Ana Boyer está viviendo un momento muy dulce, y nunca mejor dicho. No solo porque su último proyecto profesional haya sido todo un éxito, aunque también. La menor de las hijas de Isabel Preysler se convertía el pasado 3 de abril en la flamante vencedora de la segunda edición de'Bake Off: Famosos al horno'. Después de permanecer en un plano menos mediático y al ser esta su primera incursión en la televisión, la expectación por su participación en el formato de repostería era máxima. Expectativas cumplidas, porque la 'socialité' ha resultado ser toda una profesional de la pastelería.
Una experiencia que ha resultado ser totalmente enriquecedora para ella y que, además, ha servido para acercar su faceta más humana a la audiencia. Justo cuando, junto a su marido Fernando Verdasco, atraviesa otra situación personal de excepción. Y es que Ana está embarazada. Por tercera vez, para precisar. Fue ella misma quien lo anunció el pasado diciembre en la revista '¡Hola!', además de concretar que el bebé que espera será, de nuevo, un niño. En cualquier caso, y a pesar de la felicidad de volver a ser madre, hay un extraño detalle de la actitud de la 'celebrity' durante los meses previos al parto que ha suscitado todo tipo de especulaciones.
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Ana Boyer se resiste a mostrar su figura premamá
¿De qué se esconde Ana Boyer? Esa vendría a ser la gran pregunta que ha surgido con relación a una conducta que dista de la determinación que muchas celebridades toman sobre su exposición durante la etapa premamá. Son ilustrativos los casos de famosas como Violeta Mangriñán o Cristina Pedroche, que no dudaban en compartir su cambio físico antes de dar a luz. No obstante, y aunque la hermana de Tamara Falcó también puede presumir de contar con una considerable legión de seguidores en la red, su comportamiento es más bien misterioso.
Basta con darse cuenta de que, a pesar de que ya ha pasado el primer trimestre de gestación, no existe ninguna imagen de la hija de Miguel Boyer luciendo tripita. Y no precisamente porque no esté apareciendo en escena. Basta con observar sus últimas publicaciones en Instagram, donde hace referencia a la inminente llegada del bebé promocionando productos como una pequeña maleta para los artículos del niño. Es en esa grabación en la que, de refilón durante una de las secuencias, se puede ver la panza de Ana. Pero nada más, y mucho menos parece pasársele por la cabeza la idea de posar mostrándola al mundo de forma intencionada.
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Podría ser una simple coincidencia, aunque si se analizan el resto de contenidos que la esposa del tenista ha publicado en las últimas semanas —justo cuando habría empezado a notarse su barriga de embarazada—, se aprecia que este ejercicio de la ocultación podría ser reiterado. Si bien en algunos casos apuesta por aparecer de cuello para arriba, o mostrar elementos del entorno en los que ella no está presente en la fotografía, cuando si podría verse su tripa prefiere taparla. Sea con el delantal del programa que ganó, o con otros objetos como un bolso.
Ana Boyer vuelve a elegir España para dar a luz
Otra de las instantáneas en las que llama la atención la forma en la que los elementos del espacio parecen haberse alineado para dejar imperceptible el abdomen de Boyer, es una en la que aparece junto a Miguel y Mateo, sus dos hijos. "En la mejor compañía", escribe. Siempre es bueno el lugar cuando está junto a ellos y su esposo. En cualquier caso, esta vez no están en su casa de Doha, en Catar. Ana, que desde hace años vive en el golfo Pérsico con Verdasco y los pequeños de la casa, ha vuelto a preferir dar a luz en España, Concretamente en la casa de Madrid de Isabel Preysler, su madre, en la que los cuatro se han instalado. Así será por ahora y por un tiempo más, puesto que la idea de la pareja es, también, quedarse en su país natal durante los primeros meses de vida del nuevo nieto de la 'reina de corazones'. La ocasión ideal para, además de sentirse arropada por los suyos, poder exprimir todo el tiempo posible en familia.