Una nueva escala en la gran aventura de Leonor, un nuevo puerto y una nueva ciudad que descubrir junto a sus compañeros del Juan Sebastián Elcano, pero seguramente también una nueva polémica que evitar a toda costa. Y es que la travesía marítima que la Princesa de Asturias está llevando a cabo dentro de su formación castrense está suscitando un gran interés, no solamente por el reto que supone en su carrera militar, sino también a nivel personal. 

Tras su espectacular salida de España desde Cádiz, su paso por las Islas Canarias, su larga travesía cruzando el océano Atlántico y su polémica estadía en Brasil, ahora le llega el turno a Uruguay, un país con el que la corona tiene fuertes vínculos y que seguirá poniendo a prueba a Leonor en estos meses cruciales para su futuro, no solo como mujer, sino como responsable del futuro de la corona. 

Leonor
Gtres

En esta nueva parada se enfrenta a un nuevo reto más que claro, y que poco tiene que ver con su instrucción: vivir su vida, pero cuidando su imagen y la de toda la Corona Española. ¿Cómo puede la princesa ser capaz de combinar su juventud con todo lo que el protocolo y la Casa Real espera de ella en esta nueva visita a una ciudad latinoamericana? Deberá aprender de “los errores” de su última parada.

Próxima parada: Uruguay 

La ciudad de Montevideo es la nueva parada de la ruta marítima que Leonor de Borbón y todos sus compañeros y compañeras cadetes de la Academia Naval de Marín están desarrollando durante estos primeros meses de 2025 embarcados en el mítico buque escuela Juan Sebastián Elcano de la Armada Española. En esta ciudad uruguaya, atendiendo a asuntos de carácter protocolario, y también de organización de la propia embarcación, estarán atracados del día 5 de marzo al próximo domingo 9. 

Se trata de la segunda parada en el continente americano que, tras Salvador de Bahía en Brasil, sigue mostrando toda su belleza y fuerza. Tras estos días en Uruguay, el itinerario seguirá en la costa chilena, con paradas en Punta Arenas del 20 al 23 de marzo y Valparaíso del 4 al 8 de abril. Luego, el recorrido continúa hacia Perú, donde estará del 17 al 22 de abril. Posteriormente, se dirigirá a Panamá, con una escala del 3 al 6 de mayo, destacando el cruce del Canal de Panamá. Seguirá por Colombia, visitando Cartagena de Indias y Santa Marta del 9 al 14 de mayo, para luego arribar a Santo Domingo, República Dominicana, del 19 al 24 de mayo. Finalmente, el viaje concluirá con una visita a Nueva York, del 5 al 10 de junio.

Leonor en Brasil
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Un gran reto por delante

Si este viaje de Leonor nos está enseñando algo es que, además de las complicaciones propias de los marinos, la joven también tiene que lidiar con su fama internacional. En la última parada de su travesía en Salvador de Bahía, en Brasil, hemos podido ver cómo se montaba un gran revuelo internacional al filtrarse una serie de fotografías donde se la veía, junto a sus compañeros y compañeras, disfrutando de una multitudinaria fiesta. 

Aunque no han salido a la luz, se comenta que incluso habría fotografías donde la princesa Leonor estaría dando un beso a un compañero, contraviniendo así la norma que Casa Real le ha impuesto de velar a toda costa por su discreción. Aunque tiene 19 años, no puede comportarse como una chica normal y debe velar, en todo momento, por su imagen como heredera del trono español. Muy pocas veces hemos visto a Leonor hacer planes igual que el resto de jóvenes de su edad y atendiendo a la polémica, parece ser que seguirá siendo así. 

Después de este revuelo mediático es más que normal que, en esta nueva parada, Leonor se muestre un poco más cohibida y quiera limitar al máximo la exposición pública viendo que una simple escapada nocturna, haciendo algo que sería completamente normal en cualquier otra persona de su edad. Para ella supone un gran quebradero de cabeza, sobre todo proveniente de los efectores más conservadores de la sociedad que quieren ver en ella el ejemplo perfecto de heredera al trono. 

Casi se encuentra con su padre

En varias ocasiones se ha comunicado cómo, tanto la joven, como su padre, Felipe VI y Letizia, se están echando mucho de menos. Durante estas largas travesías los cadetes tienen muy limitado el contacto con sus familiares y eso estaría haciendo que los ‘royals’ no tengan la conversación tan fluida como suelen y les gustaría. De hecho, las lágrimas de Letizia en la despedida y algunos comentarios vertidos por el rey Felipe durante estas semanas demuestran cómo están “sufriendo” la distancia familia. 

Esto podría haberse resuelto, al menos durante unos minutos, si el calendario oficial hubiera estado de su parte, puesto que Leonor y su padre se han “cruzado” en Uruguay. Mientras ella estaba a punto de llegar, el monarca abandonaba el país tras acudir a todos los compromisos de su viaje oficial a Montevideo que arrancaba el 28 de febrero y se prolongó hasta el 2 de marzo.

Su majestad ha acudido al país latinoamericano para acudir a la toma de posesión de Yamandú Ors, el presidente electo del país. Es muy común que Felipe VI, como jefe de Estado de España, se desplace hasta el continente americano para acudir a las tomas de posesión de los presidentes hispanoamericanos, mostrando su apoyo al mundo latino. Tan solo 3 días han separado a padre e hija que tendrán que esperar para verse unos cuantos meses más, cuando la joven regrese a España desde Nueva York.