En un mundo marcado por el estricto protocolo, las normas de organización, de gestión y de seguridad, es difícil pensar en gestos amorosos. ¿Verdad? Pero el cariño siempre se impone. Eso es lo que ocurre con el Rey Felipe VI y sus hijas, las infantas Leonor y Sofía que, más allá del cargo que ostenta y la importancia que tiene como jefe de Estado, siempre ha dejado muy claro que es un padre cariñoso y atento. 

La familia real española siempre ha hecho gala de una tremenda profesionalidad. Lejos quedan los momentos donde se ponía en duda su trabajo, influencia y apoyo a muchas causas sociales y se han convertido en la mejor representación posible de la corona española. Y todo esto sin dejar de mostrarse como lo que sencillamente son: una familia.

Felipe e hijas
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Hoy, cuando se celebra el Día del Padre como uno de los momentos más emotivos del año para poner en valor esta figura fundamental, también queremos analizar la figura de Su Majestad no solamente como rey y como capitán de todos los ejércitos, sino también como un padre que no ha dudado en mostrar sus gestos con sus pequeñas. 

Bautizo Sofía
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Felipe coge a Leonor durante le bautizo de Sofía.

Cariñoso pero firme

La buena sintonía de las dos infantas con su madre, Doña Letizia, es más que palpable, pero no cabe duda de que la vinculación entre padres e hijas es tremendamente especial. Siempre se ha dicho que las niñas prefieren a papa y los niños a mamá. Pero, lejos de toda frase hecha o prejuicio, en Zarzuela hemos visto en muchas ocasiones cómo Leonor y Sofía miran a su padre con cariño y cómo a Don Felipe “se le cae la baba” con sus hijas, incluso a medida que crecen. 

Felipe Primer día de colegio
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Felipe y Letizia acompañando a Leonor y Sofía en su primer día de colegio.

Eso no quita que el monarca también haya ejercido su autoridad como padre y sea firme con ellas a las que exige responsabilidad y ser conscientes de quienes son. Esto se ha intensificado en momentos cruciales para sus hijas, como su educación o eventos importantes para la familia al completo, como puede ser momentos clave mientras crecen.

Felipe e hijas
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Felipe y sus hijas durante una regata.

Sobre todo ha puesto el foco en la primogénita, Leonor, que será la heredera al trono siguiendo sus pasos y asegurando la continuidad de la corona española. Su unión con Leonor no es que sea mayor, es que es irremediablemente más estrecha para poder enseñarle todos los pasos a seguir en su futuro como 'royal'.

Felipe y Leonor
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Un padre bondadosos para “las pequeñas” 

Desde que las infantas eran muy pequeñas hemos podido ver cómo estaban “al cuidado” de su madre, Letizia, que siempre ha estado muy apegadas a ellas y guiándolas en cada momentos de los diferentes eventos donde la Corona tenía un papel destacado. Pero eso no quita que Felipe V, ejerciendo como padre, siempre se encontrara también pendiente de las pequeñas.  

Felipe e hijas esquí
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Por ejemplo, han compartido juntos grandes pasiones del monarca, como el esquí, o diferentes visitas por toda España para descubrir la diversidad del país. Si esto ha sido en público, imaginamos que en privado esto se habrá multiplicado por mí. 

Esto ha servido no solamente para descubrir cómo han ido creciendo, sino también cómo ha evolucionado el Rey Felipe como padre, mostrando una versión mucho más emotiva del monarca que muy pocas veces se puede ver públicamente. Pero junto a ellas ha sido imposible resistirse y hemos visto muy cariñosas instantáneas a lo largo de los años.

Felipe e hijas
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Siguiendo sus pasos de mayor 

Ahora, la familia vive una nueva etapa. Las jóvenes no solamente han crecido, sino que también han forjado una personalidad propia. Asimismo, los Reyes, ya con 20 años de trono a sus espadas, enfocan su reinado de una forma mucho más tranquila y relajada. Eso ha hecho que, imprescindiblemente, tenga que evolucionar tanto su vida protocolaria como su vida familiar.

Familia real selfie
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Cada una en un lugar del mundo, mientras Leonor está de formación militar en el buque militar Juan Sebastián Elcano y la hermana pequeña, Sofía, estudiando en Gales, en contacto entre ellos es continuo, pero el día a día ha cambiado enormemente, y así seguirá siendo a medida que cada una de ellas va definiendo su propia vida.

Leonor y Felipe 

Pero si ha habido una conexión especial, como hemos comentado, ha sido la de Felipe VI y su hija mayor Leonor, que no cabe duda de qué rey y heredera hacen un tándem perfecto entre responsabilidad y cariño. Y han dejado estampas icónicas. Por ejemplo, fue su apoyo firme cuando la joven Leonor hizo una lectura pública de la constitución para celebrar el aniversario de la carta magna. Su padre no se separó de ella ni un momento. 

Felipe y leonor
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Años más tarde, otro momento histórico sucedió, en esta ocasión en Oviedo, Asturias, donde la Princes Leonor está cogiendo el testigo de los premios que antes llevaban el nombre de su padre y que son uno de los mayores reconocimientos del país. Ver a la heredera ir poco a poco reclamando su espacio, bajo la mirada cariñosa de su padre, es algo muy especial para la familia. 

Princesa de Asturias
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Desde que Leonor inició su formación en la Academia Militar de Zaragoza, y después en Marín, su padre ha sido su principal apoyo, ya que sigue sus mismos pasos de formación militar. En varios actos oficial hemos podido ver instantes en los que el rey Felipe la miraba con una mezcla de orgullo y emoción.

Felipe y leonor
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A medida que Leonor y Sofía crecen, el papel del rey Felipe como padre sigue mostrándose sólido, lleno de gestos de cariño sutiles, pero significativos. Aunque el protocolo imponga ciertas normas, hay miradas, sonrisas y pequeños detalles que rompen la formalidad y nos recuerdan que, detrás del monarca, hay un padre que no duda en expresar su amor por sus hijas, incluso públicamente.