Los remolinos son una o varias secciones de pelo que crecen en dirección opuesta al resto del cabello. Creando la forma de un espiral; son de nacimiento y suelen aparecer en la coronilla y en la parte del flequillo, aunque pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo donde haya pelo.
En los casos donde haya habido un golpe o una cicatriz se puede modificar la dirección del cabello pudiendo surgir un nuevo remolino. Lo que tenemos que entender es que los remolinos no son ni buenos, ni malos, forman parte de nuestra genética.
¿Se puede disimular un remolino?
Si no puedes con tu enemigo únete a él, eso es lo que vamos a hacer.
- Cambiar la dirección del remolino es una batalla que siempre vas a perder, mi consejo es que escojas un corte o peinado donde no tengas que modificar la dirección del remolino. Solo cuando quieras conseguir más volumen, podremos romper esa regla.
- El corte de pelo ideal. Existen técnicas de corte para reducir el impacto de los remolinos, sobre todo si lo tienes en el flequillo; en esta ubicación un buen corte puede ayudar a cerrarlo un poco y para el resto de ubicaciones lo ideal es integrarlo con el resto del cabello para que no destaque.
- El pelo mejor corto y desenfadado donde el cabello vaya en todas direcciones, o largo y que su propio peso consiga cerrarlo. Procura no quedarte en una medida intermedia ya que es cuando más tienden a abrirse.
- Los peinados ideales son los cabellos rizados y con volumen, y también los ondulados desenfadados. Mi recomendación es despeinarse para que el remolino se integre en el peinado.
- La peor parte se la lleva el pelo liso, fino o poco denso y también si el cuero cabelludo es graso. El pelo liso suele abrirse con más facilidad, a no ser que tengas muchísima cantidad de pelo y largo, ya que entonces el propio peso lo mantendrá cerrado. El pelo graso es de los primeros en abrirse, al ensuciarse por el sebo.
Yo tengo el pelo fino así que, si no me lavo el pelo por la mañana, me toca tirar de los trucos que os dejo a continuación.
Trucos efectivos para domar los remolinos
El calor es uno de los mejores aliados para cerrar remolinos, pero recuerda que si vas a usar herramientas térmicas deberás usar un buen protector térmico.
- Plancha pequeña: Una plancha pequeña de viaje a pilas. Son geniales para este menester, ya que al tener unas placas tan pequeñas y finas te resultará muy fácil de cerrar el remolino, y además podrás llevarla siempre encima.
- Fijador: Usa fijadores que no sean demasiado fuertes o se verá muy artificial el resultado. Mejor usar una laca de fijación media modulable y usarla un par de veces al día para cerrar de nuevo el remolino. Las tienes en formato viaje de 100 ml muy prácticas para llevar en el bolso.
- Pinzas: Este lo utilizo yo a diario con el remolino que tengo en la coronilla y que me tiene frita. Las mañanas en las que no me lavo el pelo, lo primero que hago cuando me levanto es poner una pinza en la zona.
- Cepillos normales o térmicos: Un dos en uno super práctico si eres de las que siempre va con prisas. Tienes dos opciones la primera usar un cepillo normal y aplicar calor con el secador, y la segunda más fácil y rápida es usar estos cepillos térmicos. Coge la sección del remolino y pon las raíces por encima durante unos 40 segundos, saca el cabello y mantenlo unido con las manos hasta que se enfríe. ¡Listo!
- Rulos normales o térmicos: Un truco fácil y rápido para acabar con los dichosos remolinos. Solo tienes que coger la zona donde se te abre el remolino y poner un rulo en la raíz, aplica calor si no son térmicos y no lo enrolles del todo si no quieres que te quede rizado (solo la raíz el resto lo dejas suelto), y retíralo cuando se enfríe y péinalo.
- Crepar la sección del remolino: El peine de crepar es el arma letal de los remolinos. Crepa la raíz del remolino, deja caer el cabello sin crepar por encima para taparlo, y aplica un poco de laca. Te garantizo que eso no se abre en todo el día.