Si hay un básico que no puede faltar en un armario es sin duda el pantalón. La mayoría de las mujeres los llevan casi a diario, desbancado a faldas y vestidos, por su comodidad y versatilidad. Encontrar tus pantalones ideales, esos que te hacen tipazo, es un objetivo que nos tenemos que marcar si queremos vernos impecables siempre.
Para ello, lo primero es conocer tu cuerpo. Si eres capaz de reconocer el tipo de silueta que tienes y saber lo que te interesa potenciar o camuflar, tendrás mucho terreno ganado. Porque no se trata solo de mirarte de cintura para abajo para elegir un pantalón, dependiendo de la proporción entre tu torso y extremidades pueden sentarte mejor unos que otros.
Para encontrar el pantalón ideal tienes que fijarte en los siguientes puntos
- El color. Los colores oscuros estilizan más que los claros, y las texturas mate más que las brillantes. Si te interesa disimular el ancho de tus piernas es mejor optar por la lana negra que por el raso beige.
- El tejido. Los tejidos muy gruesos como la pana o el tweed te pueden añadir volumen y hacerte parecer más ancha. Si los eliges, busca un corte que sea ajustado a la cadera y de pierna ancha que no se pegue al cuerpo. Para pantalones ajustados te interesan tejidos con fibra elástica para que te resulten cómodos y se ajusten a tus formas. Por ejemplo, en un tejido con cuerpo como un vaquero, esta mezcla puede hacer un efecto modelador al comprimir el cuerpo. Por último, los tejidos más ligeros y con caída son los más adecuados para pantalones de pinzas o muy anchos.
- Largo del tiro. Si el pantalón es de tiro alto y te llega hasta la cintura te puede ayudar a compensar una silueta de torso largo y piernas cortas. Sin embargo si tienes algo de tripita y un pecho muy grande te sentará mejor uno asentado en la zona de la cadera.
- Cinturilla. Evita las que te constriñen provocando los antiestéticos michelines que sobresalen por encima del pantalón, pero evita que te vaya muy holgada si no quieres añadirte una talla. Es mejor apostar por cinturillas anchas que se asientan mejor en tus formas. Si tienes problemas de hinchazón abdominal busca pantalones con el trozo posterior de la cinturilla elástica para tener unos centímetros de margen.
- Corte. Un pantalón de pinzas es una buena opción si tienes algo de tripita que disimular, pero también si eres muy recta de caderas y necesitas crear formas en tu silueta. Los pantalones sin pinzas son más adecuados en personas de vientre plano y también con el contorno de cintura ancho pero con las piernas muy delgadas. Fíjate también en la forma de los bolsillos, si se abren mucho pueden añadirte volumen a la altura de las caderas, o si el forro de los mismos se marca sobre el muslo puede afear mucho la línea del pantalón.
- La pernera. Los pantalones pitillo ponen en evidencia tanto unas piernas muy gruesas como las muy delgadas, evítalos si no tienes las piernas bien torneadas. Los de pierna recta son más favorecedores ya que caen rectos desde la cadera y ayudan a disimular la forma real de tu pierna.
- La retaguardia. Es importantísimo mirar cómo te quedan por detrás unos pantalones, sobre todo si son ajustados ya que debes evitar aquellos que te marcan la ropa interior o la celulitis. En el caso que el pantalón tenga bolsillos en la parte posterior, la posición y tamaño de los mismos puede cambiar mucho la percepción del tamaño de tus nalgas. Por último si el pantalón te queda demasiado ancho por detrás y hace bolsas en las nalgas o caderas, tampoco será la mejor opción.
Ahora que tienes claros algunos puntos generales vamos a ver los principales tipos de pantalones y cómo se adaptan a tu tipo de cuerpo. ¿Te apuntas?