La temporada de primavera/verano siempre ha sido el escenario perfecto para la experimentación y la creatividad en el mundo de la moda. Con la llegada del buen tiempo, las colecciones de las grandes casas de moda y diseñadores emergentes se llenan de energía, ligereza y, sobre todo, innovación. De cara al 2025, las pasarelas no han decepcionado, presentando propuestas que mezclan tradición, vanguardia y sostenibilidad, adaptándose a un público cada vez más exigente y diverso.
Cada año, la primavera trae consigo una invitación a renovar nuestro estilo. Es el momento de abandonar las capas invernales y dar paso a tejidos más frescos, colores vivos y prendas que celebran la libertad y el dinamismo. Este año, sin embargo, hemos visto un enfoque más reflexivo en las colecciones: el lujo silencioso, los diseños funcionales y la atención al detalle han ganado protagonismo.
Esta próxima temporada también refleja un equilibrio perfecto entre nostalgia y modernidad. Mientras algunos diseñadores han recuperado elementos icónicos de décadas pasadas, otros han apostado por formas futuristas, materiales tecnológicos y propuestas completamente nuevas. Las pasarelas de Milán, París, Nueva York y Londres han sido un desfile de creatividad, donde los estilos más clásicos conviven con las corrientes más audaces.
Con esta mezcla de innovación, moda retro y compromiso ético, las colecciones de primavera/verano 2025 nos invitan a explorar nuevas formas de expresarnos a través de la moda. Desde los colores y cortes hasta los materiales y detalles, cada tendencia nos ofrece una oportunidad para reinventarnos. Por ello, vamos a hacer un repaso por las más destacadas, así que saca papel y lápiz para apuntar lo que estará de moda con la llegada del buen tiempo.
El renacer del crochet
El crochet vuelve con fuerza, reinterpretado en clave contemporánea. Marcas como Acne Studios, Ralph Lauren y Kenzo lo llevaron a la pasarela en vestidos largos, tops y accesorios, apostando por un enfoque artesanal y sofisticado. Los colores naturales, como el beige y el blanco, dominan, pero también hay opciones vibrantes que añaden un toque fresco y juvenil. Este tejido, que respira verano, combina perfectamente con sandalias planas o accesorios bohemios, abogando en su mayoría por el total look.
Transparencias etéreas
Las transparencias son una tendencia indiscutible. Diseñadores como Fendi, Hermès y Alaïa apostaron por tejidos livianos como la organza, el tul y la gasa, creando piezas que insinúan sin mostrar demasiado. Los vestidos con transparencias en capas y los tops semitransparentes son ideales para las noches cálidas, mientras que los detalles bordados añaden un toque de lujo. La clave del éxito está en combinarlos con piezas más sólidas para equilibrar el look.
Siluetas oversized
Las prendas de gran tamaño, que ya llevan varias temporadas en tendencia, seguirán siendo protagonistas. Marcas como Balenciaga, Saint Laurent y Loewe presentaron blazers extragrandes con hombreras que nos trasladan a los años 80, pantalones anchos y vestidos fluidos que combinan estilo y funcionalidad. Estos diseños no solo son cómodos, sino que también aportan una estética relajada y moderna perfecta para todo tipo de ocasiones. El truco está en equilibrar las proporciones con prendas más ajustadas o accesorios estructurados.
El resurgir del denim
El denim se reinventa una vez más para conquistar el verano. Chanel y Stella McCartney llevaron este material a nuevos niveles, con propuestas que incluyen conjuntos de dos piezas, vestidos maxi y detalles bordados, haciendo del clásico jean la última de las opciones. Los lavados claros y los acabados deshilachados son los favoritos de la temporada, aunque otras alternativas como la pedrería también se encuentra en el radar de novedades. La versatilidad de este tejido permite adaptarlo a cualquier ocasión, desde looks casuales hasta combinaciones más sofisticadas.
El lujo del “quiet luxury”
El concepto de lujo silencioso, basado en piezas de alta calidad y diseño discreto, sigue ganando adeptas una temporada más. The Row, Max Mara y Bottega Veneta lideran esta corriente con propuestas que destacan por su elegancia minimalista y gran calidad. Tejidos como la seda, el lino y el cashmere se presentan en tonos neutros y cortes impecables, reflejando un enfoque más consciente del consumo y apostando por el lema de “menos es más”.
Motivos florales en clave maximalista
En contraposición a la tendencia anterior, las flores, un clásico de la primavera, se transforman en patrones audaces y colores intensos. Carolina Herrera y Dries Van Noten apostaron por estampados florales en tamaño XXL, tanto en vestidos como en conjuntos coordinados, creando prendas statement que serán el foco de todas las miradas. Estas piezas llenas de vitalidad son perfectas para eventos al aire libre, y su versatilidad permite combinarlas con accesorios minimalistas o complementos atrevidos (según las preferencias).
Balletcore
La tendencia balletcore se reafirma como una de las más importantes para la primavera/verano 2025, trayendo a las pasarelas la elegancia etérea del ballet clásico reinterpretada con un enfoque nuevo. Firmas como Miu Miu, Simone Rocha y Ferragamo han explorado este estilo con faldas de tul vaporoso, mallas traslúcidas y bailarinas satinadas en tonos pastel. La inspiración de los ensayos de danza se traduce en prendas funcionales y románticas, como suéteres off-shoulder, calentadores tejidos y cintas delicadas que envuelven los tobillos, ideales tanto para el día como para la noche.