Los confusos estudios de Alejandra Rubio, repletos de bandazos y con una profesión 'definitiva'

6 de diciembre de 2024. Una fecha que Alejandra Rubio nunca podrá olvidar, porque tras nueve largos meses de espera por fin ha nacido su primer hijo. Criatura fruto de su amor por Carlo Costanzia, el hijo mayor de Mar Flores, con el que formalizó su relación a principios de años y al que ha elegido para formar su propia familia. Esa extensión del clan Campos que ha hecho abuela a Terelu poco más de un año después del fallecimiento de la matriarca María Teresa. Esa que le llega a la propia Alejandra después de unos años de juventud en los que ha probado suerte en muchos terrenos antes de aventurarse con la maternidad.

Con la particularidad de que ha sido su juventud, pues solo tiene 24 años, una de las cuestiones que más llamó la atención de la crónica social en el momento en el que vio la luz su embarazo. También la forma en la que se hizo saber que estaba encinta, claro está, pues lo hizo vía entrevista exclusiva para la revista '¡Hola!'. Un método socorrido por las 'celebrities' que no debiera sorprender a nadie, pero que en el caso de la sobrina de Carmen Borrego se desmarca completamente de su voluntad expresa de no entrar en este circuito.

Y es que aunque ya se ha introducido de lleno en este vaivén de portadas incendiarias, papel 'couché' y secretos revelados en el quiosco del que su familia es toda una experta, no era esta su intención. Precisamente por ello se ha formado -o al menos ha hecho el intento de hacerlo- en ámbitos que poco tienen que ver con la pequeña pantalla, a pesar de que sea ahora la televisión su principal sustento. ¿Cuáles han sido sus otros campos de actuación? Todo queda recogido en un currículum confuso en el que, entre cambios de preferencias, no han faltado los bandazos.

De soñar con las pasarelas a intentarlo como abogada

Para muestra, el inicio de una trayectoria académica más allá de lo estrictamente obligatorio que apostó por centrar en el mundo de la moda. Concretamente, el grado elegido por Alejandra Rubio fue Diseño de Moda en el prestigioso Istituto Europeo di Design. Una opción ambiciosa que a sus dieciocho años la motivaba más que nada dada su pasión por las tendencias y las pasarelas. Nunca auguraron, ni ella ni su entorno, que tras un primer trimestre de clases apostaría por abandonar los estudios.

Fue entonces cuando se dio el más inesperado giro de guion, pues de querer vivir entre patrones y pasarelas, y ya siendo un rostro más que conocido por sus colaboraciones en la televisión, la hija de Terelu sorprendía con una segunda decisión. Ahora quería estudiar Derecho, y ni corta ni perezosa tras el necesario tiempo de digestión tras dejar la moda de lado, se matriculó en un centro privado de Madrid. Un proceso que tampoco prosperó, pues compaginar su faceta de tertuliana en el extinto 'Viva la vida' de Telecinco con asistir a clases presenciales no era fácil. Por eso se cambió al formato virtual, en la Universitat Oberta de Catalunya que ofrece clases a distancia.

Pero ni con esas. Pronto fue consciente de que ser jurista no era su vocación ni entraba entre sus verdaderos planes. Tampoco terminó de cuajar su colaboración con el periódico 'ABC', donde entrevistaba a jóvenes talentos. Ahí vino la gran duda: "¿ahora qué?". Tenía que volver a pensar, volver a elegir. Volver a probar, pero esta vez haciendo caso a un consejo de lo más valioso, que era el de su veterana abuela. La matriarca de las Campos lo tuvo claro y le recomendó a su nieta que no tuviese miedo y se pusiese a estudiar Arte Dramático. Además, en un lugar icónico en la industria de la interpretación, que es la academia Juan Codina, donde ha podido aprender de la profesión de la mano de estrellas nacionales como Hugo Silva o Carmen Machi.

Una actriz en 'stand by', pero imparable en la pequeña pantalla

Es evidente que a Alejandra le valió la pena esta formación 'definitiva'. Más teniendo en consideración que su carrera como colaboradora de los espacios de Telecinco sigue en ascenso. A su trayectoria puede sumar ya desde formatos de actualidad rosa como 'Así es la vida' o 'Vamos a ver' o los debates que comentan 'realities' de la cadena como 'La isla de las tentaciones'. Sea como fuere, parece que tampoco acaba de estar encantada con esta faceta pese a que ahora es su modo de vida. Basta con revisar que en su perfil de Instagram se define como "artista" y "actriz". Así se percibe y es en ese ámbito quiere seguir creciendo.