El tema de las ensaladas saludables está rodeado de mitos. Por un lado, les acompaña el sambenito de ser aburridas, tristes y monótonas. Por el contrario, hay quienes piensan que TODAS son saludables: para nada. Salsas demasiado consistentes a base de nata, ingredientes fritos o aliños con mucho azúcar pueden sumar calorías a tus ensaladas sin que te des cuenta de ello.
Por último, estaría la creencia de que las ensaladas saludables no llenan. Es cuestión de utilizar los ingredientes adecuados. Como verás a continuación, la pasta, las legumbres y el arroz, son una buena base para elaborar una ensalada ligera, nutritiva y que además no te haga pasar hambre.
Así harás tus ensaladas fácilmente
Como todo en la vida, hacer ensaladas también tiene su truquillo. Seguir estos pasos te permitirá hacer ensaladas sin ninguna complicación, y variando ingredientes para que sea más fácil comer bien.
- Define la base de tu ensalada. Los carbohidratos como arroz, quinoa, legumbres o patatas cocidas, son perfectos como base y te aportarán mucha energía. Otra de las opciones más populares es utilizar una o varias clases de "verde" como espinacas, rúcula, canónigos o lechuga.
- Agrega proteínas. Ya sean vegetales o animales, necesitas ingredientes nutritivos y saciantes. El atún, el pollo y el huevo son muy versátiles, de ahí que sea tan frecuente utilizarlos en ensaladas saludables.
- Frutas y verduras. La ensalada es mas que lechuga y tomate. Espárragos, calabacín, apio, pera, pasas o fresas son otras posibilidades estupendas.
- El toque crujiente. Para que haya mezcla de texturas, lo ideal es que incorpores algún alimento como cebolla frita, manzana, granada o picatostes.
- El aliño. Además de aceite de oliva, vinagre y sal, puedes utilizar vinagretas variadas con limón o salsa de yogur.
Ahora solo te queda echar un vistazo a nuestras ensaladas saludables y elegir que la que más te llame.