¿Te gustaría sorprender a tus invitados con unos aperitivos fríos que sean fáciles de preparar y pidan a gritos que les hinques el diente? Pues estás en el lugar adecuado, porque te vamos a dar algunas recetas variadas de picoteo que gustarán a todos.
Desde ensaladillas, patés, canapés fríos, brochetas, hasta montaditos variados, hay opciones para todos los gustos y ocasiones. Lo mejor de los aperitivos fríos es que muchos de ellos pueden prepararse con antelación y guardarlos en la nevera hasta el momento de servirlos. Además, son ideales para esos momentos en los que apetece algo fresco y ligero.
Ideas para tus aperitivos fríos
Entendemos por aperitivo frío cualquier canapé que no necesite ser calentado o cocinado antes de servirlo. Lo bueno de los aperitivos fríos es que se pueden comer con calma, al ritmo de cada comensal. ¿Cuáles son los requisitos ideales para este tipo de entrantes? Que sean pequeños y fáciles de comer.
Pueden ser clásicos, como platos con quesos, embutidos, frutos secos, aceitunas... e incluso algo más elaborados y elegantes, como aperitivos en vasito y cuchara que no sean los típicos. Lo mejor es innovar y con pocos ingredientes crear elaboraciones sencillas pero que parezcan de alta cocina.
Haz esto y tus canapés fríos no se ablandarán
El pan de molde es una de las mejores opciones para presentar tus canapés. Además de ser económico, encontrarás un montón de variedades para escoger la que más te encaje: integral, con semillas, con corteza, sin ella, rebanada gruesa e incluso en láminas finas.
Por ponerle un pero, te diremos que tiende a reblandecerse. ¿Cómo impedirlo? Una experta en cátering nos lo cuenta: la solución es tan sencilla como tostarlo. De esta manera no perderá su esencia pero tendrá más consistencia. Puedes tostarlo más o menos, según te interese, tanto en horno como en tostador. También ayuda si los preparas justo antes de consumirlos.
A continuación, te dejamos varias ideas que podrás elaborar en poco tiempo y dejarán a tus invitados con la boca abierta. ¡Toma nota!