Llevar las uñas perfectas es una de mis mayores manías. Por eso, no soporto cuando le salen burbujas, rayones o me pinto sin querer las cutículas cuando me las hago yo en casa. Así que llevo mucho tiempo buscando trucos y recurriendo a profesionales para aprender a pintármelas como si hubiera ido a un exclusivo salón de belleza. Y por si eres tan loca de las uñas como yo, quiero pasarte esos trucos que han hecho que mis uñas mejoren y mucho.
Y es que muchas veces, gestos tan sencillos como pasar un pulidor en un pispás puede hacer que te libres de algunos de estos horrores que a mi, al menos, me sacan de quicio después de tanto esfuerzo para conseguir que queden perfectas y escoger un color bonito que me favorezca.