Probablemente, una de las piedras preciosas más llamativas y bonitas sea la aguamarina. Con su tono celeste, que evoca sin duda lo que su nombre indica, es una de las gemas más preciadas en el mundo espiritual y en el plano artístico de la joyería.
Pero, ¿qué más puede ofrecernos esta piedra además de su belleza? Hoy te contamos cuáles son las propiedades y los beneficios que este hermoso mineral puede dar a su portador.
Si te interesa este tema, aparte del aguamarina, existen otras piedras preciosas como Ágata, Alejandrita, Amatista, Ámbar, Cuarzo, Diamante, Esmeralda, Fluorita, Granate, Hematita, Jade, Kunzita, Labradorita, Lapislázuli, Malaquita, Ojo de tigre, Perla, Pirita, Rubí, Shungita, Topacio, Turquesa, Turmalina, Unaquita, Zafiro y Zircón, con diferentes propiedades especiales cada una.
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¿Qué es la aguamarina y para qué sirve?
La aguamarina es una variedad de color azul verdoso pálido del berilo. Comparte familia, por tanto, con la preciosa y bien conocida esmeralda. En el mundo de la joyería, esta piedra es muy apreciada por su dureza, que admite una gran diversidad de cortes. Además de, claro, por su precioso color y brillo, que nos hacen pensar siempre en el agua del mar.
Por otro lado, en el mundo espiritual se la considera una piedra de coraje, cargada de propiedades positivas y curativas. Se relaciona con la relajación y a la curación de traumas, emociones, además de asociarse al chakra de la garganta.
Propiedades y beneficios de la aguamarina
En cuanto a las propiedades de la aguamarina, Silvia Hill nos cuenta en su libro, Cristales: Secretos de la sanación con cristales, minerales y piedras preciosas, lo siguiente:
“Con un singular y brillante color verde azulado, se cree que las tonalidades marinas de la aguamarina ayudan a las personas a curarse de los traumas emocionales al enfriar los conflictos y rebajar los ánimos. También ofrece un alivio del estrés y una sensación de paz al permitir que las emociones reprimidas resurjan para obtener claridad y cierre”.
Es decir, la aguamarina es una piedra con energía sanadora, que permite calmar y aliviar el estrés. Quien la porta podrá experimentar como su poder curativo le ayuda a relajar el ánimo, y a llevar calma allá a donde vaya. Es una buena piedra para quienes han pasado por un proceso complicado y necesitan sanar heridas del pasado. De hecho, es la piedra preciosa de los Piscis junto al zafiro.
Tipos de aguamarina
Lo cierto es que no hay más tipos de aguamarina, puesto que en realidad esta piedra es una variedad del berilio. De este mineral salen otras muchas piedras preciosas que muy probablemente conozcas, como la esmeralda o el heliodoro.
Todas ellas comparten esa caracteriza dureza de la que hablábamos, que las hacen perfectas para el arte de la joyería. En cuanto a la aguamarina, lo que la diferencia de otros tipos de berilio es que contiene hierro. Es este el que le da ese tono entre azulado y verdoso que la hace tan especial.
¿Qué significado tiene la piedra de aguamarina?
El nombre de la aguamarina procede, evidentemente, de su color entre azul y verde. Es el tono que tiene el agua de mar en muchas partes del mundo y, por tanto, la razón de que reciba este hermoso nombre.
En cuanto a su origen, lo cierto es que el uso de la aguamarina en el mundo de la joyería se remontan hasta el Renacimiento, donde podemos empezar a encontrar anillos con esta preciosa piedra engarzada.
Además, sabemos que esta piedra preciosa tuvo una gran relevancia en el mundo antiguo. En Egipto se utilizaba la aguamarina como amuleto, dadas sus importantes propiedades sanadoras y emocionales. En la Edad Media, por ejemplo, había curanderos que la usaban como antídoto para ciertos trastornos.
¿Cómo saber si una piedra aguamarina es real?
Son varios los puntos que nos ayudarán a determinar que estamos ante una aguamarina. El primero es, por supuesto, su color. Su azul marino es un tono bastante único, difícil de conseguir con otros minerales. Además, tiene una gran claridad y transparencia que la diferencia de otras piedras similares.
Su bajo poder de refracción es otra de las razones por la que la podremos diferenciar de otras piedras parecidas como, por ejemplo, el topacio azul.
Por supuesto, su dureza y su composición también son diferentes. La aguamarina es bastante dura y tiene un brillo vidrioso que la delata con facilidad, pero seguro que no quieres tener que probar a rayarla para comprobar su autenticidad.