Leonor estrena su primer smoking: su look más sexy y maduro en los Premios Princesa de Asturias

A medida que vamos creciendo, sumamos nuevos retos y asentamos no solo responsabilidades, sino también reconocimientos. Si no, que se lo digan a la Infanta Leonor que este año, ya con la mayoría de edad cumplida, coge cada vez más peso en los premios que llevan su nombre, Princesa de Asturias. La joven lo sabe y quiere responder con el mismo cariño y mostrándose más profesional y elegante que nunca.

Este evento, que es símbolo de reconocimiento al talento y los logros en diversas disciplinas, también se ha convertido en una pequeña pasarela de moda que, sin proponérselo, hace que podamos comprobar con el paso de los años cómo evoluciona el estilo de las mujeres de la Familia Real. Sobre todo de las dos jóvenes hermanas, a las que estamos viendo crecer y convertirse en las primeras figuras de la Corona.

Por ese motivo, Leonor, aprovecha estos días señalados, donde no la vemos vestida de calle, o con el habitual uniforme militar que luce muy a menudo la heredera, para ir definiendo sus estilismos y configurando el armario que refleja sus señas de identidad. Por eso este traje marca un antes y un después en su armario. 

El smoking que grita “elegancia”

Poco a poco, estamos viendo como el armario de Leonor cada vez grita más fuerte “jefaza”. Abonada habitualmente a los trajes de chaqueta - algo que está inspirado por su madre - en esta entrega de los Premios Princesa de Asturias, donde la joven ya ha cumplido los 18 años, ha decidido llevar esta idea un paso más adelante.

Por ese motivo ha escogido un traje de chaqueta de tres piezas en un riguroso negro y con el entalle perfecto. El pantalón, la chaqueta y un chaleco bajo la misma consigue un “uniforme” muy elegante y actual, empoderando a la joven que se muestra muy sobria, elegante y clásica, pero a la vez poderosa.

Sencillez en las joyas 

Sabemos que el joyero de la joven aún se está formando. Y aunque conocemos algunas joyas que ya forman parte de él, solemos ver cómo la hija de Letizia recurre al tocador de su madre para integrar en sus estilismos las joyas que elige la asturiana. Ayer, para acudir al Ayuntamiento de Oviedo para recibir la Medalla de Asturias y el reconocimiento de Alcaldesa Honorífica de la ciudad, la joven "asaltó" el joyero de su madre para utilizar sus famosos pendientes de Rose and Gold, con un diseño muy moderno pero a la vez sencillos y favorecedores. 

Para hoy ha vuelto a repetir la fórmula de la sencillez y únicamente llevaba unos pendientes, no muy grandes, en tono plateado, que aportaban algo de sofisticación al look y encajaban perfectamente con su peinado.

Un moño desecho ideal 

También ha destacado la elección de peinado de la Princesa de Asturias para le entrega de estos premios en Oviedo. La joven ha apostado por un recogido posterior, pero en tendencia porque está muy deshecho y deja caer algunos mechones alrededor de su cara, lo que lo convierte en algo tremendamente desenfadado y actual, perfecto para una joven de 19 años que quiere llevar el pelo recogido, pero sin resultar demasiado serio. 

Mucha influencia de su madre

Vemos poco a poco que el armario entre Letizia y ambas jóvenes se ha asimilado y Leonor y su hermana, Sofía, replican muchas de las ideas de su madre - como el omnipresente traje de chaqueta con el que la hemos podido ver en muchas ocasiones, o los largos de la falda midi, que gracias a la altura de la heredera le sienta de lujo, o el valor de las marcas españolas, que las jóvenes también utilizan a menudo. Gracias a ellos están consiguiendo una estética fiel a sí mismas pero muy actualizada, porque no olvidemos que Letizia es una de las reinas mejores vestidas.  

Sofía en segundo plano

En Sofía, en cambio, se aprecia una personalidad más cercana y espontánea, con una actitud desenfadada y cálida que refleja un enfoque relajado y carismático, también en su looks. Así lo hemos visto también en esta entrega de los Premios Princesa de Asturias, donde su looks básicos negro simplemente animado por una chaqueta de brillo en dorado no ha logrado eclipsar a su hermana, y la ha posicionado con un etilo mucho más relajado. Esta dualidad no solo enriquece la imagen de la Casa Real, sino que también muestra el equilibrio entre tradición y modernidad que las hermanas, juntas, representan en el ámbito monárquico.

Apoyo entre hermanas

La infanta Sofía, ha viajado especialmente desde Gales, donde actualmente cursa sus estudios, para estar junto a ella en esta serie de eventos tan significativos. Ambas tienen una conexión profunda con esta tierra, que las ha visto crecer y que ambas aman desde la infancia. Como en tantas otras ocasiones, vemos a Sofía cumpliendo un rol esencial en la vida de su hermana, mostrándose siempre atenta, animándola, y siendo su apoyo incondicional. En estos premios hemos visto cómo se agarraba a ella en varias ocasiones.

La relación entre ambas hermanas se hace más sólida con cada año que pasa. No solo comparten la experiencia de crecer con edades muy parecidas, sino que cada una empieza a definir su propio rol dentro de la monarquía de una manera clara y singular. Leonor, como futura reina, exhibe una postura solemne y reservada, demostrando madurez y responsabilidad al asumir los deberes que conlleva su papel.