Eva Fernández es la mujer que mejor conoce el armario de la Reina. ¿El vestido verde de Dándara? Perfecto, hace tres meses que no lo usamos. Hay que limpiarlo para que en Salamanca esté impecable. La estilista de Letizia se ha convertido en algo más que la mujer que le ayuda a escoger su ropa, también es su mano derecha.
En la intimidad del vestidor de Letizia, sin nadie más alrededor, cuando Eva y la Reina están a solas, se dan algunas de las mayores confesiones entre ambas mujeres. Fernández, que llegó a su vida hace nueve años, ha encajado perfectamente con la madre de Leonor, y, además, ha sabido renovar el estilo de la reina, convirtiéndola en una de las ‘royals’ que más halagos recibe.
Pero ser la mejor vestida va más allá de saber qué comprar y cómo lucirlo; también es importante saber recuperar y cómo sacar el máximo partido a lo que una ya tiene; y en esto, la estilista ha jugado un papel fundamental.
Tras la recesión provocada por la crisis sanitaria de la covid-19, la reina Letizia tomó la decisión de que su manera de vestir también debía reflejar lo que todos estábamos viviendo. Nada de estrenar, nada de comprar. Sí a reutilizar y a optar más por piezas de tiendas y marcas asequibles. No era justo que la representante de todos los españoles, mientras estos vivían uno de los momentos económicos más complicados, mostrase una explosión estilística. Eva le ayudó en este objetivo. Para poder sacar el máximo partido a su vestidor, el trabajo de orden y organización de Eva ha sido imprescindible.
¿Cómo es el vestidor de Letizia?
En Zarzuela, la reina cuenta con dos vestidores muy cerca de su dormitorio, tal y como se publicó hace unos años en la revista Hola. ¿Por qué dos? Porque en uno guarda los modelos que le veremos lucir en sus apariciones de agenda y actos programados; su ropa de trabajo, como podríamos decir. Mientras que en las perchas del otro cuelga su ropa ‘out of office’; la que le vemos usar cuando va al cine con Felipe, esos jerséis más informales para ir a hacer alguna compra a Inditex… Su versión más relajada, digamos.
La cosa no acaba ahí, todavía queda por saber dónde están perchados los vestidos más especiales y de alta costura de Letizia, ¿en el vestidor oficial o en el extraoficial? Pues en ninguno. Estas piezas de diseñador tienen su propia habitación; que se localiza algo más lejos que los dos de diario. Las piezas de gala se guardan en el sótano, en un espacio perfectamente protegido, a una temperatura óptima y bajo las condiciones idóneas para su perfecta conservación. Ahí también se guardan los zapatos y demás accesorios que complementan los looks de gala.
¿Cómo se organizan los armarios de Letizia?
Ante semejante cantidad de prendas, establecer un orden es obligatorio. Eva Fernández y la reina Letizia han establecido para ello un código que les permite encontrar rápidamente aquello que buscan, que no se pierda nada y que todo esté perfectamente catalogado y clasificado.
El primer código, como hacen en muchas tiendas, estaba claro: las prendas debían guardarse por colores y tonalidades, para, de este modo, poder acudir de la manera más efectiva posible a la camisa ideal para unos, por ejemplo, pantalones sastre con raya diplomática. ¿Se busca algo rojo? Genial, tenemos todas estas opciones.
Otra de las características a tener en cuenta, por supuesto, es la clase de prenda que estamos buscando: camisas, faldas (y dentro de esto, midi, lápiz, evasé…), vestidos (camiseros, más informales, menos…). Y, por si todo esto fuera poco, las preferencias de la Reina, que es quien va a lucir el estilismo, también tienen un peso determinante a la hora de establecer un orden dentro de sus vestidores. De ahí que haya piezas que repite más, por el sencillo motivo de que le gustan más o le encanta cómo le sientan, que otras que tal vez pasan sin pena ni gloria por sus looks.
La estrecha relación entre Letizia y su estilista
Eva Fernández se ha convertido en una prolongación de Letizia. Siempre discreta, trabajando sin ser vista y sin conceder entrevistas. La discreción es casi condición imprescindible para todo aquel que trabaja, o es del entorno cercano de la Reina. Los dos monarcas valoran que sus colegas sean personas a quienes no les gusta destacar y que prefieren pasar desapercibidos. Deben permanecer en la sombra y, si encima trabajan para ellos, mucho más.
Desde que Eva empezó a colaborar con la Reina, se han vuelto inseparables. La estilista ha sido su gran aliada y la responsable última de la renovación de su estilo. Volviéndose más tendencia, apostando por marcas más desconocidas y pequeñas; y, además, optando por piezas asequibles con las que cualquiera pueda identificarse con ellas.
Eva Fernández es una de sus grandes confidentes. Sin ser de ese grupo de amigas infalibles, esas que conoció mientras trabajaba como periodista, ha sabido ganarse un hueco en la selectísima agenda privada de la Reina. Y es que, cómo no incluir en ella a alguien que te ha convertido en todo un icono de la moda. Más que una amistad forjada, esta es una amistad bordada.