamente emocionada de poner en valor la profesión que tanta ama, pero, por otro lado, seguro que aún sigue con la mente puesta en Valencia y en todos los lugares afectados por la Dana hace unas semanas, a los que volverá mañana. Teniendo claro que no son momentos de grandes celebraciones cuando aún se lloran a los más de 200 fallecidos por la tragedia.
Por ese motivo, Letizia ha decidido mostrar una imagen más contenida, sencilla y discreta de la que nos tiene habituados con este esmoquin negro. Aunque sabemos que Letizia nunca disfruta llamando mucho la atención, sí que vemos que en las apariciones públicas de los últimos meses se la veía radiante, estrenando prendas y con una renovada pasión por su armario, en esta ocasión ha querido apostar por la sencillez y la discreción con un “uniforme” que siempre es una apuesta segura.
Además, sigue su filosofía de lanzar mensajes con la ropa. En relación con esto, hemos visto cómo durante los últimos días no ha dudado en lanzar algunos mensajes velados de ánimo y apoyo a Valencia a través de sus estilismos, en los que ha decidido añadir joyas de Singularu, una firma de joyas valenciana cuyo almacén se ha visto muy perjudicado por la riada provocada por las grandes lluvias. Hoy, apostando por este sobrio look refuerza esta idea de momentos tristes para todos.
“Vecino” de Letizia
Seguro que el premio a este periodista, además de por su buena labor, también hace particular ilusión a Letizia por ser su “vecino” y es que el presentador de Informativos Telecinco nació en Oviedo, como la reina. Aunque se llevan varios años, Letizia tiene 52 años y Carlos Franganillo acaba de cumplir 44 años, seguro que han disfrutado de los mismos espacios en la ciudad asturiana como apasionados de la comunicación.
Además, no es la primera vez que sus majestades entregan un premio a este periodista, puesto que, según explican en La Razón, “en 2019 recibió de manos de Sus Majestades el Premio APM a Mejor Periodista del Año”.
La gran noche de Carlos Franganillo
El Premio de Periodismo “Francisco Cerecedo”, organizado por la Asociación de Periodistas Europeos, cada año buscan reconocer la figura de un profesional de la comunicación que haya destacado por su impecable trayectoria, con nombres entre sus ganadores como: Carlos Alsina, Pilar Bonet, Vicente Vallés, José Antonio Zarzalejos, Pepa Bueno, Juan José Millás, Iñaki Gabilondo o Maruja Torres, entre otros muchos. El galardonado de este año, que además recibirá 24.000 € de premio, es uno de los rostros televisivos más reconocidos debido a años frente a la pantalla en diversas cadenas.
“Su trayectoria como referencia del periodismo televisivo en España. Su independencia, rigor, capacidad para innovar los formatos periodísticos de la televisión y su vocación por el reporterismo”, explica el propio fallo del jurado el porqué de la elección de este periodista. Y añaden “su destreza para trasladar hechos complejos de la actualidad nacional e internacional a grandes audiencias y su capacidad para inspirar a nuevas generaciones de periodistas”.