El ejercicio de pilates en la pared más sencillo que tonifica el abdomen y alivia el dolor de espalda en pocos minutos

La vuelta a la rutina ha llegado y eso es algo que el clima de octubre no deja de evidenciarnos. Nos notamos mucho más cansadas y es normal y, a pesar de que nos empeñamos en echar toda la culpa a los zapatos que nos acompañan durante todo el día y que, quizás no son los más cómodos, no radica de ahí el problema. Con la vuelta al trabajo, el estrés no ha tardado de apoderarse de nosotras, el nerviosismo por la falta de tiempo para hacer nuestras tareas o el malestar por si los atascos no nos dejan llegar a tiempo a esa reunión importante, se van acumulando en nuestro cuerpo y nuestra mente, hasta tal punto que nuestra espalda y nuestro cuello se ven demasiado resentidos.

Y sí, la vuelta a la rutina viene acompañada, normalmente, de un regreso a la vida saludable (ya sea tranquilamente en casa o en con nuestro túper en la zona de descanso de nuestro trabajo). Un regreso a los buenos hábitos que también incluye la vuelta al gimnasio, a las actividades que nos ayudan a descargar tensiones, a relajarnos y a mantenernos en forma. Sin embargo, muchas veces solemos optar por el cardio y la fuerza con el objetivo de quemar grasa y tonificar nuestra silueta y, error, nos olvidamos de cuidar nuestra espalda. Debemos empezar a tener en cuenta el pilates y, para que te inicies sin esfuerzos, te contamos cuál es un buen ejercicio.

¿POR QUÉ ES BUENO PRACTICAR PILATES?

El pilates es un método gimnasio que se basa en un control de la mente y la respiración para lograr un estado de relajación en nuestro cuerpo que nos ayude a aliviar tensiones y, al fin y al cabo, a destensarnos y sentirnos más ligeras, sin menos presión, nervios y estrés. Se trata de una disciplina que mejora nuestra respiración y, con ello, aumenta nuestra energía y favorece la capacidad pulmonar, reduce la presión arterial y mejora tu circulación. Además, fortalece los músculos base de nuestro cuerpo, alineando la postura y la movilidad articular.

No son las únicas ventajas de esta actividad, también nos ayuda a  incrementar y tonificar nuestros músculos y mejorarla fuerza y la estabilidad en las rodillas y en la cadera, previniendo, con ello, el daño en la columna vertebral. Además, con él tonificaremos nuestro cuerpo, sea cual sea nuestra condición física, ya que es una actividad de bajo impacto, que nos ayudará a luchar contra el estrés y a concienciarnos con nuestra salud, logrando una mejor conexión cuerpo-mente con la que sentirnos bien. ¿Lo mejor? También nos ayudará a reconciliar el sueño, porque libera endorfinas y relaja los músculos que están en tensión y también nuestro estado de ánimo.

Deja las excusas y adéntrate en el mundo del pilates. Te contamos un ejercicio sencillo con el lograrás acabar con el dolor de espalda en pocos minutos, al mismo tiempo que empiezas con la operación bikini del próximo año, ya que ayuda a tonificar el abdomen para ayudarte a conseguir un vientre plano con el que lucir los mejores looks estas fiestas.

EL EJERCICIO DE PILATES DE PARED PARA CONSEGUIR VIENTRE PLANO Y ALIVIAR LA TENSIÓN EN LA ESPALDA

El primer paso para practicar pilates es enfundarnos en un conjunto deportivo cómodo, descalzarnos y colocarnos en una esterillla, tumbadas en el suelo. Debemos colocar nuestra piernas dobladas, con los pies en el suelo y conseguir una postura de espalda neutra. Para ello, debemos relajar los hombros, estirar neutros brazos y colocar las palmas de las manos boca a bajo, pegadas al suelo. Debemos quedar en una postura en la que entre el suelo y la espalda haya un hueco natural, sin forzarlo ni exagerarlo. Comenzaremos inhalando suavemente y, al exhalar, activaremos la pelvis, estrechando la cintura y el ombligo, y repetiremos el proceso 5 veces hasta que logremos controlar nuestra respiración.

Cuando le hayamos pillado el truco, debemos quedar en esa postura y levantar los brazos juntos, en una posición de 90º, para comenzar con el primer ejercicio. Iremos estirando la pierna y el brazo contrario de forma intercalada, acorde con nuestra respiración, para destensar la espalda y estirarla, al mismo tiempo que trabajamos el abdomen.

Con esta rutina sencilla lograremos trabajar todo el cuerpo e iniciarnos de forma rápida y fácil en el mundo del pilates.