Además de derrochar estilo en su día a día mostrándonos diversos estilismos de todo tipo, en especial los informales y elegantes, Nuria Roca suele sorprendernos con recetas fáciles y deliciosas como una socorrida  y nutritiva ensalada de garbanzos o un arroz exprés que, como buena valenciana que es, se encuentra entre sus recetas preferidas. 

También es una persona muy sociable que disfruta compartiendo momentos con sus seres queridos, especialmente alrededor de una buena comida o cena. En esta ocasión, no ha sido fuera de casa sino en la suya propia, lo que nos ha permitido echar un vistazo a su mesa, que a continuación analizo de arriba abajo destacando los tips de estilo que más me han llamado la atención.

Nuria Roca
@nuriarocagranell

Una de las claves de la decoración de su mesa son los contrastes, tanto de estilo como de color. Toma nota y adapta lo que más te guste a tu propia mesa.

La mesa de Nuria Roca: contrastada y sobria

Si hace unos días compartíamos la cocina de estilo cálido de la presentadora y colaboradora de El Hormiguero, en esta ocasión nos adentramos en su comedor. Aquí vemos un plano general de la mesa en cuestión, que puedes ver más de cerca avanzando en el carrusel de imágenes.

A grandes rasgos vemos que es una mesa con tres colores principales muy contrastados con detalles llamativos como el dorado de los bajoplatos y el plata de los platitos del pan. Utilizar estos dos tonos es siempre un buen recurso para elevar la decoración de cualquier mesa. 

Además, llama la atención que prescinde por completo de estampados, a lo sumo el del mantel que apenas se percibe pero sí aporta textura.

Esto es lo que más me gusta de la mesa de Nuria Roca

Son muchos los detalles que me llaman la atención de esta mesa, aunque en mi caso los aplicaría por separado para aprovechar piezas que ya tengo en casa

  • Bajoplatos dorados. Me ha gustado muchísimo esta idea. ¿Por qué? Porque en mi caso los reservo solo para Navidad, y esta es una manera de aprovecharlos el resto del año. Elevan la decoración de la mesa y veo que van a quedar genial también con mesas primaverales y veraniegas en turquesa, fucsia y verde.
  • Platos del pan. Los tengo sin forma de flor (que, por cierto, me parecen ideales y un guiño a la naturaleza). Llámalo manía o costumbre, pero el caso es que nunca los he combinado con los bajoplatos dorados. Me parece interesante esta opción.
  • Mantel oscuro. Totalmente de acuerdo con Nuria en que si escoges un mantel en esos tonos, la vajilla tiene que brillar de algún modo o te quedará una mesa algo apagada. Ya hemos visto que oro y plata cumplen muy bien su función, y aquí entra el tercer elemento en discordia: la vajilla blanca de estilo clásico que siempre es un plus.
  • Cubertería rústica. Para no saturar con oro y plata, Nuria introduce una tercera opción: la cubertería de bambú, un material natural que hace de contrapunto frente a la seriedad de los elementos anteriores, aportando interés, textura y también naturaleza.
  • Cristalería. Para no restar protagonismo ni añadir demasiados elementos que podrían resultar demasiado cargantes, la cristalería se reduce a la mínima expresión.
  • Centro de mesa. Siguiendo con la vinculación a la naturaleza, en la mesa vemos un pequeño jarrón con flores frescas. Me gusta mucho que aporte sin saturar, ya que los ramos demasiado grandes pueden interferir en las conversaciones, además de desprender una fragancia que, aunque agradable, tape el propio olor de la comida.
  • Platitos auxiliares. En este tipo de platos que colocas a lo largo de la mesa y en los que se sirven aperitivos o postres, pueden permitirse licencias creativas que, además, quedan fenomenal. Platos estampados y coloridos serán bien recibidos y aportarán personalidad y un toque único.