Parece que es la tónica habitual que para que una historia sea recordada debe contar con sus luces y sus sombras. Son muchas las vidas de nuestros royals que han estado marcadas por el drama y la tragedia, y ni siquiera el mejor de los guiones podría hacer justicia. Con motivo del décimo aniversario de la llegada del rey Felipe VI al trono, vamos a repasar la historia de vida de nada más y nada menos que de su abuelo, el conde de Barcelona, don Juan de Borbón y Battenberg. Han pasado tres décadas desde que dejó este mundo a causa de un cáncer de laringe; sin embargo, su historia sigue siendo recordada, principalmente por los hechos tanto duros que envolvieron su vida, entre los que encontramos la muerte prematura de un hijo, el ascenso al trono que nunca llegó -y que le arrebató su otro hijo- o la soledad.
Aun así, don Juan de Borbón siempre se mantuvo firme a sus principios y valores monárquicos. ¡Vamos a repasar mejor algunos de los pasajes más impactantes (y tristes) de la vida de don Juan de Borbón!
DON JUAN DE BORBÓN, UNA VIDA MARCADA POR LA DESGRACIA
Juan de Borbón nació el 20 de junio de 1913, en el palacio real de La Granja, en Segovia. Juan era el quinto hijo del rey Alfonso XIII y la reina Victoria Eugenia de Battenberg. Cuatro días después fue bautizado bajo el nombre de Juan Carlos Teresa Silverio Alfonso de Borbón y Battenberg y contó con unos padrinos de renombre: el rey Carlos I de Rumania y la archiduquesa María Teresa de Austria-Este. Al tratarse del tercer varón de los cinco hijos del matrimonio, Juan no creía en aquel momento que el título de Rey de España era algo que podía ostentar; no obstante, varios giros de los acontecimientos harían que los planes de la familia cambiaran por completo. Los dos hermanos mayores de Juan renunciarían a ascender al torno, dejándole el terreno libre a don Juan de Borbón, aunque finalmente esto nunca ocurriría.
Su hermano mayor, Alfonso Pío, estaba profundamente enamorado de la cubana Edelmira Sampedro y Roba. Se trataba de una plebeya, por lo que para que su padre aceptara dicho enlace, Alfonso tenía que renunciar. A su vez, también sufría uno de los trastornos hereditarios que a tantas casas reales ha sacudido, la hemofilia. Por lo que no era un buen candidato. Por otro lado, el segundo hermano, Jaime, era sordo y tiempo después se comprometería con Emmanuela Dampierre, quien tampoco pertenecía a la realeza. De esta manera, y con la Ley Sálica vigente, sus dos hermanas, Beatriz de Borbón y María Cristina de Borbón, quedarían fuera del trono y el peso recaería sobre don Juan de Borbón.
En 1933, cuando tenía 20 años, el padre del rey don Juan Carlos recibiría la noticia mientras se encontraba en la India, siendo marino de la armada inglesa. Fue además durante su paso por la Escuela Naval Británica cuando llegaría a navegar en la Royal Navy. Su pasado marinero también le dejaría un recuerdo en forma de un tatuaje de un dragón oriental en cada brazo. “Me los hice en el año 32, cuando solo tenía 19 años. En aquella época era muy normal, muy de marino. El que pasaba por oriente, se los hacía. Hoy en día es menos común”, confesó años después el conde de Barcelona en una entrevista con Pilar Trenas. En aquel momento, la familia se encontraba en el exilio tras la proclamación de la II República. “Por renuncia de tus dos hermanos mayores, quedas tú como heredero. Cuento contigo para que cumplas con tu deber", rezaba Alfonso XIII en el telegrama donde le transmitía la noticia. Don Juan pasaba a ser príncipe de Asturias. Dos años después, en octubre de 1935, Juan de Borbón contrajo matrimonio con la infanta María de las Mercedes de Borbón y Orleans, hija de don Carlos de Borbón, y María Luisa de Orleans. Fruto de ese matrimonio nacieron Pilar, Juan Carlos, Margarita y Alfonso. El 15 de enero de 1941, Alfonso XIII se veía obligado a abdicar, ya que su salud no le permitía seguir adelante y tan solo un mes después, el 28 de febrero de ese año, fallecería; sin embargo, Juan no podía ostentar el título de Rey de España al no poder jurar den las Cortes, de ahí que al poco tiempo decidiese hacer suyo el título real de conde de Barcelona. Sin embargo, su deseo era claro y él quería ser el "Rey de todos los españoles”, tal y como manifestó en sus primeras palabras. Durante los años del exilio, la familia pasó por Suiza o Estoril, Portugal, hasta que, finalmente, en el año 1982, don Juan y doña Mercedes regresaron a España para siempre. Se instalaron en un chalet en Puerta del Hierro, conocida como Villa Giralda.
Su complicada RELACIÓN CON su hijo JUAN CARLOS I
Durante los años 1970 y 1975, la relación entre Juan de Borbón y su hijo, Juan Carlos, estuvo marcada por las tensiones y el enfrentamiento. Juan Carlos ya había sido designado el sucesor a la corona a manos de Franco, dejando a su plano en un segundo plano y sin poder haber accedido al trono. Por supuesto, esto jugó en contra de su relación, pero aun así tenían que mantener una imagen de unidad y cordialidad para no levantar sospechas y que esto terminará haciendo cambiar de parecer a Franco. Aunque debemos destacar que la relación de Juan y su hijo estuvo marcada por un trágico acontecimiento que cambiaría el rumbo de la vida de ambos. En 1956, don Juan Carlos disparó de manera accidental a su hermano, el príncipe Alfonso, mientras manipulaba una pistola. Un hecho demoledor que marcó la relación padre e hijo para siempre.
Finalmente, el 22 de noviembre de 1975, don Juan Carlos juró como Rey de España. Tan solo dos años después, en una ceremonia que se llevó a cabo en Zarzuela, Juan de Borbón renunció a los derechos dinásticos y a la jefatura de la casa de Borbón. En cuanto a ese Juan de Borbón más cercano y personal, siempre se ha puesto de manifiesto que era una persona con un alto sentido de la responsabilidad, y que se tomaba muy en serio sus obligaciones reales. Pero, a la vez, la lista de mujeres con las que ha sido relacionado también es alargada. Una de las más sonadas fue con una de las grandes estrellas del cine del momento, la actriz, Sza Sza Gabor. Aunque también fue relacionado con la actriz Nati Mistral. Pese a que estos affaires nunca llegaron a confirmarse, lo cierto es que lograron copar titulares en la prensa del momento.
Juan de Borbón falleció el 1 de abril de 1993, en la Clínica de Navarra, tan solo dos meses antes de cumplir 80 años, tras una larga lucha contra el cáncer de laringe. Su cuerpo fue enterrado en el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. Además, en el su funeral recibió honores de jefe de Estado. Una de las imágenes que mayor impacto logró causar en el día de su entierro fue ver a un rey don Juan Carlos totalmente destrozado por la pérdida de su padre. Don Juan de Borbón logró dejar huella por haber vivido una vida nada sencilla, donde tuvo que hacer frente a una situación política de lo más adversa, pero que ni siquiera esto frenó sus ganas de convertirse en un gran Rey para España.