¿Quién es quién en la familia real británica? Árbol genealógico de la Casa de Windsor

'La Firma', los Windsor o simplemente la familia real más icónica de todos los tiempos. No importa el lugar del mundo al que se viaje, incluso si este se sale de los límites comprendidos por los reinos de la Commonwealth, que difícilmente alguien no los conoce. Sobre ellos se ha escrito una ingente cantidad de libros, se han hecho películas e incluso entrevistas televisadas que cambiaron el rumbo de la institución. La crónica de una estirpe que trabajó por ser lo suficientemente británica como para no dibujar una sola fisura y se topó con la realidad. El clan para siempre vertebrado por Isabel II.

La inolvidable Isabel II, siempre acompañada por Felipe de Edimburgo

Aunque en este 2024 se hayan cumplido ya dos años de su fallecimiento, difícilmente podrá el mundo olvidar su figura. No en vano fue el suyo el reinado más duradero de toda la historia de los monarcas británicos. También el más largo verificado de una mujer. 70 años y 214 días al frente de la Corona y la Mancomunidad de Naciones que terminaron el 8 de septiembre de 2022, cuando falleció. Murió a los 96 años de edad, y con mil y una historias para el recuerdo, comenzando por su amor con el Felipe, duque de Edimburgo y después príncipe consorte del Reino Unido.

Por siempre su fiel compañero, aunque lamentablemente tuvieron que despedirse definitivamente en el año 2021, cuando él murió con 99 años de edad. El adiós a una vida juntos, en las que aprendieron a servir a la institución desde muy jóvenes, puesto que ninguno de los dos alcanzaba la treintena cuando la muerte de Jorge VI impulsó el ascenso al trono de Isabel en 1952. El caso es que, tras solo cinco años de casados -su enlace tuvo lugar el 20 de noviembre de 1957 en la abadía de Westminster- encontraron su lugar. Se ganaron el cariño de las gentes y, no contentos con eso, también formaron una familia numerosa.

Una familia de seis, que se dice pronto. Nada más y nada menos que cuatro fueron los hijos nacidos del matrimonio entre la Reina más carismática y longeva y su inseparable marido. Porque aunque los menos observadores acostumbren a tener en el radar solamente a Carlos, su primogénito nacido el 14 de noviembre de 1948, y actual soberano del reino, a él le siguen tres nombres más en el árbol genealógico de esta extensísima dinastía de 'royals'.

De la princesa ANa al príncipe Eduardo, pasando por Andrés de York

Empezando por Ana, que desde el año 1987 ostenta el particular título de princesa real del Reino Unido y nació el 15 de agosto de 1950. La única mujer hija de Isabel II tiene algo en común con su hermano mayor, pues ella también se divorció. Fue en marzo de 1992 cuando se separó del capitán Mark Phillips, con el que se había casado en 1973 y padre de sus hijos Peter y Zara. En diciembre del mismo año se casó de nuevo. Esta vez con el vicealmirante Tim Laurence, al que sigue unida en la actualidad.

Y como si de una tradición familiar se tratase, el tercero de los hermanos también sabe muy bien lo que supone divorciarse, aunque en su caso no ha habido segundas nupcias. El príncipe Andrés, duque de York, nació el 19 de febrero de 1960, diez años después de su hermana y cuando su madre ya llevaba casi una década en el poder. En 1986 contrajo matrimonio con la siempre polémica Sarah Ferguson, de la que se separó en 1996 tras haber sido padres de la princesa Beatriz y la princesa Eugenia.

Años más tarde, Sarah apareció nombrada en los 'Panama Papers', mientras que Andrés se vio envuelto en el polémico caso de tráfico sexual de Jeffrey Epstein. Tras ver la luz su supuesta amistad con el magnate estadounidense, el duque optó por retirarse de la vida pública en noviembre de 2019. El 13 de enero de 2022 se anunció la retirada de sus títulos militares y patrocinios reales con motivo de la causa civil a la que se enfrenta en Estados Unidos por agresión sexual.

Al hilo del listado de hijos de Isabel II, es preciso cerrar con el único que no ha roto su primer matrimonio, que es Eduardo. El más pequeño de los cuatro ostenta desde el 10 de marzo de 2023 el título de duque de Edimburgo, que antaño perteneció a su padre y a su hermano cuando todavía era príncipe heredero. Hasta entonces fue duque de Wessex, un título que ahora ocupa su hijo. Porque sí, él también es padre. También de dos, además. Una familia que ha formado junto a Sophie Rhys-Jones, su mujer.

En la actualidad siguen juntos desde que entonaron el 'sí, quiero' en la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor, el 19 de junio de 1999. Más de dos décadas de casados en el devenir de una unión sólida de la que nacieron los jóvenes Louise y James. En el 2003 y en el 2007 respectivamente, siendo así ellos los nietos más pequeños de la Reina más célebre de Inglaterra.

Carlos III, el Rey divorciado que ascendió al trono a los 73

Cuatro hermanos que no serían los mismos de no ser por el primero de todos. El mayor, Carlos, que desde 1958 y hasta el fallecimiento de su madre, ostentó el importante título de príncipe de Gales. Ese que en el momento de casarse se hizo extensible a su primera esposa. Diana Spencer, otra de las grandes figuras de la historia reciente de la monarquía británica, apodada como 'Lady Di' o la princesa del pueblo. Esto último por ser considerada una mujer que trató de cambiar las dinámicas en la institución, hablando abiertamente del acoso que vivió por parte de la prensa. Lo hizo en la misma entrevista para la BBC en la que se refirió a las infidelidades de su marido en el año 1995. En 1996 firmaron el divorcio.

