Plantas de interior grandes y fáciles de cuidar

La Monstera es una de las plantas de interior grandes más fáciles de cuidar

Además de ser una de las más populares de Instagram, la Monstera deliciosa es una de las plantas de interior más grandes y resistentes. Originaria de la frondosa selva, esta planta trepadora también conocida como Costilla de Adán, puede llegar a alcanzar los tres metros de altura. 

• Colócala en un lugar alejado del sol directo y riégala con frecuencia, aunque con cuidado porque no tolera el encharcamiento. Ten la precaución de no dejar agua en el plato y no la vuelvas a regar hasta que la tierra esté prácticamente seca. 

Si buscas plantas de interior grandes y exóticas, te gustará la Drácena de hoja fina

La drácena de hoja fina (Dracaena marginata) recuerda a una pequeña palmera y es ideal para darle un toque exótico a cualquier rincón de la casa. Cuenta con muchas ventajas, como la de purificar el aire de las casas, pero ten la precaución de mantenerla alejada de mascotas curiosas porque sus hojas pueden ser tóxicas tanto para perros como para gatos.

• Soporta prácticamente todas las condiciones de luminosidad menos el sol directo. En cuanto al riego, dale agua cuando la tierra esté seca pero sin llegar a encharcarla. encharcarla.

Foto: Ikea

¿Sabías que la palma bambú es otra de las plantas de interior grandes y fáciles de cuidar?

La Raphis excelsa, comúnmente llamada palma bambú, es otra de las plantas de interior que purifican el aire ¡y de las más grandes! Y es que puede alcanzar los 3 metros de altura.

• Tiene que estar en un lugar iluminado pero sin sol directo. La humedad del ambiente debe ser alta por lo que se recomienda pulverizar a menudo las hojas con agua. Los riegos deben ser moderados en invierno y más frecuentes en verano, pero nunca dejar que se encharque.

El Ficus benjamina es una de las plantas de interior grandes más apreciadas

Esta variedad de ficus, de aspecto similar a un arbolito, es una de las 24 plantas de interior resistentes y muy fáciles de cuidar, de hecho no es nada exigente en cuanto a su mantenimiento. ¿Sabías que en interior y en condiciones óptimas puede llegar hasta los 3 metros?

• Puede estar tanto en un lugar iluminado (pero sin sol directo) como en un lugar en semisombra. Riégalo solo cuando la tierra deje de estar humedecida y sin encharcar.

El Ficus lyrata, otra de las plantas de interior grandes con más éxito

Aquí tienes otra de las plantas de interior grandes más comunes en las casas porque puede llegar a los dos metros de altura. Su aspecto recuerda a la higuera y sus hojas al violín, lo que le ha valido el curioso nombre de 'higuera hoja de violín". 

• Como muchas plantas de interior no es amiga del sol directo ni el exceso de agua. Le gusta la luz pero tamizada y los riegos moderados, en verano más frecuentes y en invierno espaciados. Es preferible pecar de prudente que pasarse de agua. Vacía siempre el platito después de que haya drenado bien tras regarla.

Aquí tienes una de las plantas de interior más grandes: Yuca pie de elefante

Las yucas son unas plantas con un porte parecido a las palmeras que resultan muy agradecidas porque son muy poco exigentes a nivel de mantenimiento. Además de ser una de las plantas de exterior ideales para tu patio o jardín, cuenta con variedades que se usan como planta de interior como esta Yucca elephantipes, conocida popularmente como yuca pie de elefante por la textura de su tronco.

• Colócala en un lugar luminoso y riégala con moderación para evitar que se pudran sus raíces. En verano, suele bastar una vez por semana y, en invierno, cada dos semanas. No es necesario que pulverices agua en las hojas ya que tolera muy bien los ambientes secos.

La Areca o palmera amarilla, grande y perfecta para el estilo urban jungle

La Dypsis lutescens, conocida como areca o palmera amarilla, es una planta muy apreciada en la decoración de interiores por su aspecto tropical y frondoso y ¡puede llegar a alcanzar los tres metros de altura! Es fácil de cuidar, purifica el aire de la casa y es apta para perros y gatos.

• Quiere luz, pero no sol directo. Y le gusta la humedad, pero no el encharcamiento, así que asegúrate que no queda agua en el plato después de regarla. No le gustan los ambientes secos con lo que aléjala del radiador y rocíala a menudo con un vaporizador con agua.

El Tronco de Brasil, entre las plantas de interior grandes y fáciles de cuidar que mejor quedan

Otra drácena muy popular entre las plantas de interior, tanto por su precioso aspecto como por su fácil mantenimiento, es el tronco de Brasil (Dracaena fragrans).

• Le gustan los ambientes bien iluminados, pero mejor con sol indirecto. Al igual que en el caso de la drácena de hoja fina, solo hay que regarla cuando tiene la tierra seca y sin encharcarla.

La Pachira aquatica es otra de las plantas de interior grandes que debes conocer

Muy apreciada por sus exuberantes y grandes hojas palmeadas, la pachira aquatica, llamada popularmente castaño de Guayana, es un planta que en interior puede rondar los 2-3 metros y que se suele comercializar como si fuera un arbolito con dos o tres ejemplares unidos mediante el trenzado de sus troncos.  

• Tiene que estar en un lugar iluminado sin sol directo porque sus hojas tiernas se quemarían. Requiere humedad ambiental elevada así que rocíala con agua regularmente y aléjala del radiador y las corrientes de aire. Riega más a menudo en verano que invierno, y siempre procurando que el sustrato se seque ligeramente entre un riego y otro. 

Foto: Ikea

¿Aún no conoces la Kentia? Otra de las plantas de interior grandes y fáciles de cuidar

La Howea forsteriana, conocida como kentia, fue durante muchos años una de las plantas de interior grandes más apreciadas. Hoy en día no suele tan frecuente porque necesita mucho espacio para crecer. Aparte de que puede alcanzar los dos metros, sus hojas tienden a caer hacia los lados, requiriendo un diámetro considerable en su ubicación. 

• No le gusta el sol directo y necesita cierta humedad ambiental. Para ello, hay que humedecer las hojas mediante un pulverizador con agua sin cal, o las puntas de las hojas se volverán marrones. Y no regarla en exceso ni dejar que se encharque porque las raíces se pueden pudrir. Por normal general, una vez por semana en verano y cada dos en invierno.