Si la manera de vestir refleja la personalidad de una persona, cómo organiza y decora su casa, sin duda, también consigue transmitirnos su esencia y buen gusto. Si no, que se lo digan a Amelia Bono, que a través de sus redes sociales no solamente consigue enamorarnos de sus looks, sino que también ha conseguido que nos fijemos en su interesante casa en la zona de norte de Madrid para tomar inspiración.

En esta nueva etapa de su vida, tras romper su matrimonio de más de 15 años con el hijo de Raphael, Manuel Martos, Amelia Bono se encuentra completamente renovada, viviendo una “segunda juventud” pero sin perder la sonrisa. A golpe de clic, la hija del político, que ahora tiene 42 años, ha conseguido convertirse en una de las influencers maduras con mejores propuestas en cuanto a contenidos que ofrece a su legión de fans.

Pero no solo nos inspira su armario, sino que también hemos podido conocer un poco mejor su casa por dentro gracias a tenerla como escenario y fondo de sus videos diarios. Compartir estos momentos especiales e inspiradores con todos no hace más que seguir reflejando el buen gusto del que hace gala la influencer. 

El salón: Industrial con toque bohemio

Una de las principales virtudes de Amelia Bono es que es capaz de mezclar ideas muy diferentes y conseguir que encajen a la perfección. Lo mismo ocurre en su salón, donde podemos ver cómo algunos elementos industriales, y otros con un carácter mucho más bohemio o étnico, conviven a la perfección.

Con la pared completamente blanca, destacan las vigas del techo pintadas de gris, y, al fondo, una pared transparente, que separa el salón de la cocina, con una gran cristalera con los cerramientos negros y metálicos. Potencia este enfoque industrial los muebles como la mesa de centro y las butacas, donde predominan las líneas rectas y materiales naturales, como el ratán, pero que siguen siendo “fríos” debido al color tan oscuro. 

Para compensar, la influencer ha integrado algunos elementos con toque natural y étnico y que aportan algo de texturas y color. Encontramos una alfombra estampada, que, aunque es en tonos blancos y negros, es de fibra natural, empastando a la perfección con los dos estilos. También las sillas de la zona de comedor, con estampado zigzag de colores, y algunas decoraciones naturales, que terminan de dar ese punto natural que dulcifica la zona. 

La cocina: Luminosa y primaveral con su espectacular papel pintado 

Si algo destaca en la cocina de Amelia Bono es la espectacular combinación entre el minimalismo de los muebles y el maximalismo de algunos elementos de decoración. Con los muebles completamente en blanco, y una encimera continua del mismo color, que consigue ampliar visualmente el espacio, encontramos una apuesta por la sencillez, convirtiendo este punto central de la casa en un área completamente funcional.

Esto, sumado a la muchísima luz que tiene esta área, consigue que sea un lugar que transmite mucha tranquilidad. Es una cocina enorme, donde caben tranquilamente grandes electrodomésticos, como una nevera con doble puerta, que la influencer tiene llena de dibujos de sus hijos, o un testero completo lleno de grandes armarios de techo a suelo. 

Pero como sabemos que a Amelia Bono le encantan los detalles originales, en este espacio también encontramos una fuerte apuesta que nos ha sorprendido y gustado mucho: Un papel de pared muy especial. En tonos empolvados, azul, rosa y gris, encontramos un papel de pared en la cocina que nos recuerda a la primavera, por todos sus elementos naturales, como plantas o pájaros. Pero lo hace de una forma sutil y elegante, consiguiendo que no nos cansemos muy pronto del papel pintado, que a veces pueden saturar demasiado.

El dormitorio: Tremendamente sencillo 

Es uno de los lugares favoritos de la madrileña para enseñarnos sus outfits, por eso hemos podido conocer algunos detalles de su dormitorio. Pintado en blanco roto, el suelo es de mármol, que parece que es el suelo elegido para la parte superior de la casa, puesto que podemos ver cómo continúa hacia otras habitaciones. El techo parece estar abovedado, otorgándole mayor altura y haciendo que la habitación parezca aún más grande de lo que ya es. 

Junto a la puerta, cuenta con un armario empotrado de 3 puertas, y junto a él, una cómoda de madera clarita y de diseño tradicional. La madera clara también está presente en la mesitas de noche. Justo encima de este mueble encontramos la esquina de una gran televisión, desde la que seguro que Amelia Bono disfruta de sus películas o series favoritas antes de irse a dormir. 

Lo que nos ha sorprendido mucho es que la habitación cuenta con muy poca decoración. No vemos ningún cuadro en el gran testero vacío al fondo de sus videos. Y lo único que destaca en la habitación son las tres alfombras en conjunto, en color tierra y con franjas en blanco y negro, que se encuentran repartidas alrededor de la cama. 

El jardín: Espacioso y relajante

Como si de una prolongación de la casa se tratara, el jardín también sigue la sencillez y la presencia de toques industriales de la casa de Amelia Bono. Vemos que tiene dos zonas separadas. Por un lado, encontramos una gran zona de césped, donde estamos seguros de que disfrutan muchísimo jugando en familia.

Al lado podemos encontrar una pequeña zona de reunión, donde un sofá y 4 butacas se arremolinan junto a una mesa de centro. En color gris y con los cojines en blanco, parece un lugar estupendo para cenar al aire libre, o para charlar tomando un refresco y disfrutando del jardín.

Y por supuesto, cuenta con una gran piscina, con forma alargada y laterales redondeados, en una esquina de la zona exterior, donde poder darse un chapuzón y descubrir también la extensa gama de bikinis y bañadores con los que cuenta la madrileña. Sin duda un lugar perfecto para disfrutar del relax.