¿Cuánta agua hay que beber?
La OMS recomienda dos litros de agua al día, pero la mayoría nos quedamos en litro y medio. Para ajustarlo bien y mantener un nivel de hidratación equilibrado, cada persona debería beber unos 20 ml de agua por cada kilo de peso ideal, además del agua contenida en los alimentos. Por ejemplo, si tu peso ideal son 60 kilos deberías beber 1.200 ml de agua al día.
¿Y cómo se equilibra el nivel de hidratación?
Para conseguir un equilibrio, las entradas y salidas tienen que ser similares. El cuerpo obtiene agua de los alimentos (30%), de las bebidas (60%) y del metabolismo propio (10%). Y expulsa el agua a través de la orina (60%), los pulmones (28%), y el sudor y las heces (12%). Cuando necesita o le sobra agua va ajustando las entradas (provocando sed, por ejemplo) y las salidas (haciendo que aumente o disminuya la producción de orina).
¿Cómo puedo saber si tengo un desequilibrio?
Cuando hay desequilibrio entre entradas y salidas, el organismo pone en marcha sus alertas. La principal es la sed, pero también la sequedad de piel y mucosas.
¿Entonces hay que esperar a tener sed para beber agua?
No, la sed en sí es una alerta, el organismo ya percibe un cierto grado de deshidratación, por lo que no hay que esperar a tener sed. Incluso es recomendable beber a intervalos regulares aunque no se tenga sed. Sobre todo los niños y mayores, ya que la sensación de sed se percibe menos con la edad.
¿Cuál es la mejor forma de beber agua?
Lo ideal es hacerlo a intervalos regulares varias veces al día, en lugar de una gran cantidad de golpe.
¿Cuanta más agua beba, mayores beneficios?
No, hay que beber la cantidad que tu cuerpo necesita, ni más ni menos. Beber en exceso no va a hacer que elimines más toxinas de las que debas eliminar, ni hará que adelgaces más. Solo conseguirás que tus riñones trabajen en exceso.