Cuando Leonor juró la Constitución dio un paso enorme dentro de la institución que sus padres representan. Su mayoría de edad la acercó a una corona que, el día de mañana, debería ser suya. Ante un ascenso real de la primogénita de Felipe y Letizia, surge una duda: si entonces ella es la reina, ¿qué cargo tendrá su madre?
Leonor reinará con el nombre de Leonor I, convirtiéndose en la primera monarca desde Isabel II. Para llegar al trono podrían darse tres situaciones: el fallecimiento, incapacitación del actual Jefe del Estado o su abdicación, como fue el caso de Juan Carlos y Felipe. En la primera situación, no hay duda, el rey deja de existir y su primogénita se convierte en la nueva responsable de la institución; pero el segundo y el tercer caso generan más controversia. Y es que, ¿qué título utilizarían tanto él como Letizia?
¿Qué es un rey emérito?
Para definir la palabra emérito, vamos hasta la RAE, que nos arroja este significado: “que se ha jubilado y mantiene sus honores y alguna de sus funciones”. En el caso de Juan Carlos, exiliado en Abu Dabi tras ser investigado por la Fiscalía por sus presuntos negocios opacos, muchos han dejado de considerarle con honores cuando este estuvo a punto de ser juzgado en un proceso penal. La inviolabilidad asociada a su cargo y la prescripción del presunto delito lograron que el Tribunal Supremo acabara archivando las causas que tenía abiertas.
Él tampoco desea que le consideren “emérito”. No le gusta. Lo contó Susanna Griso, que mantiene contacto directo con el padre de Felipe VI, y siempre le ha manifestado su disconformidad con el título. “Odia que le llamen emérito, no le gusta nada. Hay que llamarlo rey Juan Carlos”, insistió la periodista en 'El Hormiguero'.
Doña Sofía, una reina aun sin la jubilación
¿Y doña Sofía? ¿Es una reina emérita? A decir verdad, la agenda de la madre del Rey sí que ha bajado de número de apariciones a la semana, pero lo cierto es que sigue siendo una mujer muy activa y comprometida con su papel dentro de la Corona. Mientras que Juan Carlos solo se dedica a sus actividades deportivas y de esparcimiento cuando visita el país que abandonó hace ya tres años; su mujer sigue de lo más implicada con aquellas causas para las que siempre ha tenido una sensibilidad especial, como son los animales y el medio ambiente.
Es raro que la agenda de doña Sofía no presente ningún acto a la semana o cada diez días entre sus actividades como miembro de la familia del Rey. Está desvinculada por completo de otras funciones que requieren un compromiso mayor, como por ejemplo su participación activa en FEDER, la asociación de enfermedades raras; un testigo que Letizia tomó gustosa cuando pasó a ejercer de reina consorte.
Letizia, ¿SIN RETIRO DORADO?
"Dentro de 25 años, cuando celebremos el 50 aniversario de FEDER, yo tendré 76 y espero que ojalá también contéis conmigo", prometió Letizia a la asociación. Una frase que dejaba claras sus intenciones de aquí a unos años. La Reina se ve activa y aun colaborando con esas iniciativas cuando haya más que sobrepasado la 'edad de jubilación'.
Cuando Leonor se convierta en monarca, sus padres seguirán ostentando el cargo de reyes. A juzgar por la promesa de Letizia, su compromiso con la Corona y todo lo que esta implica es un 'para toda la vida'. Ortiz Rocasolano, a la que siempre se le ha criticado parcelar demasiado su vida privada y la institucional, tiene muy claro que, tras la proclamación, ella se comprometió hasta el final, y mientras sus fuerzas aguanten, con todo aquello que representa la monarquía. Y una mujer como ella, profesional por encima de todo, sabe que este será un trabajo que no tendrá jubilación posible.
En el momento en el que Leonor suba al trono, Felipe VI no cambiará de nombre, al igual que tampoco Letizia modificará el suyo, puesto que como reina consorte jamás lo tuvo de transformar. Además, la muletilla de 'reyes eméritos' aunque sea muy empleada, lo cierto es que no responde a ningún título oficial dentro de la Corona. De ahí, quizás, esa animadversión de Juan Carlos a ser tratado de emérito. Si no hay oficialidad de por medio, él se desentiende.
EL CARGO DE LETIZIA QUE YA NUNCA SERÁ
Con la mayoría de edad de Leonor nos despedimos de una posible regencia. Los 18 años de la Princesa de Asturias supusieron el fin de las posibilidades de ver a Letizia ejerciendo de reina regente a lo María Cristina.
Estaba más que pactado que, en el caso de que Felipe VI, o bien abdicara, muriese o estuviera incapacitado y su hija mayor aún no hubiera llegado a la edad adulta, Letizia se encargaría de ocupar este cargo y de tomar las decisiones pertinentes. La historia, de haber tomado semejantes derroteros, habría contado con una Letizia jurando la Constitución ante las Cortes y prometiendo servir a todos los españoles y españolas; aguardando el momento en el que su primogénita ascendiera al trono al cumplir su mayoría de edad.
Pero no fue así. El 31 de octubre de 2023, la Princesa de Asturias juraba la Carta Magna y Letizia se despedía de un cargo que no ha hecho falta ser ostentado. La consorte respiraba aliviada al verse como una reina entregada, comprometida y profesional. Con ganas de seguir trabajando para dar visibilidad a las causas que más le preocupan como la salud mental, la investigación contra el cáncer o las enfermedades raras.
Ni regente ni emérita