En un momento donde estamos más que acostumbrados a ver ligues, flirteos, amores y desamores, algunos muy dramáticos, otros humorísticos, intensos o spicy en las revistas o la televisión casi a diario, no nos parece tan raro descubrir las conexiones sentimentales y amorosas de los personajes del corazón, pero siempre tiene un plus de intriga cuando hablamos de los ‘royals’ ¿verdad? Y más aún si son nombres históricos.

Y más aún si son nombres históricos que han definido la historia, las conexiones y la realeza de finales del siglo XX, en un momento donde las grandes casas reales protagonizaron grandes y épicas historias vitales, personales y románticas. Cuando los aristócratas convertían sus conexiones protocolarias y “laborales” con sus vidas personales. 

Sofía Juan Carlos 1972
Gtres

Desde los Borbones a los Grimaldi, pasando por los Windsor o los Glücksburg, las dinastías familiares de los diferentes países se han cruzado de muy diversas maneras. Ahora, una polémica serie de televisión que aborda la vida de los reyes nórdicos, Harald y Sonia de Noruega, ha puesto sobre la mesa una curiosa unión de juventud que pudo haber cambiado por completo la heráldica europea y que unió a los noruegos con nuestra monarquía actual. 

La serie más esperada por los noruegos 

Está más que de moda realizar películas o series sobre las diferentes casas reales que han definido el siglo XX y el XXI en Europa. Desde el exitazo internacional de The Crown, que abordaba la vida de Isabel II de Inglaterra, una de las reinas y reinados más icónicos de Europa donde se analizaba sus luces y sombras, así como el de toda su saga familiar. Después han llegado también series sobre Máxima Zorreguieta y cómo se convirtió en Reina de Holanda y ahora, una que aborda la curiosa historia de amor de Harald y Sonia de Noruega.

Con el sencillo nombre de “Harald y Sonia”, esta serie, producida por Amazon Primer, aborda desde la juventud de los monarcas, cuando comenzaron su relación en secreto, hasta cuando se establecieron en el trono de su país. Esta serie pretende así, además de contar su historia de amor y su trabajo ‘royal’, también responder a la demanda de los que son uno de los reyes más queridos. A eso se suma que la corona se encuentra inmersa en una gran polémica mediática y muy perjudicada por la polémica de Marius Borg, el hijo de Mette-Marit.

Harald y Sonia
Amazon Prime

Pero claro, si queremos contar con detalle todo lo que ocurrió en la vida de Harald, no podemos obviar la presencia de la reina Doña Sofía, que es de la misma quinta que el protagonista de la serie y, por tanto, se conocieron de jóvenes, no sin algún que otro rumor de posible relación sentimental. La serie también aborda este tema, pero utilizando un despectivo apodo para tildar a la madre de Felipe VI.

El apelativo de Doña Sofía 

'La princesa que buscaba marido’, así es cómo han definido a la reina emérita, Doña Sofía, en la serie que comentamos. ¿A qué viene este comentario que esconde un cierto enfoque machista y que posiciona a la abuela de Leonor casi como una “buscona”? Pues bien, todo viene de un momento puntual en el que los caminos de Harald de Noruega y Sofía de Grecia se encontraron en su juventud. La reina emérita cuenta con un papel propio en los primeros capítulos de ‘Harald y Sonia’, cuando el rey era joven. 

Según cuentan, la reina Sofía, que conoció a Harald de Noruega cuando ella tenía 21 años debido a un viaje de la visita oficial de los reyes Pablo y Federica de Grecia a Noruega a finales de los años 50. Se quedó prendada del sueco, con el que compartió momentos juntos en las recepciones oficiales y bailes que organizaron en el país para esta visita oficial. Esos momentos hicieron que comenzaran los rumores de que había surgido algo entre ellos.

Viendo este ajetreo, y valorando la opción, la reina Federica, la madre de Sofía, que quería que su hija se casara con un príncipe, rápidamente invitó al noruego a Corfú, donde vivía y se pudieron ver imágenes de los jóvenes disfrutando juntos de la playa de la espectacular isla.  Y por supuesto, los rumores se multiplicaron por mil.

Pero no se llegó a formalizar porque en aquel momento el rey Harald ya mantenía una relación, completamente en secreto, con Sonia. Parece ser que la serie ha enfocado esta historia desde el foco de los propios padres de los protagonistas, que tenían mucho interés en que acabaran juntos, pero claro, porque desconocían que el corazón del noruego estaba ya acabado. 

Un amor “inusual” y secreto

Aunque ahora ya se ha normalizado que los ‘royals’ se enamoren de plebeyos y plebeyas, como encontramos en la mayoría de casas reales donde sus integrantes no son aristócratas de nacimiento, como Letizia, Máxima de Holanda y Mary de Dinamarca. Hubo una época en la que los cruces de familias reales europeas estaban a la orden del día, convirtiéndose en la base no solamente de procesos matrimoniales, sino también de importantes acuerdos entre países. Y no, no estamos hablando de historias de la Edad Media, puesto que a finales del Siglo XX, aunque bastante más relajadas, estas prácticas eran bastante comunes. 

A eso se sumaba que los propios ‘royals’ tenían acceso muy limitado a personas de fuera de la aristocracia, con la que compartía su trabajo y su ocio diario, por lo que lo normal era que formalizaran relaciones entre ellos. Pero la relación de Harald V de Noruega y Sonia Haraldsen, el nombre de soltera de Sonia de Noruega, fue diferente. Se conocieron en una cena con amigos comunes en el año 1959 y llevaron su relación en secreto más de 8 años. Cuando se conoció, el entonces príncipe estuvo a punto de abdicar si no le dejaban continuar con su relación amorosa con una plebeya. Esta curiosa historia marcó un antes y un después tanto en la propia Noruega como en el mundo entero, que ahora siguen sus pasos sin problema, poniendo el amor frente a los compromisos aristocráticos.