Una separación que llegó después de que el la propia Reina instase a su hijo y su nuera aconsejándoles que tomasen caminos distintos. El caso es que no fue sencillo, sobre todo teniendo en consideración que por entonces ya eran padres del príncipe Guillermo y el príncipe Harry. Un doloroso añadido para la primera princesa 'no real' de la historia del Reino Unido que perdió la vida tan solo un año después. El 31 de agosto de 1997, Diana falleció en un accidente automovilístico en París. Justo cuando tanto ella como su exmarido habían comenzado a rehacer su vida. Ella con el empresario egipcio Dodi-Al Fayed y él con Camilla, la mujer que siempre fue su gran amor.

De apellido Shand, pero Parker Bowles tras su primer matrimonio con el oficial Andrew Parker Bowles hasta el año 1995. Con él, que a principios de la década de los 70 había sido pareja de la princesa Ana, tuvo a sus dos hijos. Thomas y Laura, el legado de una pareja que se rompió para que pudiese triunfar su relación clandestina con el príncipe. Así, poco a poco y ya los dos separados, empezaron a vivir un noviazgo natural. Camilla se hizo su hueco y en el 2005 consiguieron el beneplácito de Isabel II para casarse en segundas nupcias. Un segundo matrimonio, desde la coronación de Carlos III a los 73 años en 2023, le ha valido para tener el papel Reina consorte del Reino Unido y los otros catorce reinos de la Mancomunidad.

Guillermo de Gales y Kate Middleton, el futuro de la Corona

No deja de ser sorprendente el escenario que ha quedado en tierras británicas tras el último adiós de la antigua Reina en 2022. No solo porque Carlos se convirtió en la persona de mayor edad en acceder al trono, sino también por cuan distinto es el horizonte que se presenta a su sucesor, que es su primogénito Guillermo. Por lógica temporal, el actual príncipe heredero -nacido el 21 de junio de 1982- no tendrá que esperar tanto para convertirse en jefe de Estado. Un camino hasta la Corona que recorre junto a Kate Middleton, su mujer.

Catherine, como le gusta ser llamada en los entornos oficiales, conoció al hijo del actual Rey cuando estudiaban en la Universidad de St. Andrews y se enamoraron. Así comenzó una relación de película, desde el año 2003 y hasta que el 29 de abril de 2011 la abadía de Westminster sirvió de escenario para su casamiento. El pistoletazo de salida a un amor que todavía perdura contra viento y marea y que se prolonga ahora con las alegrías del Palacio de Kensington: sus hijos.

El primero, y por tanto llamado a ocupar el trono en el momento en el que termine el reinado venidero de su padre, fue el príncipe George, nacido el 22 de julio de 2013. De nuevo, y siguiendo la estela del núcleo duro que en el pasado formó su abuela Isabel, el mayor de una familia numerosa. No de cuatro, pero sí de tres. En 2015 nació la princesa Charlotte y el benjamín de palacio es el príncipe Louis, que llegó al mundo en el 2018.

El príncipe Harry y Meghan, la eterna 'duquesa difícil' 

Imposible concluir esta enumeración de 'royals' sin hacer mención a la pareja que, como en el pasado sucedió con otros tantos miembros de la estirpe, se ha 'coronado' como la más polémica. Para empezar, por algo tan simbólico como que el príncipe Harry -nacido el 15 de septiembre de 1984-, también hijo del monarca y la desaparecida Diana, y por tanto hermano menor del heredero Guillermo, ya no ejerce funciones reales. Ni siquiera vive en el Reino Unido. Una serie de decisiones que ligan directamente con la irrupción de su mujer, Meghan Markle, en la realeza.

Meghan, que antes de quedar prendada del príncipe creía saber lo que supone lidiar con la exposición pública. Todo por su antigua profesión, pues la estadounidense trabajaba como actriz e incluso protagonizó ficciones internacionales tan aclamadas como 'Suits'. Una faceta que apartó en el momento en el que su relación con Harry comenzó a avanzar a pasos agigantados. Y tratando de hacer caso omiso a todas las críticas de los tabloides y el populacho por cuestiones como su pasado o su raza, la ya exactriz aceptó casarse con él cuando él se arrodilló para pedirle matrimonio.

Cabe destacar que no era la primera vez se atrevía a entonar el 'sí, quiero'. Entre 2011 y 2014 estuvo casada con el productor y director Trevor Engelson, pero esta vez el pretexto era bien distinto. Casarse con Harry implicaba convertirse en 'royal' y adaptarse a un estricto protocolo que nunca terminó de encajar con ella. Así, de nada sirvió que el 19 de mayo de 2018 la capilla de San Jorge se vistiese de gala para asistir a un enlace histórico. Tampoco que Isabel II los nombrase duque y duquesa consorte de Sussex con motivo de su unión. Ni siquiera el nacimiento en 2019 del príncipe Archie de Sussex, su primer hijo, los retuvo en suelo inglés. Meghan estaba senteciada a ser 'Duchess Difficult', o lo que en español vendría a ser una duquesa difícil.

En 2020 ambos hicieron pública su intención de abandonar su papel dentro de 'La Firma' e incluso que querían indepenencia económica. Una renuncia al tratamiento de alteza real y la decisión de no volver a ser parte de la institución que los llevó a dejar la tierra de la Corona atrás. Hoy día, ambos están afincados al otro lado del charco. En Los Ángeles, California, donde nacería su segunda hija, la princesa Lilibet de Sussex, en el 2021.