El buque-escuela Juan Sebastián de Elcano solo ha hecho, por ahora, la primera de las paradas que su travesía hasta Nueva York comprende. No obstante, ese alto en el camino ha dado mucho que hablar, y no solamente por ser la primera vez que Leonor y el resto de guardiamarinas pisaron tierra firme tras más de veinte días viviendo en alta mar. Porque de lo que todo el mundo habla es precisamente de lo que va más allá de la instrucción y la formación militar, y eso es lo que la princesa hizo en sus ratos libres en Salvador de Bahía, Brasil.

Fue en esta ciudad costera el primer destino del continente americano donde desembarcó el navío de la Armada. Sucedió el pasado 14 de febrero, coincidiendo con el día de los enamorados, aunque esto debiera quedar solo en la anécdota... ¿O no? ¿Acaso está la Princesa de Asturias enamorada? La respuesta a esta pregunta no está clara, pero unas fotografías extraoficiales de la heredera en una fiesta popular junto a algunos de sus compañeros de aventura ha hecho saltar todas las alarmas. Imágenes que han dado la vuelta al mundo y que, inevitablemente, también salpican a sus padres.

Leonor en Brasil
Telecinco

Cómo vive Letizia todo lo que se está diciendo de su hija

Y más que en calidad de padres, quedan Felipe VI y Letizia salpicados por toda esta vorágine en su rol de Reyes. De guardianes de la Corona, así como de figuras de referencia para su primogénita, que en el futuro ostentará el poder de su escalafón. La cuestión es que todo podría quedar en un simple plan de ocio fuera de lo lectivo como tantos otros, pero el gran giro de guion se daría tras hacer saber el fotógrafo al programa 'TardeAR' que, cuando los escoltas de Leonor lo expulsaron del lugar, viocómo Leonor y un joven del cuerpo de guardiamarinas "se besan apasionadamente".

Como siempre suele suceder con escándalos como este, la información no ha sido confirmada ni desmentida. La gestión de la crisis queda de puertas para adentro, con Sus Majestades al mando. Pero, ¿cómo se pueden estar sintiendo ante este revuelo? Para desgranar todos los escenarios posibles, desde la revista CLARA nos hemos puesto en contacto con Lara Ferreiro, psicóloga y autora del libro '¡Ni un capullo más!: El método definitivo para quererte y encontrar a tu pareja perfecta'. Y cabe destacar que el análisis de la situación parte de una sentencia muy clara: "Letizia es la madre helicóptero, lo quiere controlar todo".

Leonor y Letizia
Gtres

Desde el prisma de nuestra especialista, es importante resaltar que "la angustia y ansiedad la siente igual que Felipe, que es mucho más discreto". En cambio, Letizia se ve afectada por la sensación de "pérdida de control" y su enorme "preocupación de la imagen pública". Eso, así como se le puede generar un "temor a la socialización de la princesa", al darse cuenta de que ya no existe "la imagen inmaculada de que no tiene pasado". La cuestión es que más allá de los consejos, Ferreiro recalca que esta tensa coyuntura puede suponer "un choque generacional y desgaste con Leonor (...), porque aunque Letizia es muy independiente, está obsesionada con la imagen". 

Una preocupación que entronca con los escándalos de la Corona

Si algo evidencia lo que ha sucedido tras el paso de la futura monarca por Brasil es que "en el mundo digital, te hacen una foto y pueden arruinar tu imagen en un segundo". Precisamente por eso expone Lara que el miedo de Letizia " a que se rompa la idealización de Leonor" es todavía mayor. Pero, ¿por qué tanto miedo? Porque quepa no olvidar que, tal y como apunta la psicóloga, "la imagen de la Corona está tocada por todos los escándalos y no aguantan ni uno más".

Menos todavía si se trata de algo relacionado con la encargada de ser la cara visible de la dinastía en el futuro, tras polémicas tan sonadas como las que antaño protagonizaron su abuelo, Juan Carlos I, o su t��a, la infanta Cristina. Un escenario delicado que explica la voluntad de preservar la idea de una Leonor "reservada, muy disciplinada". Y es precisamente por eso que "verla en un contexto desenfadado o pasional a mucha gente le llama la atención". 

La terapeuta remite, además, a que entre los Reyes también pueden darse "sentimientos de tristeza porque Leonor ya se ha hecho una mujer adulta" y cabe la posibilidad de que con todo "se revuelva el síndrome del nido vacío, de que ya no está y vuela por si sola". Siempre teniendo presente, claro está, que "no va a tener una infancia ni una adultez normal". Cosa que no quita que, sobre todo en el caso de Letizia, nazca "el síndrome del control perdido". Y más en un contexto como el que es el barco, donde se da "el efecto tipo 'gran hermano', que intensifica mucho los sentimientos". Una serie de cuestiones que se escapan de su manejo, pero que en cualquier caso "van a afrontar de la manera más armónica posible".